La aventura de Laura Cañal y María Rodríguez: cómo viajar hasta Indonesia en una minicamper

14 meses desde España hasta Indonesia en una furgoneta camperizada. Así contaron su gran aventura en las Jornadas IATI de los Grandes Viajes.

Viaje a Indonesia en minicamper Borneo
Viaje a Indonesia en minicamper Borneo / Laura Cañal y María Rodríguez

En verano de 2019, Laura Cañal y María Rodríguez camperizaron su Volkswagen Caddy y se lanzaron a recorrer mundo. Una batería, una cocinilla, una garrafa de agua y muchas ganas de aventura fueron suficientes para empezar el viaje, que las llevaría hasta Indonesia en unos 14 meses. En total, unos 36.000 kilómetros desde Europa, cruzando Rusia, Corea y Japón y llegando hasta Indonesia, donde la pandemia de covid las hizo regresar. Vandeviaje llamaron a este proyecto, por lo de que van significa furgoneta…

En Isla de Flores, Indonesia.

En Isla de Flores, Indonesia.

/ Laura Cañal y María Rodríguez

Su aventura la contaron con detalles el sábado 22 de abril en las Jornadas IATI de los grandes viajes que se celebraron en Madrid coincidiendo con el décimo aniversario de este evento en el que viajeros de todo tipo comparten sus experiencias inspirando nuevos viajes. Sus próximas citas serán en Bilbao (los días 17 y 21 de mayo) y en Barcelona (6, 7 y 10 de junio). 

Momento de la charla de María y Laura en las Jornadas IATI de los Grandes Viajes de Madrid.

Momento de la charla de María y Laura en las Jornadas IATI de los Grandes Viajes de Madrid.

/ Ignacio Izquierdo

El miedo a volar de María fue el que las llevó a optar por un vehículo propio para recorrer el mundo. “El primer día de viaje quisimos dormir en la furgo y dormimos en un camping de Getafe”, contaron entre risas. Superada esa noche, partieron rumbo a Rusia, donde les esperaba la primera gran frontera del camino. Tras siete horas esperando para cruzarla, ambas llegaron a la conclusión de que los miedos del viaje no te pueden paralizar. Sobre todo, cuando tras esos miedos te esperan lugares tan increíbles como el lago Baikal o Vladivostok

María y Laura en el templo Pura Penataran Agung Lempuyang en Bali.

María y Laura en el templo Pura Penataran Agung Lempuyang en Bali.

/ Laura Cañal y María Rodríguez

Desde la ciudad portuaria rusa cogieron un ferry y embarcaron hacia Corea, “la gran desconocida”, según María y Laura. “Sus templos, sus parques naturales, su comida picante, su gente… Estuvimos un mes y pico allí”, señalaron. 

Las tres premisas del viaje

Durante esta aventura, María y Laura intentaron cumplir siempre las tres premisas que se habían fijado de antemano. La primera, no entrar con la furgoneta en el centro de las ciudades. La segunda, no conducir de noche. Y la tercera, no comer cosas crudas. Sin embargo, todas las incumplieron, contaron entre risas. 

Uno de los momentos más extraños del viaje tuvo lugar en la zona desmilitarizada entre Corea del Norte y Corea del Sur. “Nos dijeron que ‘no cámaras”, cuentan. 

En el Parque Nacional de Kelimutu, en Isla de Flores, Indonesia.

En el Parque Nacional de Kelimutu, en Isla de Flores, Indonesia.

/ Laura Cañal y María Rodríguez

Desde Corea volvieron a coger un ferry hasta Japón. “Cuando todo el mundo dice que Japón es muy bonito, tienen razón”, fue su conclusión. “Sobre todo recorrimos la isla sur”, explican. “Japón está lleno de ‘no lugares’, esos sitios que no sabías que existían y que te impresionan.” Volviendo a la conducción de la minicamper, Japón fue el primer país que las obligó a conducir por la izquierda. “Los japoneses no te pitan ni nada, se conduce muy bien en ese sentido, pero las carreteras nacionales son muy estrechas, por lo que tardas como cinco horas en recorrer 100 kilómetros”, explicaron. Tras dos meses y pico en Japón, su estancia en la isla se acababa. Sin embargo, decidieron finalizarla por todo lo alto: pasando los últimos días junto al Fuji. 

Camino a Kioto.

Camino a Kioto.

/ Laura Cañal y María Rodríguez

Tras Japón, María se armó de valentía para coger un avión rumbo a la isla de Borneo. Aterrizaron en Kota Kinabalu y pese a sus elogios hacia la isla (“Es isla espectacular, todo selva, jungla, con un verde muy impactante…”), ambas denuncian la deforestación brutal que se está ejerciendo, “sobre todo en Malasia, donde han plantado palmeras para sacar aceite de palma”. 

Tras recorrer varias islas en la zona, llegaron a Java. Unos días después, sus familiares irían a visitarlas a Bali, un lugar “algo sobremasificado, pero es un sitio único, muy bonito”. Tras visitar Lombok, isla de Flores, Komodo y sus dragones… llegó la pandemia de covid. María y Laura decidieron entonces regresar a Bali, donde había consulado. Pese a la interrupción abrupta del viaje, lograron vivir uno de los mejores momentos de la aventura: vivir Bali sin turismo. 

Y hasta aquí llegó su aventura de 14 meses. ¿La próxima? Parece que en 2024… Estaremos atentos a Vandeviaje.com.

María y Laura en las Jornadas IATI de los Grandes Viajes de Madrid.

María y Laura en las Jornadas IATI de los Grandes Viajes de Madrid.

/ Ignacio Izquierdo

¿Con qué dinero hicieron el viaje?

Mientras sus viajes anteriores como mochileras los habían financiado con ahorros, para este proyecto se dieron cuenta de que tenían que ingresar dinero. Así que ambas fueron dando clases de español por el camino, de forma telemática, para conseguir algo de dinero. “Las dábamos dentro de la furgoneta. Parábamos dos o tres días, trabajábamos y luego seguíamos la ruta”, cuentan. 

Parque Nacional de Komodo, Indonesia.

Parque Nacional de Komodo, Indonesia.

/ Laura Cañal y María Rodríguez

Tras realizar un viaje de tales dimensiones, María y Laura recabaron algunas enseñanzas que pueden ser válidas para cualquier viajero. Una de ellas es que “es imposible tenerlo todo controlado”. Sin embargo, eso no tiene que ser un impedimento. “Cuando planeas un gran viaje, parece difícil, pero en el día a día todo es más sencillo. Si no puedes ir a ese sitio hoy, pues irás mañana, no te queda otra”, recomiendan. 

A nivel práctico, dormían casi siempre en la furgoneta, aunque también incluyeron algunos hostales en el camino. Para ducharse, aprovechaban las paradas de camioneros en Rusia o los onsen en Corea y Japón (“Ambos países son un paraíso del baño público”, cuentan). 

Cómo empezó todo

Como contaron Laura y María en las Jornadas IATI de los Grandes Viajes de Madrid, el germen de su viaje en minicamper hasta Indonesia se gestó unos años antes. En 2010, ambas se fueron a vivir a Madrid (María es de Alicante y Laura, de Oviedo) y con la realización por parte de María de un curso de documentales les empezó a picar el gusanillo de salir a grabar fuera de España. Así nació RECMONDO, un proyecto que empezó en 2013 y en el que grabaron a 55 niños de 22 países con la intención de mostrar que todos somos iguales a través de la visión de la infancia. Entre esos países están Nueva Zelanda, India, Nepal, China, Mongolia, Rusia… y parte de Europa. Tres continentes.

Museo en Ulán-Udé, Siberia Oriental.

Museo en Ulán-Udé, Siberia Oriental.

/ Laura Cañal y María Rodríguez

Sin embargo, el proyecto RECMONDO no acabó con ese viaje. Las posteriores aventuras de María y Laura también incluyen grabaciones de niños que ir incluyendo en el proyecto. 

Síguele la pista

  • Lo último