Llega a España el Airbnb de las piscinas

Es el mismo concepto que usa la conocida aplicación, Aribnb, para alquilar casas o habitaciones de forma temporal, pero en este caso con piscinas. El mecanismo es muy sencillo: el propietario cede su piscina durante un tiempo acordado por el precio que él considere apropiado y cualquier particular puede hacer uso de ella alquilándola por medio de esta aplicación.

La compañía, creada en Francia hace dos años, cuenta en el país vecino, el primer parque de piscinas particulares de Europa, con más de un millar de propietarios inscritos en su web y unos 30.000 usuarios. La marca creada por Raphaelle de Monteynard acaba de asentarse en España este mismo mes de julio.

Inscribirse a esta plataforma es completamente gratis tanto para propietarios de piscinas como para los usuarios que deseen alquilarlas. Dentro de la web puedes buscar el destino donde desees alquilar la piscina y encontrarás aquellas que estén registradas. Todas ellas con fotografías acompañadas de una breve descripción: medidas, instalaciones que se ofrecen, jardín, barbacoa, tumbonas, si se acepta o no mascotas o si el propietario va a estar, o no, en casa durante el alquiler.

El propietario puede decidir por cuanto tiempo quiere ceder su piscina, una hora, una tarde o un día entero y las reservas y el pago se gestionan íntegramente a través de la web de Swimmy, el mismo mecanismo que emplea Aribnb, Click&BoatDrivyAmovens o Blablacar. Todas ellas aplicaciones que se basan en compartir (casa, coche, piscina o barco), fomentando la economía colaborativa en España.