Guía de Moscú

Cómo llegar

Iberia(www.iberia.com) y Aeroflot(spain.aeroflot.aero/eng) unen a diario Madrid y Moscú desde 290 € (ida y vuelta).

Cómo moverse

El transporte urbano moscovita por excelencia es el metro (engl.mosmetro.ru). Está abierto todos los días desde las 5.30 de la mañana hasta la 1 de la madrugada. El billete cuesta unos 0,50 €, y es posible ahorrar algo de dinero comprando bonos de 5, 10, 20 ó 60 viajes.

Aunque se consigue que muchos conductores particulares se conviertan en taxistas con sólo levantar la mano, si no se conocen ni el idioma ni la ciudad ni las tarifas, es preferible utilizar los escasos taxis oficiales (hay paradas en los hoteles y en los almacenes GUM, por ejemplo).

Documentación

Se necesita pasaporte válido por un mínimo de seis meses y visado, que puede gestionarse en el consulado ruso de Madrid (Joaquín Costa, 33. Tlf 91 411 29 57. www.rusmad.com) o Barcelona (Avenida Pearson, 34. Tlf 93 280 02 20. www.rusbar.com).

Moneda

La moneda rusa es el rublo, cuyos céntimos se denominan cópecs. 1 € equivale a 37 rublos aproximadamente.

Dónde dormir

Junto a la Plaza Roja hay un buen número de hoteles de lujo. El más tradicional es el National Hotel(Tlf 258 70 00. www.national.ru). Desde 290 €.

A unos 10 kilómetros del centro se levanta el complejo hotelero más voluminoso (7.500 habitaciones) y asequible (desde 70 €) de Moscú: Izmailovo(Tlf 737 70 70 y www.izmailovo.ru/eng).

Para vivir una auténtica experiencia soviética: Hotel MIR(9, Bolshoi Devyatinsky per., frente a la Casa Blanca. Tlf 290 95 18, 290 92 74 y 290 91 50).

Dónde comer

Quizá lo primero que sorprende al visitante, habituado a unos horarios de comida bien establecidos, es que aquí, en Moscú, no hay rigidez alguna: a todas horas hay gente almorzando o cenando, por lo que la cocina de muchos restaurantes está abierta las 24 horas del día.

Olvídense de cualquier fantasía sobre el caviar barato y la ensaladilla rusa (aquí llamada Olivié). Se imponen los entremeses: caviar negro y rojo, pescados ahumados, arenques acompañados a veces de smetana (deliciosa crema agria) o gribi (champiñones gratinados). Si es amante de las sopas, no deje pasar el borsh (de remolacha); y si tiene apetito, disfrutará con los pelmini, especie de raviolis rellenos de tres tipos de carne. Hay carnes, claro, y en ocasiones incluso de caza, aunque lo más típico son los pescados, sobre todo el salmón y el esturión. Si llega a los postres, prepárese para esa especie de requesón que llaman tvorg o los helados: mucho mejores los tradicionales al corte.

No se extrañe, por otro lado, si su vecino de mesa come con licores. El vodka, el coñac armenio y el champán (sampanskoe) son habituales en las mesas, como lo son las cervezas y el kvas, bebida refrescante fruto de la fermentación del pan negro que es de elaboración casera y se sirve en jarras, aunque ya hay quien lo embotella.

Por lo demás, la restauración moscovita ha despertado al capitalismo generando cadenas que se imponen por la variedad y calidad de su oferta. De las muchas que hay, destacamos:

Taras Bulba. www.tarasbulba.ru. Comida rusa y ucraniana. Inexcusables el borsh y los pelmini con smetana; y de bebida, por supuesto, kvas.

Yolki Palki. www.novikovgroup.ru/restaurants/elkipalki. Ofrecen una carta similar a la de Taras Bulba, pero más económica (entre 6 y 20 €).

Shokoladnitsa. www.shoko.ru. Chocolate a la taza excelente, ensaladas y sándwiches.

Coffee House. www.coffeehouse.ru. Ensaladas y sándwiches.

Sirena. Abierto en 1992, está especializado en pescados. Bolshaya Spasskaya, 15. Tlf 608 14 12. A partir de 45 €.

Galería. Cocina japonesa, europea, asiática, italiana, francesa, rusa y de autor en el seno de una galería de arte que renueva su exposición cada dos o tres semanas. Petrovka, 27. Tlf 790 15 96. De 35 a 55 €.

Bieloe solntse pustini. Pionero de los restaurantes temáticos, que tanto éxito tienen en la capital rusa, recrea el ambiente de la película cuyo título lleva por nombre. Cocina uzbeca, china y árabe. Neglinnaya, 29/14. Tlf 625 25 96. De 35 a 55 €.

Habrá quien piense que el nombre de McDonalds está fuera de lugar en esta guía. Pues bien, el que abre sus puertas en la Plaza Pushkin es, además de un lugar agradable y tecnológicamente puntero (hay wifi y columnas con cascos para escuchar música mientras se come), casi un monumento histórico: fue el primer restaurante de comida rápida occidental en la URSS, y para degustar sus hambuerguesas los ciudadanos esperaban horas y horas a la intemperie.

Dónde comprar

Yeliseyevsky. Este antiguo comercio de ultramarinos de la calle Tverskaya sigue siendo realmente espectacular. Antes lo era por la forma, ahora lo es también por el contenido. Sus productos estrella son, sin duda, el caviar y el vodka. Abierto las 24 horas, 7 días a la semana.

Arbatskaya labitsa (Stari Arbat, 27). Es la tienda de souvenirs moscovita por excelencia: samovares, vajillas de madera pintadas a mano (de Jojlomá), mantelerías bordadas a mano, juguetes de madera... En esa misma calle hay una gran concentración de quioscos en los que puede encontrarse todo tipo de recuerdos rusos y soviéticos.

Dietsky Mir. (www.detsky-mir.ru). Apenas queda rastro de aquellos juguetes de hojalata que hacían las delicias de grandes y pequeños, pero sigue ofreciendo lo mejorcito del entretenimiento infantil made in Rusia.

TsUM (www.tsum.ru). Situado al lado del teatro Bolshoi, pasó de ser una tienda de esas en las que había de todo (de todo lo que había) y muy barato, a ser una concentración de módulos comerciales de ropa y complementos de las marcas más caras del mercado internacional.

GUM (www.gum.ru). La presencia de marcas tampoco es moco de pavo, pero se alternan con tiendas asequibles y espacios comunes con cafeterías y pseudoterrazas en las que además de tomar un piscolabis se puede disfrutar, en ocasiones, de música en directo. Las tres galerías del edificio ayudan a crear ambiente de calle peatonal cubierta y, por tanto, de paseo.

Dior, Ferragano, Chanel, Escada, Ungaro, Cartier, Hermés, Vacherony Vuittonson algunos de los que abren sus puertas a Stoleshnikov pereulok, un trozo de calle aislado de su entorno por la peatonalización y la iluminación, lo que la hace más controlable y también más limpia. En todos lo sentidos. Por un extremo, se abre a la concurrida Petrovka; por otro, continúa hasta la calle Tverskaya por una oscura vía flanqueada de quioscos en los que se vende de todo. No puede haber un contraste más palmario y doloroso de la convivencia del Moscú de ayer y el Moscú que se consolida.

Tretyakovsky proezd es aún más pequeño, un simple pasadizo que une Nikolskaya Ulitsa con Teatralnaya. Sus edificios albergan concesionarios de coches tan de "andar por casa" como Ferrari, Maserati y Bentley (los escaparates dan a Teatralnaya), y marcas de ropa y accesorios tan asequibles como Dolce Gabanna, Gucci, Prada y Roberto Cavalli son algunos de los vecinos.

De copas

Casi todos los locales nocturnos ofrecen bar, café, restaurante y pista de baile en las que la música suena hasta primeras horas de la mañana. Algunas de las salas más de moda son Propaganda(www.propagandamoscow.com. B. Zlatoustinsky, 7 Tlf 624 57 32), Cafe Fresh(www.cafefresh.ru. Dobroslobodskaya, 2/38. Tlf 933 42 52) y Jet Set(www.jetsetclub.ru. Malaya Ordynka, 37/1. Tlf 951 50 06).

Qué ver

La mejor vista de la Plaza Roja, San Basilio, el Kremlin y la Catedral del Salvador la ofrece un puente: el Bolshoi Moskovoretsky Most que arranca detrás de la catedral de San Basilio y cruza el río Moskvá.

Más información

Embajada de Rusia en Madrid. Velázquez, 155. 28002 Madrid. t 91 411 25 24 y http://madrid.rusembassy.org