Quirónsalud: servicio integral al viajero internacional
La Fundación Jiménez Díaz ha puesto en marcha este servicio con un equipo de expertos que cuidan la salud del viajero antes, durante y después del viaje.
Las maletas se llenan de ilusión para explorar los rincones más recónditos del planeta, y no queremos que el viaje se convierta en una pesadilla que se podría evitar. Toda precaución es poca, así que no olvides cargarlas con información, precaución y un botiquín. Hay destinos que no están exentos de riesgos, por las condiciones epidemiológicas del lugar o la existencia de enfermedades, especialmente en zonas tropicales, con muchas posibilidades de transmisión por ser ajenas a nosotros. Otras veces son las características del individuo y su salud las que determinan si está listo para emprender su aventura con éxito.
Quirónsalud ayuda a los exploradores del mundo a viajar con seguridad. Concretamente, el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz en Madrid ha inaugurado recientemente su Servicio de Atención Integral al Viajero Internacional (SAIVI) y proporciona la información y el asesoramiento necesarios, así como la inmunoprotección, para desembarcar en los destinos más exóticos sin tener que buscar un médico o acabar en un hospital. Sus médicos especializados en salud del viajero informan y aconsejan para prevenir cualquier enfermedad y cuidan de forma integral la salud del trotamundos antes, durante y después de su experiencia. Son profesionales con formación específica y experiencia en prevención, inmunización, diagnóstico y tratamiento.
Antes del viaje
La doctora María Dolores Martín Ríos, jefa del Servicio de Medicina Preventiva de la Fundación Jiménez Díaz, aconseja que cualquier persona que viaje a un destino en el que exista algún riesgo para su salud “puede y debe consultar antes de irse con el SAIVI”. Lo recomendable es ir a la consulta previaje al menos entre cuatro y ocho semanas antes de partir. La doctora Ríos insiste en “debe” porque la mayoría de las vacunas y profilaxis no son obligatorias, pero muchas veces “son necesarias para preservar la salud”.
En la consulta clínica previaje, los profesionales recopilan todos los datos sanitarios del viajero, el destino y los planes previstos —tipo de alojamiento, tiempo de permanencia, actividades, etc.—, y con toda la información evalúan los riesgos y determinan si es necesaria la vacunación, las pautas de profilaxis o un tratamiento específico.
El cuidado del viajero es integral porque, además de las medidas preventivas generales e individuales, el equipo médico del SAIVI asesora sobre qué debe incluir el botiquín básico y específico, en función de las posibles patologías o riesgos; el tipo de ropa, calzado y complementos recomendables y sobre otros temas de interés, como las picaduras de mosquitos, los animales venenosos que pueden encontrar, los riesgos de la exposición al sol y un largo etcétera de recomendaciones para afrontar los problemas que el viajero ni se plantea, pero que hay que conocer para saber cómo se deben resolver.
Durante el viaje
Los médicos del SAIVI acompañan también, aunque telemáticamente, al explorador y le infunden tranquilidad y seguridad. Se puede contactar con ellos para conocer información sanitaria del destino que se va a visitar, solicitar la atención de un médico especializado o incluso pedir asesoramiento por correo electrónico.
Ya en casa
Si el trotamundos ha sufrido algún problema de salud y continúa con síntomas cuando regresa a su casa, los doctores de este Servicio de Atención Integral al Viajero Internacional tienen la formación específica, mucha experiencia para el tratamiento y diagnóstico de enfermedades tropicales y del viajero y, además, están al día de las alertas epidemiológicas.
Fundación Jiménez Díaz
Fundado por el doctor Carlos Jiménez Díaz hace 80 años, este hospital universitario pertenece al grupo Quirónsalud y sus profesionales están comprometidos con la labor asistencial, docente e investigadora.
Cuenta con su propia Escuela de Enfermería y un Instituto de Investigación Sanitaria, que nació en 2009 con el convenio con la Universidad Autónoma de Madrid y cada cinco años renueva la acreditación del Instituto de Salud Carlos III.
Se ubica en Madrid, en Moncloa, en el número 2 de la avenida de los Reyes Católicos. Aunque es privado, tiene un concierto con la sanidad pública en gran parte de su cartera de servicios.