22 citas imprescindibles en Londres

Ver y ser vistoDistinción, exclusividad y gente guapa de aquí y de allá. Estaba llamado a ser el último grito del afterwork londinense, la terraza-bar-coctelería nacida para marcar tendencia. Y vaya si lo ha logrado... El Radio Rooftop Bar del flamante ME London, la gran apuesta de la cadena española Meliá en el animado barrio de Strand, es el indiscutible local de moda. Modelos, ejecutivos, publicistas, propietarios de galerías de arte y exponentes de la bohemia inyectada de poder adquisitivo conforman el ambientazo de las cinco de tarde, momento perfecto para, cosmopolitan en mano, ver caer la luz de la ciudad desde esas maravillosas vistas.

Tres citas con el arte y la modaEscultura, pintura y moda. No pueden faltar las exposiciones de la temporada en una ciudad que hace del arte su más renombrada apuesta. Apunte estas tres insólitas citas:Cambios de humor, en Halcyon Gallery, muestra por vez primera la faceta de Bod Dylan –sí, el cantante y compositor– como escultor de hierro. Hasta el 25 de enero.Turner and the sea, en el Museo Marítimo de Greenwich, examina la larga relación que tuvo el pintor inglés con el mar. Hasta el 21 de abril.Paul Smith, en el Museo del Diseño, recrea las etapas que se esconden detrás de una producción de moda. Hasta el 9 de marzo.

En la pista con rollerswww.rollerdisco.com¿Se imagina una discoteca en la que todos bailan en patines? Pues en Londres existe, se llama Roller Disco y funciona de jueves a sábado. Bolas de espejo, mucha purpurina y coreografías masivas al más puro estilo Flashdance. Tome nota si le da un ataque de nostalgia: es la mejor fiesta retro... sobre ruedas.

¿Un nuevo icono?www.arcelormittalorbit.comPara unos es un hito arquitectónico; para otros, una rendición al mal gusto. Lo cierto es que la torre ArcelorMittal Orbit, esa suerte de montaña rusa descuajeringada que puso imagen a los Juegos Olímpicos, es, mal que le pese a muchos, el nuevo símbolo de Londres. Al menos eso pretendió Anish Kapoor al idear tan controvertida pieza de arte urbano. Sus 445 escalones hacia sus dos plataformas de observación sí compensan, al menos, las calorías quemadas: en el top aguarda otra perspectiva –una más– de Londres desde las alturas.

Diana hasta en la sopaPrincesa del pueblo, madre consagrada, icono de la moda. Todo esto ya lo sabemos, y, si no, la parafernalia en torno a la mujer más icónica del Reino Unido –con permiso de la reina Isabel II– ya se encarga de recordarlo. Camisetas y tazas con su rostro, su estatua y memorial en Harrods, peregrinaciones por sus tiendas y restaurantes favoritos, subastas inagotables de sus objetos personales... siguen alimentando a sus fans 16 años después de su muerte. Pero a partir de diciembre la sombra de Lady Di será más alargada que nunca. La película Diana, protagonizada por Naomi Watts, llega a la cartelera. Una historia sobre los dos últimos años de vida de la princesa de Gales que demuestra cómo su recuerdo perdura en el corazón de los ingleses.

Stratford, el resucitado barrio olímpicoTocado por la varita mágica de las Olimpiadas de 2012, este barrio antes degradado brilla hoy como un modelo de convivencia saludable-moderna-feliz en el que todos quieren participar. Stratford ya no tiene aires de polígono, ni legañas industriales, ni olvidados carteles de Se vende colgando de las ventanas. Todo lo contrario. Stratford luce ahora más rincones verdes que el resto de la ciudad –226 hectáreas tiene el Parque Olímpico Queen Elizabeth–, carriles bici, cafés con vistas al río, cines flotantes y locales de cuño alternativo solo aptos para hipsters. También, claro, lo que ha quedado de las instalaciones deportivas –el desorbitado Estadio Olímpico, el Copper Box Arena...– que los urbanitas utilizan para mantenerse en forma, y la inevitable vertiente comercial, materializada en un área con cientos de tiendas, cines, boleras, restaurantes, hoteles y el casino más grande del país. Hoy las calles están a reventar y los precios de las viviendas más disparados que un cohete. Qué mejor resaca que la del deporte...

El tirón de la cocina españolaCroquetas, tortillas de patata, raciones de ibérico... Laspanish food ha conquistado Londres gracias a la nueva hornada de cocineros patrios que ha aterrizado en la ciudad. Dos asturianos se llevan la palma: Nacho Manzano, que ya cuenta con dos restaurantes Ibérica (uno en Grand Portland St. y otro en Canary Warf, con una abarrotada terraza) y Marcos Morán, responsable de Hispania, que ha exportado la típica fabada como seña de identidad de su establecimiento. Grandes entre los grandes, los Arzak también saborean las mieles del éxito british: su restaurante Ametsa, en el distinguido barrio de Belgravia, ha sido recientemente galardonado con una estrella Michelin.

Templos gastronómicosCuánto le ha costado a Londres sacudirse el prejuicio de su mal paladar, esa cocina adscrita alfast food e identificada con el fish chips. Una idea que ha quedado trasnochada: hoy, al hilo de una preocupación creciente por la dieta equilibrada y sana, florecen nuevos templos de alta gastronomía que demuestran que en la capital británica se puede comer muy bien. A reputados chefs como Blumenthal, Gordon Ramsay y Alain Ducasse, pertrechados en lujosos hoteles, y al más mediático Jamie Olivier, se suman ahora apuestas como las de Hereford Road, Rochelle Canteen o St. John. Fuerte también están pegando los gastro-pubs como Angel and Crown, The Cow y Square Pie.

Hoy comemos... En Áfricawww.therainforestcafe.co.ukComo si de la propia selva se tratara, en este restaurante podrá encontrar elefantes, cocodrilos, jaguares e incluso gorilas. También cascadas, estanques con peces de colores y tormentas tropicales... simuladas, claro. Una atmósfera tan lograda que hasta los taburetes recrean el trasero de cebras y jirafas, la barra del bar exhibe una piel de serpiente y el sonido ambiente incluye el canto de los grillos y el rugido del león. Rainforest Café, a dos minutos de Picadilly Circus, está ideado para comidas en familia o celebrar para cumpleaños infantiles. Para sentirse en África, rodeado de fauna salvaje, mientras se degusta una hamburguesa con patatas fritas.

The Shard, el rey del vértigo the-shard.comDesde su apertura el pasado año, este nuevo inquilino del skyline londinense diseñado por el arquitecto italiano Renzo Piano se ha alzado con el título del edificio más alto no solo de la capital inglesa sino de Europa. Las vistas alcanzan hasta 60 kilómetros a la redonda, sobre todo ahora que se ha inaugurado su terraza panorámica por encima de las 18 plantas que ocupa el lujoso hotel Shangri-La.

De compras (y más) en el contenedorwww.boxpark.co.ukHay que darse prisa para conocer este original Centro Comercial de Shoreditch, en funcionamiento hasta 2015. Porque no se trata de un mall cualquiera sino de un concepto pop-up en el que las tiendas –de marca, eso sí– están instaladas en containers de mercancía. Una vuelta de tuerca a la infraestructura urbana de reciclaje que se ha convertido, además, en un punto de encuentro juvenil, donde se puede esperar a los colegas en la terraza de la azotea, con calefacción para el invierno y acceso a wifi.

Cena a oscuraslondon.danslenoir.comLo de la cita a ciegas nunca cobró tanto sentido como en Dans Le Noir. Porque en este restaurante londinense las cenas tienen lugar en la más completa oscuridad y están servidas, además, por camareros invidentes. Un desafío al sentido del gusto y del olfato en un menú que es, literalmente, toda una sorpresa para el paladar.

Tras los pasos de Jack El DestripadorEl morbo tiene la culpa del relumbrón de Whitechapel como imprescindible atracción turística de los últimos tiempos. Nadie que visita Londres quiere perderse las huellas que el famoso asesino en serie, que jamás fue identificado, dejó esparcidas por este barrio de singular factura vanguardista a finales del siglo XIX. No solo se han multiplicado los tenebrosos recorridos por sus escenarios de sangre sino que, además, el pub Ten Bells, que al parecer era frecuentado por el presunto Jack El Destripador en sus noches de caza, acoge todos los días a un nutrido grupo de jóvenes ávidos de truculentas historias.

Una velada circensecircus-london.co.ukSaltos, piruetas y contorsionismos entre las mesas para que la cena sea también un espectáculo. En Circus los comensales se transportan a un mundo de glamour decadente ideado por el decorador británico Tom Dixon, al mismo tiempo que disfrutan del exquisito menú del chef Andrew Lassetter. Una velada con sorpresas de cabaret en el mismísimo Covent Garden.

Richmond, las idílicas afuerasTan exclusivo que es el hogar de la clase pudiente (incluyendo un buen número de celebs) y tan apacible que está de moda, cuando el clima lo permite, acudir los fines de semana para pasear a la vera del río jalonado de embarcaciones, entre árboles y jardines, y disfrutar de ese aire de pueblo dentro de la ciudad. Richmond es así. Unas afueras idílicas que sirven de vía de escape al ajetreo urbano, en una excursión de no más de veinte minutos.

Bombazo teatral: Enrique V con el actor Jude Lawwww.michaelgrandagecompany.comEl drama histórico de William Shakespeare sobre el orgullo patriótico copa las tablas del Noel Coward Theatre hasta el próximo 15 de febrero. Y lo hace a cargo de la compañía de Michael Grandage y con un guapo de la gran pantalla en la piel del rígido Enrique V: Jude Law. El protagonista de películas como Closer, Alfie y Cold Mountain se sumerge como ningún otro en los horrores de la guerra para anticipar el nacimiento de la poderosa Inglaterra. Una acertada combinación que augura un éxito redondo.

El primer teleférico urbanowww.emiratesairline.co.ukExiste una nueva manera de salvar la brecha del Támesis: a bordo del teleférico de Emirates Air Line, inaugurado hace un año en el East End. En cinco minutos, y a una altura de 90 metros, se cruza desde Greenwich a los Royal Docks con unas vistas espléndidas. Lo bueno es que está incluido en la red del London Tube, con lo que puede utilizarse la Oyster Card. Lo malo es que hay que pagar cuatro libras adicionales. Y el tiempo (el de la meteorología) también juega una baza importante.

William Shakespeare, a tope en Londres...Con motivo del 450º aniversario del nacimiento del más célebre autor inglés de todos los tiempos, la ciudad del Támesis inaugura, en enero de 2014, un nuevo espacio teatral en el que el propio William Shakespeare y sus coetáneos se hubieran sentido como en casa. Se trata de Sam Wanamaker Playhouse –el nombre se debe al actor y director estadounidense que fundó en su día The Globe– y es la reconstrucción de un teatro cubierto jacobino que comenzará su andadura con un calendario que incluye óperas, obras escénicas y conciertos a la luz de las velas.

...Y en Stratford-Upon-AvonPara quienes este estreno shakespeariano no sea suficiente, siempre quedará una excursión al pueblo que vio nacer y crecer al insigne dramaturgo. La localidad de Stratford-upon-Avon, que se encuentra a dos horas en tren desde la ciudad de Londres, conserva intactas y abiertas al público las diversas casas del escritor y alberga los dos prestigiosos teatros que constituyen la sede de la Royal Shakespeare Company: el Royal Shakespeare Theatre y el Swam Theatre, escenarios sin igual para evocar la magia del to be or not to be. Todos los días también se organiza en Stratford-upon-Avon un recorrido a pie por los rincones relacionados con su vida y obra, incluida la Iglesia de la Santa Trinidad, donde fue bautizado y enterrado.