Bucear en la grieta entre dos placas tectónicas en Islandia: la experiencia definitiva
Más allá de nadar con delfines, de bucear con tiburones, de apneas a profundidades increíbles, ahora descubrimos que se puede bucear entre dos placas tectónicas.
El mundo se separa, se junta, se revuelve, y las culpables son las placas tectónicas, o sus movimientos, más bien. Cuando dos de ellas se juntan, se rozan, se golpean, llegan los mares en forma de tsunamis, llegan los temblores, los terremotos. Cuando se distancian se abren fosas, se bucean. Sí, se bucean. Ya hemos visto todo, o eso creemos siempre, pero es en ese momento, cuando uno cree saber, cuando la realidad le abofetea y le trae algo nuevo, algo que no podía sospechar. Más allá de nadar con delfines, de bucear con tiburones, de apneas a profundidades increíbles, ahora descubrimos que se puede bucear entre dos platas tectónicas, que suena parecido a bucear entre la historia más anciana de la tierra. Las placas estuvieron aquí con los dinosaurios, estarán aquí con lo que quede de nosotros. Y, en fin, las buceamos, sí, los seres humanos vamos y las buceamos.
Silfra, la fisura entre placas
Entre las placas tectónicas de América del Norte y Eurasia, en el Parque Nacional Thingvellir, en Islandia, la ahora famosa Silfra es un atractivo para los buceadores más curiosos. La grieta se formó en 1789, mientras en Francia ajusticiaban monarcas, durante unos terremotos que distanciaron las dos placas.
La unión de estas dos placas, también señala la unión de estos dos continentes: Europa y América. Es aquí donde se encuentran y se separan: unos dos centímetros por año. Silfra, hasta donde hemos podido averiguar, es el único lugar del mundo donde se puede bucear entre placas tectónicas.
Aguas limpias y profundas
El agua se filtra a través de la lava subterránea porosa durante 30-100 años antes de llegar al manantial que alimenta a Silfra. Por lo tanto, el agua es extremadamente pura cuando llega aquí y permite una visibilidad submarina de más de 100 metros.
La visibilidad submarina del agua en Silfra rara vez, o nunca, será superada. Se dice que Silfra tiene el agua más clara del mundo; siéntase libre de tomar un sorbo de esta agua prístina en cualquier momento durante su buceo o snorkel. Túneles, cavernas y huecos submarinos se crean continuamente por el movimiento de las placas. Si viajas a Silfra, nunca bucearas en el mismo lugar, podría decir Heráclito.
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