Rutas, playas y atracciones para un verano perfecto en familia en la Costa Daurada
Con los pescadores de Cambrils
Con los pescadores de Cambrils www.cambrils.cat/turismeSorprende que en una localidad tan turística hoy como Cambrils pueda todavía verse a los pescadores remendando sus redes junto al puerto. La mejor hora, las cinco de la tarde. Es justo entonces cuando, entre un revuelo de gaviotas, llegan de faenar sus barcos de arrastre para descargar cantidades bárbaras de congrios, besugos, lenguados, lubinas, cigalas y demás delicias, como las feísimas pero increíblemente sabrosas galeras de sus fondos. De allí se llevarán de inmediato a las pescaderías del pueblo, incluida la de su Cofradía de Pescadores, que hace tiempo se organizó para comercializar sin intermediarios el fruto de su durísimo trabajo. Para verlos todavía más intensamente en acción, la iniciativa Pesca Turismo permite a los visitantes pasar un día a bordo con ellos.Más apta para ir con niños pequeños, la modalidad de disfrutar de una jornada en un barquito que se arrima adonde andan faenando y que se reserva, igual que la anterior, a través de la Estación Naútica de la Costa Daurada. Desde la Oficina de Turismo se organizan también visitas guiadas por los rincones más curiosos de la villa y, si los chavales han prestado atención durante su experiencia en el puerto, seguro que aprueban el divertido test que les retará a contestar desde por qué la Costa Daurada se llama así hasta cuál es el pescado que lanzan por la borda los marineros. Y es que en este municipio, certificado por la Generalitat tanto con el sello de Destino de Turismo Familiar como con el de Destino de Turismo Deportivo, todo está pensado para los niños, con alojamientos y restaurantes adaptados para los más pequeños, áreas de juego incluso en las playas y una inmensa oferta de ocio entre la que destacan no solo las actividades vinculadas al mar sino también infinidad de rutas en bici a emprender en familia.El heladero mayor de la costaLa Copa del Mundo de Heladería ¡sí, existe y se celebra cada dos años en la ciudad italiana de Rimini! coronó el pasado enero como subcampeón al equipo español, presidido por Antonio Sirvent (www.antoniosirvent.es), hijo de Cambrils y heredero de tres generaciones de maestros heladeros de Jijona. En el paseo frente al puerto abren sus dos locales, donde todo se elabora artesanalmente en su obrador y con productos 100% naturales: la yogurtería y, casi al lado, la heladería en sí, donde además de especialidades más clásicas y una horchata para tocar el cielo, atreverse con sus helados de gin-tonic o de mojito. En verano es probable que haya cola y la terraza ande a rebosar de gente, pero la delicadeza de sus sabores hace que merezca la pena esperar.
Rutas marinas en l'Hospitalet del I'nfant
Rutas marinas en l''Hospitalet del I''nfant www.hospitalet-valldellors.catCon raíces, tallo, hojas y hasta flores, la posidonia no es un alga sino una planta con todas las de la ley, aunque crezca bajo el agua. Los fondos de l''Hospitalet de l''Infant atesoran una suculenta tajada de este hábitat marino endémico del Mediterráneo. De hecho, sus praderas protagonizan las tres rutas subacuáticas que se han ideado en este municipio para los amantes del esnórquel. Basta pertrecharse de unas gafas y un tubo de bucear y poner rumbo hacia la playa de l''Almadrava o la del Arenal. Por todas ellas se han instalado bajo el mar unos paneles, marcados con una boya de color, donde se van aportando fotos e información sobre las muchas especies que pueden verse por cada escenario: erizos, cabrillas y sargos entre las praderas de posidonia; estrellas de mar y caracoles medio enterrados entre los fondos de arena; y desde anémonas hasta mojarras y doncellas emergiendo entre las grietas y las pequeñas cuevas de la ruta conocida como Les Roques.Los tres itinerarios pueden recorrerse por libre o, si se prefiere, en compañía de guías que se contactan a través de la Oficina de Turismo. ¿Más mar? En la escuela de vela del Puerto Deportivo o, a través de la Estación Náutica, desde alquilarse una moto de agua, un barco o unos kayak para surcar la costa en familia hasta decidirse por las aquí muy populares excursiones de paddle surf. De nuevo pueden emprenderse tanto a su aire como con monitor y una embarcación de apoyo, y pocas son tan apetecibles como bordear sobre la tabla la preciosa playa virgen del Torn hasta llegar a la cueva del Llop Marí, accesible solo desde el agua.Mar y montaña en un municipio muy particularBajo el paraguas de L''Hospitalet de l''Infant i la Vall de Llors se engloban las localidades costeras de L''Hospitalet de l''Infant y l''Almadrava, tres más desperdigadas entre las abruptas sierras que se trepan hacia su interior Vandellòs, Masboquera y Masriudoms, amén de un onírico reguero de aldeas abandonadas. Imprescindibles playas tan sorprendentemente salvajes como la naturista del Torn o, tierra adentro, los senderos entre los roquedos y los bosques a emprender en bici, a caballo o a pie. Y una propuesta de lo más didáctica para los niños, el Centro de Interpretación del Aceite, donde ver funcionar la maquinaria original del viejo molino de Vandellòs mientras unos paneles audiovisuales explican los secretos del oro líquido que se degustará al final de la visita.
El Camino de Ronda de Salou
El Camino de Ronda de SalouA ratos junto a la arena y otros directamente sobre los roquedos y acantilados en los que rompen las olas, sus pasarelas de madera se extienden a lo largo de dos kilómetros y medio de fachada marítima: desde la explanada de els pilons, donde antaño amarraban sus barquitas los pescadores, hasta el final de la sorprendentemente salvaje Platja Llarga, aunque luego puede continuarse otros tantos más por senderos señalizados del otro lado del Cap Salou.Este Camino de Ronda, aunque ahora acondicionado para ser recorrido en una excursión muy fácil de emprender en familia, es en realidad el mismo por el que siglos atrás vigilaban los encargados de dar la voz de alarma cuando asomaba alguno de los barcos piratas que arramplaban con todo lo que pillaban y se llevaban como esclavos a sus vecinos. A su paso quedan a la vista los muros del antiguo lazareto en el que guardaban la cuarentena los llegados del mar que pudieran traer alguna enfermedad contagiosa, así como los nidos de ametralladoras que se plantaron en la Guerra Civil para prevenir un posible ataque desde el agua, pero sobre todo preciosas panorámicas desde el faro o rincones como Cala Llenguadets o la Platja dels Capellans. Hoy cuesta creerlo, pero esta playa fue el antiguo puerto natural de Salou. No había otro en toda la costa catalana desde el cabo de Creus hasta el delta del Ebro, de ahí que su importancia fuera tal que Jaume I concentrara en sus aguas a la flota que le acabaría arrebatando Mallorca a los sarracenos.Miniclubs, juegos y más ofertas para niñosAvalada por el sello Turismo Familiar, en la capital turística de la Costa Daurada todo, o casi, está pensado para unas vacaciones en familia: desde hoteles y restaurantes con oferta infantil y hasta juegos tanto por sus arenales como en el anchísimo paseo colmado de palmeras que bordea su playa urbana del Llevant. Esta última con estilosos chiringuitos en los que comer muy bien sin salir de la playa, al igual que ocurre en el que tiene la de Ponent cuenta en verano con un miniclub donde dejar unas horas a los niños al cuidado de monitores. A su vera, las fuentes cibernéticas que al anochecer invitan a disfrutar de su ya clásico espectáculo de luz y sonido. Y como Salou también posee la distinción de Destino de Turismo Deportivo, no faltan ocasiones para practicar volley-playa, actividades náuticas, tirolinas o acercarse al rocódromo del parque Bosc Aventura o recorrer el carril-bici junto al mar por el que pedalear hasta la vecina Cambrils.
Nordic Walking por Calafell
Nordic Walking por Calafell www.turisme.calafell.catHoy en Calafell a nadie sorprende ver pasar a un alegre grupito de caminantes provistos de bastones parecidos a los de esquiar, pero lo cierto es que cuando hace unos años se acercó un vecino por su Oficina de Turismo para hablarles de las maravillas de este deporte, le miraron como a un extraterrestre. La idea sin embargo cuajó, y hoy el Nordic Walking o, lo que es lo mismo, la Marcha Nórdica, es uno de los iconos de esta localidad costera. Cada mañana de los sábados y domingos de marzo a octubre, salvo que haga muy pero que muy mal tiempo, Calafell propone gratuitamente a sus visitantes, sin límite de edad, una salida guiada por un monitor, y les proporciona también sin coste alguno los bastones para echarse a andar.A veces se avanzará a lo largo de sus cinco kilómetros de litoral marítimo, repartidos entre las playas de Calafell, Segur y l''Estany-Mas Mel; en otras se ascenderá hasta la atalaya del castillo de la Santa Creu, erigido en plena conquista cristiana de la zona en el siglo XI y visita imprescindible del pueblo, mientras que en ocasiones especiales se organizan escapadas de varios días fuera incluso de Cataluña. Con distintos niveles de dificultad que oscilan entre caminatas a mayor o menor ritmo de entre hora y media y tres horas, el programa cambia cada fin de semana, añadiéndose una salida extra en las tardes de los miércoles de agosto y alguna que otra concebida para niños. Si ya Hipócrates aseguraba que andar es la mejor medicina para el hombre, el Nordic Walking pone en danza el 90% de los músculos del cuerpo, frente al 70% de caminar sin los bastones. Y todo ello sin machacar las articulaciones ni acabar rendido. Hacerlo en familia y al borde del mar, seguro tiene beneficios añadidos que ni el célebre galeno se habría atrevido a imaginar.Entre brujas, piratas y cosetanosCinco kilómetros de playas de aguas tranquilas y poco profundas, como casi todas en la Costa Daurada, presiden este municipio certificado también como Destino de Turismo Familiar. Además de los servicios hoteleros y de restauración adaptados para los más pequeños a los que obliga este sello, los niños entre 4 y 11 años tienen solo para ellos un Club Infantil donde quedarse jugando mientras sus padres descansan al sol. Y para disfrutar en familia, desde los catamaranes y kayaks de la Escuela de Vela hasta clases de gimnasia en la playa, rutas senderistas y en BTT por los alrededores o, sin falta, la visita a la ciudadela íbera de la villa, en la que incluso ataviarse con un casco cosetano mientras un guía invita a viajar en el tiempo 2.500 años atrás, y la ascensión al castillo de la Santa Creu que domina todo Calafell, donde una divertida aplicación para el móvil permite bucear de la forma más interactiva en sus historias de falsas brujas y auténticos piratas.