Puerto de A Coruña, escala del Atlántico
El Puerto de A Coruña suma a su tradición marinera un nuevo hito al convertirse en parada preferente para los cruceros atlánticos: el encanto de la ciudad es el encargado de encandilar al visitante.
A Coruña emerge como escala imprescindible de los cruceros atlánticos. El puerto de la ciudad gallega se convierte en atractiva parada de la cornisa atlántica desde Lisboa a la Bretaña francesa para un pasaje deseoso de disfrutar de una bella ciudad abarcable en una jornada turística.
Tras romper el récord absoluto en 2022 con 222.723 cruceristas, en 2023 supera su marca con 325.000, un volumen que aúpa a la ciudad gallega a la primera división de esta potente industria. Pero las previsiones del Puerto de A Coruña son aún más optimistas: descubrimos los secretos de este boom.
Ciudad acogedora
A Coruña siempre miró al mar. Ahora sus dos muelles para cruceros, uno de ellos con capacidad para grandes trasatlánticos con más de 4.000 pasajeros, ofrecen un rápido acceso al centro de la ciudad caminando. Y cuando se alcanza el corazón de la ciudad, llega la sorpresa.
El viajero descubre una localidad amable, rodeada casi totalmente de agua y disfrutable en una única jornada. Seduce la Ciudad Vieja, con un entramado de calles con rincones tan románticos como el jardín de San Carlos o con historias tan sugerentes como la de Sir John Moore, el general británico que perdió la vida arrollado por una bala de cañón durante la guerra con los franceses.
A Coruña también es arquitectura: la de la elegante avenida de la Marina con un caserío cuajado de miradores de cristal, o la robustez de los fortificados muros del Castillo de San Antón. Un conjunto que incluye la encantadora sencillez del románico en hitos como el de la iglesia de Santiago o en el de la grandilocuente plaza de María Pita.
Y también es cultura
Otro de los atractivos son sus museos aptos para todos los públicos. Domus fue el primero del mundo dedicado íntegramente al ser humano, sus más de 150 módulos interactivos son una invitación a la diversión y reflexión. Muncyt es un espacio dedicado a la ciencia y la tecnología y el Aquarium Finisterrae, a la fauna y flora marina.
Y en este recorrido por los imprescindibles se impone una parada en la torre de Hércules. Este faro es un hito desde el siglo I de nuestra era, cuando los romanos levantaron sus 55 metros sobre una no menos monumental roca. A día de hoy, es el faro más antiguo del mundo que sigue en funcionamiento, una de las razones por la que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 2009.
Ciudad deliciosa
Pero A Coruña nunca se acomodó en su historia y belleza, este enclave gallego ofrece sobre todo vivencias. Algunas de sus experiencias son tan deliciosas como sus pescados y mariscos, que aquí se ofrecen con unas preparaciones sencillas para resaltar su extraordinaria calidad. Como las de otras dos de sus especialidades, el pulpo á feira o la empanada, ideales para disfrutar de la ruta del tapeo. Pero no hay que olvidar otra de sus tentaciones, la tortilla de patatas. Impulsada por la genuina tortilla de la cercana Betanzos, ha creado aquí una auténtica escuela cuya fama no deja de crecer.
¿Nos vamos de compras?
La ciudad es también un activo centro comercial al aire libre. Imprescindibles las visitas a sus animados mercados, como el de Plaza de Lugo o San Agustín.
Una escala sostenible
Reivindicarse como una escala de gran belleza y personalidad no es suficiente para asentarse en la industria de los cruceros. A Coruña también lo ha conseguido esforzándose por ofrecer una estancia sostenible, por ejemplo, electrificando sus muelles. El coruñés Trasatlántico prepara una instalación OPS (siglas de la tecnología de electrificación Onshore Power Supply), que permitirá a los barcos apagar sus motores auxiliares durante la estancia, evitando sus emisiones. Su inauguración está prevista para este 2024, convirtiéndose en un nuevo aliciente para hacer escala en A Coruña.
Motor económico para A Coruña
La industria de los cruceros ofreció un retorno a A Coruña superior a los 25 millones de euros en 2022. Pero el viaje del Puerto de A Coruña a motor turístico de Galicia no ha sido fruto de la casualidad. La Autoridad Portuaria ha puesto en valor su privilegiada posición geográfica frente a Southampton, ofreciéndose como la primera o última escala de la potente industria de cruceros que opera desde la ciudad británica.
Aprovechando la cercanía con el puerto de Leixões-Oporto, se ha cerrado también una alianza para trabajar conjuntamente, ofreciendo dos desembarcos sucesivos de indudable atractivo para el viajero. Además, el puerto coruñés ha realizado una intensa acción de promoción en ferias internacionales, donde ha hecho valer unas verdaderamente atractivas tarifas para las navieras.
Pero de poco hubiera servido la estrategia sin unos valores turísticos que la avalen: es el encanto de A Coruña el que mejor explica este boom. Una ciudad de un tamaño ideal para la visita de un día, con un muelle a cinco minutos a pie de muchos de sus atractivos. Distancia similar a la del segundo muelle recientemente habilitado, el de Calvo Sotelo, que completa la oferta de paradas para trasatlánticos.
Y la mejor noticia es que el proyecto no ha hecho más que empezar. Como explica Martín Fernández Prado, presidente de la Autoridad Portuaria de A Coruña, ahora se apunta al segmento del lujo y ultralujo: “Para ello trabajamos en el diseño de una oferta de excursiones singulares, adaptadas a un público que busca experiencias exclusivas”.