Este es el mejor amanecer de España... y no está donde crees

Hay paisajes que constituyen un espectáculo único e indescriptible. La playa de Aguas Santas, más conocida como la playa de Las Catedrales (Lugo) es uno de esos lugares que sobrecogen al viajero y le reconcilian con la vida, la naturaleza y el medio ambiente. Si a eso sumamos un amanecer, podemos encontrarnos ante una de las imágenes más impactantes del mundo.

Ver como el sol sale por el horizonte, el silencio, la quietud, el ruido de las olas chocando contra las piedras… si aquí no hace aparición Stendhal con su síndrome de la mano, nosotros ya no sabemos ni qué decir.

La playa de Las Catedrales

A lo largo de millones de años, las aguas del mar Cantábrico han ido esculpiendo y erosionando a su antojo las pizarras y cuarzitas que conforman las rocas de la Playa de las Catedrales. Han creado largos pasadizos, imponentes arcos de más de 30 metros de altura y cuevas profundas que nos revelan la perfección de la naturaleza.

Si se quiere disfrutar del amanecer desde esta ubicación, hay varias alternativas. Se puede contemplar o bien desde alguno de los miradores habilitados o desde el propio arenal a pie de playa. ¿Nuestro consejo? Bajar a la arena y descubrir como el sol se va a abriendo paso entre las rocas y arcos. Por mucha cámara que tengas, por muy buen fotógrafo que seas, las imágenes que captures nunca podrán hacerle justicia al espectáculo que acabas de presenciar.

La playa, declarada monumento natural por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Galicia, suele ser un hervidero de exploradores deseosos de fotografiar un lugar único, lo que puede echar para atrás al viajero que busca experiencias más íntimas. De cualquier manera, conviene saber que, a la hora de salir el sol, la afluencia de público es casi inexistente.

Si estás planeando disfrutar con tus propios ojos del amanecer más bonito de España, conviene que tengas en cuenta algunos datos prácticos.

Para acceder a la playa de Las Catedrales se necesita reserva previa en Semana Santa, julio, agosto y diciembre. El resto del año se puede visitar libremente. También resulta fundamental conocer la tabla de mareas, puesto que solo si visitamos el lugar en el momento de bajamar, podremos recorrer los estrechos pasillos entre los acantilados, grietas, cuevas y pasar bajo sus enormes arcos.

Otros amaneceres indescriptibles

El amanecer que se puede contemplar desde la playa de As Catedrais es único, pero la realidad es que la salida del sol es un momento místico que puede disfrutarse desde cualquier ubicación. En España, el punto geográfico en el que se ve primero se encuentra en Es Castell, municipio al norte de Mahón (Menorca). Si quieres presumir de ser el primero en vislumbrar un rayo de luz, el puertecito pesquero de Calesa Font será un patio de butacas inmejorable.

Y de Menorca, nos trasladamos hasta Valencia. Allí, en la zona de la Albufera, sentado en el embarcadero y con los pies colgando, podrás ver como sale el sol e ilumina todos los arrozales en un espectáculo visual sin parangón que, además, es totalmente gratuito.

Por último, no podemos dejar de recomendarte otro lugar único para contemplar el amanecer: el parque Nacional de Monfragüe, un auténtico refugio de la fauna mediterránea. Si te desplazas hasta allí, seguramente no estés solo a la hora de presenciar la salida del sol, puesto que los zorros que viven en el parque aprovechan las últimas horas de la noche y las primeras de la mañana para cazar. Vamos, con un poco de suerte, podrás ver el amanecer y presenciar en directo el almuerzo de este animal cinegético.