Dark Hedges, la avenida de hayas más mágica de Irlanda del Norte

No hace falta irse muy lejos para disfrutar del espectáculo mágico que ofrecen algunos hayedos como el de Irati, en el País Vasco francés o el del Monasterio de Hermo, en Asturias. Bosques atlánticos que se sitúan entre los 800 y los 1500 metros sobre el nivel del mar y que ofrecen un espectáculo natural único.

Más allá de estos bosques, hoy viajamos hasta el condado de Antrim, en Irlanda del Norte, para descubrir una avenida de hayas que se ha convertido en un reclamo viajero para todos aquellos que disfrutan localizando escenarios de algunas de sus series o películas favoritas. Y Dark Hedges se ha convertido en un punto de referencia para los fans de ‘Juego de Tronos’, ya que ha sido el lugar elegido para rodar algunas de las escenas más míticas de la serie.

Dark Hedges en ‘Juego de Tronos’

La avenida de hayas más mágica de Irlanda del Norte se convierte a lo largo de algunos capítulos de la serie basada en las novelas de George R. R. Martin ‘Canción de hielo y fuego’ en el Camino Real. Una vereda que conecta Desembarco del Rey con el Muro, siendo el camino más conocido en todo Westeros. Así hemos podido ver Dark Hedges cuando el rey Robert Baratheon llega a Invernalia en la primera temporada o cuando Arya viaja junto a los hombres de la Guardia de la Noche en la segunda temporada.

Más allá de esta serie de televisión, este túnel atmosférico también ha aparecido en el filme 'Transformers: el último caballero', y es que desprende un misterio capaz de traspasar la pantalla.

Los orígenes de Dark Hedges

Hace unos 250 años, el arqueólogo y arquitecto James Stuart mandó construir una mansión entre Armoy y Stranocum para satisfacer sus necesidades de vivienda permanente; decidió bautizarla con el nombre de Mansión Gracehill, en honor a su esposa, Grace Lynd y, para conseguir un mayor efecto de grandiosidad, diseñó un acceso que dejara a todos los visitantes boquiabiertos. Para ello, mandó plantar en la carretera que daba acceso a su propiedad unas 150 hayas que, con el paso de los años, crearon este túnel mágico.

Desde hace algunos años se ha convertido en un enclave muy visitado y son muchos los viajeros que acuden hasta aquí para hacerse fotos en este camino que también está rodeado de curiosas leyendas. Muchas de ellas hacen alusión a diferentes espíritus que deambulan por la zona y mueven las ramas de los árboles a su antojo. Se habla, por ejemplo, de la hija de James Stuart, conocida como Cross Peggy o del espectro de una de las sirvientas de la casa que murió en circunstancias bastante misteriosas. La Noche de Muertos también es un momento muy especial para todos aquellos exploradores que visitan la zona.

Dark Hedges en peligro

Esta avenida de hayas está incluida en una lista que recopila los 12 mejores viajes de carretera de Reino Unido e Irlanda, pero, como todo, esto tiene su parte negativa. Y es que debido al creciente número de visitantes, el pavimento se está empezando a deteriorar y esto acaba afectando a la raíz de estos árboles. Suciedad, ruido y vandalismo también están a la orden del día en Dark Hedges.

De las 150 hayas que se plantaron para crear esta mágica avenida, quedan actualmente menos de 90 y, muchas de ellas, están en peligro debido al mal clima de la zona. No hay tormenta que no acabe llevándose por delante alguna. Para hacer frente a este problema, se creó en 2009 la Dark Hedges Preservation Trust, que vela porque la avenida de hayas más mágica de Irlanda del Norte siga preservando su belleza durante muchos años más.