Hablamos con 'Alan por el mundo': “Viajar no cambia tu vida automáticamente, pero puede cambiarla”

El creador del exitoso canal de YouTube viajero, que va camino de los cuatro millones de suscriptores, se ha lanzado a la letra impresa. Alan Estrada es ya (además de creador de contenido, actor, director, productor y demás) escritor. Su primer libro se llama 'Viajar cambiará tu vida', se lo ha editado Geoplaneta y es toda una lección de vida para los viajeros.

Entrevista con Alan Estrada, el creador del canal de YouTube 'Alan por el mundo'.
Entrevista con Alan Estrada, el creador del canal de YouTube 'Alan por el mundo'. / Alan Estrada

Para Alan Estrada, uno de los creadores de contenido de viajes en español más importantes del mundo, viajar puede cambiarte la vida, viajar puede sanarte, viajar puede ayudarte a crecer. Pero “puede”. El resto tienes que ponerlo tú. En su caso, él lo ha puesto todo en el asador y tras décadas recorriendo el mundo se ha animado a compartir en libro lo que ha aprendido en sus viajes. Hasta ahora, lo había hecho a través de su exitoso canal de YouTube, Alan por el Mundo, y de sus diferentes redes sociales, pero Alan ha dado el salto a la letra impresa bajo el paraguas de Geoplaneta con el libro Viajar cambiará tu vida. 10 lecciones que aprendí al recorrer el mundo.

En Cuba.

En Cuba.

/ Alan Estrada

Hay lecciones que nos llevan a ser niños de nuevo, a viajar de forma responsable, a apreciar la diversidad del mundo. Aprovechamos para charlar con él sobre todas estas lecciones durante su paso por Madrid, ciudad en la que ya vivió mientras ejercía otra de sus múltiples facetas, la de actor, cuando interpretó a Mario en el musical Hoy no me puedo levantar. Una faceta que, por cierto, no ha abandonado. Después de participar en múltiples películas, en televisión y en teatro, Alan se lanzó a la dirección teatral con la obra Siete veces adiós. Pero ahora, hablemos de su libro...

-¿Cómo y cuándo surgió la idea de escribir este libro?

Pues hace tiempo, hace unos seis años. Entonces pensé que hay muchas editoriales, hay muchos libros de gente que hace creación de contenido y yo sabía que si yo voy a hacer un libro, uno, lo voy a escribir yo. Aunque parezca una tontería, escribir yo de mi puño y letra, y quiero que hable de esto, no voy a hacer una guía de viajes. Es una tontería. Además, con lo rápido que cambia todo, se actualizaría en dos días. Es un libro de reflexiones viajeras y de reflexiones de la vida a partir de las experiencias que he vivido viajando y tardé mucho en escribirlo porque era consciente de que me iba a costar mucho trabajo escribir algo que estuviera a la altura de lo que a mí me gusta leer. Y entonces me juzgaba mucho. Todo el tiempo me juzgaba, era muy difícil, pero al final como me dije: déjalo ir y que sea lo que tenga que ser.

Portada de 'Viajar cambiará tu vida'.

Portada de 'Viajar cambiará tu vida'.

/ Geoplaneta

-El primer viaje grande que hiciste fue el accidentado viaje a la India del que hablas en el libro, en 2004. Dices que la India es el lugar donde nació tu yo viajero. ¿Qué es lo que te marcó tanto de la India?

La India influye. Eso no es un país, es un asalto a los sentidos. Pero también tiene mucho que ver quién era yo. Entonces, al enfrentarme de manera tan agresiva a otra realidad, a otros colores, otros sabores, otras religiones, era demasiado abrumador esa incomodidad que hay. Estoy convencido de que la incomodidad en los viajes ayuda al crecimiento. Fue lo que me sacudió y abrió en mí una llave de preguntas y preguntas que solo encontré respuesta leyendo. Yo no leía antes de ese viaje, no me gustaba leer.

-20 años después de aquel viaje a la India, ¿cuál es el cambio más grande que has notado en ti?

Pues yo creo que soy un poco más pacífico. Creo que hay un poco más de tranquilidad en mí. Siempre he sido muy energético, muy activo y creo que con el paso del tiempo... tendrá que ver la edad. También como que me calmé un poco. Antes armaba mis itinerarios pensando del punto A al punto B y no necesariamente ponía atención en lo que había en medio. Y ahora trato de detenerme un poco más a descubrir y cómo ese descubrimiento me genera un replanteamiento incluso de mi propio trabajo.


Su arriesgado viaje al Titanic

En verano de 2022, Alan Estrada se convirtió en el primer mexicano en visitar los restos del Titanic, a 3.800 metros de profundidad. Lo hizo con una de las Titanic Survey Expeditions de la empresa OceanGate.

Alan, junto al Titanic.

Alan, junto al Titanic.

/ Alan Estrada

A través de cuatro vídeos, Alan contó en su canal de YouTube esta experiencia con todo detalle tras un intento fallido en verano de 2021. En 2023, un sumergible de la misma empresa sufría un accidente intentando la hazaña, provocando la muerte instantánea de sus cinco ocupantes. El miedo del que habla Alan en sus vídeos antes de bajar en la cápsula estaba justificado.


-¿En qué andas ahora?

Estoy haciendo una serie de vídeos en París. Estoy renovando todos mis vídeos de París. Una guía completa de París de cara a los Juegos Olímpicos. Estoy revisitando muchísimos lugares. Hay algunos nuevos.

-Has hecho algún viaje donde no has grabado nada ni lo has subido a redes, ¿verdad?

Sí, muchos. Y hago un viaje al año con mi familia, que es sorpresa para ellos. Yo lo planeo. Les digo tal fecha, tal clima y poco a poco se van enterando dónde vamos. En ese viaje no grabo nada, solo les tomo fotos a mi familia. Hago muchos viajes donde no grabo. O sea, de hecho estoy en París y luego me voy a Ámsterdam y en Ámsterdam no grabo, solo me quedo unos días ahí, me lo regalo.

Con amigos y familia en San Francisco.

Con amigos y familia en San Francisco.

/ Alan Estrada

-¿Crees que viajar es bueno para la salud?

Pues no tengo las credenciales médicas para asegurarlo, pero sí estoy convencido de que por supuesto. Y lo he hablado con mi terapeuta, cómo los viajes pueden ser un complemento para cualquier proceso terapéutico o de duelo. Es decir, viajar per se no sana. De hecho, viajar no cambia tu vida automáticamente, puede cambiarte tu vida. Viajar puede ayudarte a sanar, viajar puede ayudarte a crecer, puede. La decisión está en ti. Y sí, creo que viajar puede ayudar en un proceso terapéutico. Yo lo he hecho en momentos de mi vida en el que he estado deprimido o he estado pasando por algo difícil en mi vida. Una vez me vine a Madrid 10 días. Estaba pasando un momento difícil en mi vida y dije: ‘Quiero irme a Madrid, quiero estar lejos de casa, quiero ver a mis amigos de aquí, de Madrid, quiero distraerme’. Y ayuda, ayuda. Aunque uno siga cargando con su mochila.

-Cuando estuviste aquí en Madrid haciendo el musical Hoy no me puedo levantar, algún tiempo libre te quedaría para conocer la ciudad, ¿no?

Sí, sí, todo. Es muy curioso, porque en esa época David Carrillo, que es otro actor que estaba en el elenco y que sigue siendo uno de mis mejores amigos, yo le decía: ‘Vente conmigo, vamos’. Y entonces él conoció Madrid, la ciudad donde nació y creció, gracias a mí. Y conocí más lugares. Me acuerdo que hasta fuimos en ese año a la Expo Zaragoza. Lo que me gustó mucho de Madrid, que sigo sin encontrar otra ciudad del mundo que se le equipare (a lo mejor Berlín, pero yo no hablo alemán y no es igual), es la fiesta. Madrid tiene una fiesta... Cualquier día, a cualquier hora. Impresionante. Y en verano se ve muy bien, con las calles llenas. Eso no sucede en mi país.

En México.

En México.

/ Alan Estrada

-Ahora que citas México, ¿qué puedes contarnos de la localidad donde naciste, Tepatitlán de Morelos?

Nací y me crié allí hasta los 18 años. Y me siento muy feliz de haberme criado ahí. Fue una ciudad que me dio muchos valores en muchos sentidos y luego otros no tanto. Es una ciudad muy conservadora, pero me gusta y, aparte, que yo le veo su potencial turístico. En México tuvimos algo que se llamó la Guerra Cristera, que fue una guerra religiosa. Y mi ciudad está llena de túneles que se utilizaron durante la época cristera, que utilizaban los ejércitos cristianos para trasladarse y generalmente conectan iglesias. Pero no están abiertos al público y hay miles de leyendas.  

-¿Recuerdas cuál fue el primer vídeo que subiste a tu canal de YouTube? Aparece uno en Times Square y Central Park hace 13 años…

Lo subí en el 2010, pero ese viaje lo hice en 2008, justo antes de venirme a vivir a Madrid. Los vídeos que yo subí de mis primeros viajes eran los vídeos de mis vacaciones. Nunca estuvieron destinados a subirse a YouTube, pero yo los grababa por una especie de propaganda de viajes para que mi familia los viera. Esos fueron los primeros y los cortaba porque en esa época YouTube no te dejaba subir vídeos de más de 10 minutos.

-En el libro hablas también de esa capacidad de asombro al ver Petra por primera vez y también con Machu Picchu. ¿Te ha pasado últimamente con más lugares?

Muchos, muchos. Yo, por ejemplo, África es un continente que he visitado muy poco y que espero poder visitar más. Me acuerdo cuando fui a Iguazú, también me robó el aliento ese lugar en julio. En general son lugares naturales. Y en México hace poco visité con el bloguero español Enrique Alex El Arco del Tiempo en Chiapas. Es un lugar muy poco visitado y es alucinante. O sea, es un lugar que te vuela la cabeza. Sí, los hay y me mantiene la esperanza. Y también lo digo en el libro. Sé que no voy a poder visitar todos los lugares que quiero. Me voy a morir antes. Uno tiene como esa hambre viajera de querer ir a todos lados ya. 

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