Guía de Tokio

300 ideas y direcciones útiles para todos aquellos que vayan a viajar a la capital nipona.

tokio
tokio

Tokio, las dos culturas

No hay mejor cicerone que la literatura, aunque hable de tiempos pretéritos o pase de puntillas por la ciudad. O por las horas nocturnas que revelan una urbe completamente diferente. Haruki Murakami muestra en la novela After Darksu Tokio iluminado por neones y con banda sonora de jazz. La ciudad de hoy, su latido y su búsqueda. Y si bien no lo parece a primera vista, por ahí siguen deambulando los personajes de las obras de Yasunari Kawabata. Siguen saliendo a los parques a admirar la belleza de lo pasajero, a sentir la tristeza inherente a la hermosura. Y este concepto tan ligado al espíritu japonés, denominado mono no aware, permanece en ambos escritores, cada uno con su ritmo y su ciudad, metamorfoseada tras el salto generacional que separa a ambos autores.

Quien no se haya metido de lleno en el mundo intelectualmente erótico de Kawabata, cuando mire a un grupo de lolitasde paseo por Harajuku sólo verá el atuendo, la simple anécdota. Se quedará en la superficie. Lo mismo ocurrirá cuando camine por un jardín japonés, por el Jardín Oriental del Palacio Imperial, por ejemplo, y no vea en él a sus personajes, emocionados ante los pequeños detalles que regala el cambio de estación. Para ello son concebidos y diseñados con tanto cuidado. Para promover ese constante ir y venir entre el sentimiento y el intelecto. La delicadeza que hay en un gesto durante la ceremonia del té o el código que rige tras la vestimenta del kimono también aparecen en la literatura. Al igual que el interés de los jóvenes japoneses por perseguir lo occidental, lo pop, por ser ellos mismos a pesar de mirar constantemente hacia el exterior. Y lo consiguen. Con una marca propia. Como las chicas gyaru que se ven en Shibuya, con su imagen cuidada al milímetro para emular a las jóvenes actrices de las series americanas. O como el propio Murakami, con un ojo puesto en cada una de las dos culturas.

Pero aunque las historias de unos y otros sirvan para captar lo invisible, llega un momento en que todo adquiere forma y uno se encuentra de repente en mitad de la ciudad de Tokio, descifrando lo inmaterial y lo material. Es una urbe tan enorme y compleja que resulta imposible captar toda su personalidad en una primera visita. Desperdigados a lo largo de la ciudad, los diferentes puntos de interés obligan a recorrer sus límites bajo tierra, lo que crea la confusa sensación de aterrizar en un mundo diferente cada vez que se emerge al exterior y se descubre un nuevo barrio que, en la mayoría de los casos, revelará una cara más de esta ciudad poliédrica. El rostro añejo, con recuerdos de la antigua Edo, asoma en el barrio de Asakusa, con millones de fieles visitando el templo de Sensõ-ji cada año. Y si uno se aleja unos metros y se acerca al río Sumida, verá cómo en la otra orilla Tokio se sigue reinventando. La nueva Tokyo Sky Tree, que se inaugurará en el 2012, no sólo conquistará el título de la torre más alta del país sino que con su construcción se revitalizará la zona con nuevos complejos de compras y ocio, tal y como sucediera hace unos pocos años con Tokyo Midtown.

Apoca distancia del complejo de Roppongi Hills, que en su día también fuera un revulsivo para su zona, este conjunto de edificios incluye no sólo jardines, un hotel de lujo y una zona de ocio sino también un espacio para la cultura representado por el Museo de Arte Suntory y el 21_21 Design Sight, un centro de vanguardia donde arte, diseño y tecnología van de la mano mirando hacia el futuro. Tokio se mueve. Y el visitante con ella: de la estética manga de Harajuku hasta la sofisticación de Ginza, el primer punto de la ciudad que imitó a Occidente; de los museos de Ueno a los rascacielos de Shinjuku, con la Mode Gakuen Cocoon Tower luciendo palmito y juventud; del exterior al interior; de la calle a la mesa, el otro gran camino que se recorre en Tokio. No hay ciudad en el mundo con mayor número de estrellas Michelin. Es tal la variedad de cocinas ofertadas que difícil será conocerla por entero en un solo viaje. Pinchos, sushi, guisos, fideos... van apareciendo ante los ojos de un viajero que siempre encuentra ante sí el más impecable servicio. Donde no existe el servilismo sino la armonía, el wa, el otro gran descubrimiento hacia el interior de la ciudad y del país. Los gestos, el lenguaje y el comportamiento de los japoneses están marcados por ella. Cualquier cosa antes que romperla y crear un conflicto, lo que convierte al código social japonés en uno de los más exquisitos y complejos del mundo.

Lo invisible, otra vez. Y la literatura. Un haiku: "En la bahía/ la primavera/ flores de olas". Poesía zen que promueve el movimiento interior, como la ciudad. El viajero querrá una segunda lectura. Un próximo viaje donde seguir paseando entre lo material y lo inmaterial.

Los 10 imprescindibles

En Tokio hay que olvidarse de los centros históricos y las monumentalidades vecinas. En esta enorme ciudad lo más destacado se reparte aquí y allá, en sus diferentes barrios y distritos. Y no siempre la torre, el templo o el mercado a visitar serán el principal objetivo del paseo. Porque realmente en Tokio los puntos de interés son una excusa para el asombro constante que surje al caminar por sus bulliciosas calles.

1. The Tsukiji Outer Market

Tsukiji Station y Tsukijishijo Station.

Hay que madrugar para verla bullir de actividad, pero sería impensable no ir a la que es la mayor lonja del mundo. Las cifras lo dicen todo: 3.000 toneladas de mercancía al día y 450 tipos de productos marinos, algunos reconocibles, como el famoso atún rojo, el pulpo o las anguilas, y otros tan extraños a nuestros ojos que parecieran sacados de una película de ciencia ficción. Al visitar la lonja, hay que tener en cuenta que está prohibido entrar a determinadas horas y visitar ciertas zonas. No se puede hacer fotos con flash y se debe molestar lo menos posible. En el mercado exterior hay -además de tiendas donde comprar cuchillos profesionales-, pequeños restaurantes donde desayunar sashimi.

2. Torre de Tokio

4-2-8 Shiba-koen, Minato-ku.

Akabanebashi Station.

Tlf. 34 33 51 11. Entrada: 820 yenes y 600 más para el Observatorio Especial.

Se terminó de construir en 1958 como un icono de modernidad. Es uno de los miradores más populares de la ciudad, sobre todo para las parejas de enamorados, porque la panorámica de 360 grados que se observa desde sus dos miradores es espectacular. Con la entrada básica se accede al observatorio, situado a 150 metros de altura, y si se quiere aumentar la vista de pájaro en 100 metros más hay que pagar una segunda entrada. El primer nivel no decepciona en absoluto, sobre todo por la noche, y la sensación que se tiene al pisar en algunos puntos del suelo de cristal es indescriptible.

3. Cruce de Shibuya

Es sin duda una de las imágenes más emblemáticas de Tokio y posiblemente el primer punto al que el visitante quiera ir nada más llegar a la ciudad. Situado junto a la estación homónima, por el cruce de Shibuya transitan cada día un millón de personas, siempre bajo el caótico sonido de los anuncios que emiten a todo volumen a través de cinco pantallas gigantes. Este cruce es de los llamados scramble crossing, caracterizados porque la circulación se corta a la vez en todos los sentidos y los pasos de cebra se llenan de peatones que cruzan en todas las direcciones. Junto al cruce, exactamente a la salida de la estación, se encuentra otro de los más destacados iconos de Shibuya: la estatua Hachiko, que conmemora con ternura la espera de un perro que durante una década continuó volviendo cada tarde a la estación a esperar a su dueño -tal y como hacía desde el principio- después de que éste muriera repentinamente en el trabajo. Hoy los que esperan aquí son los numerosos jóvenes que se citan para ir de compras o salir por Shibuya.

4. Templo Senso-ji

2-3-1 Asakusa, Taito-ku.

Asakusa Station.

La puerta de Kaminarimon, de la que cuelga una enorme linterna de más de 600 kilos de peso, es la primera de las dos que dan paso al templo budista de Senso-ji, dedicado a Kannon, el bodhisattva de la compasión. Levantado en el año 645, es el templo más antiguo de Tokio y a él acuden cada año 30 millones de personas. El edificio principal, al que se accede tras pasar junto a un enorme quemador de incienso, fue arrasado durante Segunda Guerra Mundial y reconstruido en los años 50 gracias a donaciones recogidas por todo el país. Junto al templo se encuentra el santuario de Asakusa, donde se celebra el festival más importante de Tokio: el Sanja Matsuri.

5. Santuario Meiji-Jingu

1-1 Yoyogi Kamizonocho, Shibuya-ku. Meiji-Jingu Mae Station

Se construyó memoria del emperador y la emperatriz que contribuyeron a modernizar Japón tras el periodo Edo. Proporciona un toque de tranquilidad al centro de Tokio. Durante los tres días que duran las celebraciones de Año Nuevo recibe la visita de unos tres millones de personas. Destaca por sus zonas ajardinadas y es un lugar muy frecuentado.

6. Estación de Shinjuku

Los cerca de tres millones y medio de personas que transcurren por ella cada día la convierten en la estación más transitada del mundo. También es una de las más grandes, con cerca de 60 salidas cuyos rótulos y numeración recuerdan a los de las puertas de embarque de un aeropuerto. Si uno se despista, puede que hasta llegue a alguna de las estaciones circundantes, ya que Shinjuku se une a ellas a través de pasajes y centros comerciales subterráneos. Por eso no es de extrañar que hasta el viajero más urbanita ande como perdido y asombrado ante tanto ir y venir, sobre todo si se llega a ella en las horas punta de la mañana y la tarde. Las salidas principales son la oeste, por la que se accede al área de los rascacielos de Shinjuku, y la este, que conduce hasta el área comercial y, tras un paseo, al barrio de Kabuki-cho.

7. Puente Arco Iris

Al norte de la bahía de Tokio y uniendo el puerto de Shibaura con la isla artificial de Odaiba se levanta este puente colgante de 798 metros de longitud, cuyo arco principal supera los 500 metros. La mejor imagen tanto del puente como de la bahía se obtiene al anochecer desde Odaiba y preferiblemente desde el paseo situado frente al Hotel Nikko Tokyo, próximo a la estación Daiba de la línea Yurikamome. Otras destacadas atracciones de Odaiba son el imponente edificio de los estudios de Fuji TV, el centro comercial Venus Fort -bastante kitschcon su decoración veneciana-, la noria Daikanransha, una de las más grandes del mundo, o el Museo Nacional de Ciencia Emergente e Innovación.

8. Ginza

Conocida también como avenida Ginza, es la vía principal del barrio homónimo, famoso por sus tiendas de lujo y su arquitectura innovadora. La intersección de Chuo-dori y Harumi-dori representa el auténtico corazón de Ginza, donde se levantan el edificio cilíndrico de San-ai y el de los grandes almacenes Wako, cuyo simbólico reloj lleva marcando la hora desde el año 1932. Aquella construcción de estilo europeo fue en su día una rareza y hoy la arquitectura ha vuelto a convertir a Chuo-dori en un interesante paseo, sobre todo los domingos, cuando la calle es cortada al tráfico y es más agradable mirar escaparates y fachadas del más vanguardista diseño. Así aparecen, entre algunos ejemplos, las 13.000 baldosas artesanales de cristal de Maison Hermés, las líneas que recuerdan al bambú en el edificio de Armani Ginza, la fachada perforada de Dior -que de noche se convierte en una inmensa pantalla-, la de Chanel -espectacular tras el atardecer-, o el rosado edificio de Mikimoto Ginza 2, que está salpicado de ventanas con extrañas formas.

9. Akihabara

La mayor concentración de tiendas de electrónica del mundo nació tras la Segunda Guerra Mundial debajo de las vías del tren de la estación de Akihabara, donde emergió un importante mercado negro que vendía radios y electrodomésticos. Hoy, junto a ordenadores, componentes electrónicos, gadgetsy videojuegos, los productos asociados al animey el mangahan atraído movimientos subculturales como los cosplayo los cafés Meido Kissa. Se pueden comprar libros y DVD en Mandarake, Animate y Japanimation, las tiendas más importantes. En los grandes almacenes de LAOX, Yodobashi o Ishimaru se adquieren cámaras, portátiles, robots o videojuegos con precios libres de impuestos. Resulta interesante perderse por las callejuelas adyacentes a la avenida de Chuo-dori para descubrir pequeñas tiendas en sótanos y pisos.

10. Roppongi Hills

6-10-1 Roppongi, Minato-ku.

Roppongi Station.

Este edificio de 250 metros de altura es el centro del complejo de viviendas y oficinas Roppongi Hills, levantado en el 2003 y convertido desde entonces en el principal lugar de ocio de los extranjeros de Tokio. Tiendas, restaurantes, bares y clubes se reparten por las plantas bajas de la Torre Mori, en cuya entrada se levanta Mamam, una de las diversas arañas de largas patas que creó la escultora francesa Louise Bourgeois. En la torre también pueden visitarse las exhibiciones temporales de arte contemporáneo del Museo de Arte Mori y el Sky Deck, una plataforma al aire libre desde donde se tiene una excelente vista de la ciudad.

El barrio de los templos

Al norte del parque Ueno, se encuentra Yanaka, el barrio que mejor ha preservado el ambiente y la arquitectura tradicional del antiguo Tokio. Desarrollado como una ciudad de templos durante el periodo Edo, en una ruta de dos horas y media se pueden conocer sus principales atractivos, como los templos de Tennoji o Jomyoin, el cementerio de Yanaka o la calle comercial Yanaka Ginza. La ruta ha de comenzar desde la salida suroeste de la estación JR Nippori.

10 experiencias que vivir en Tokio

La ciudad de Tokio, más que visitarla, se vive. El viajero que llega a ella tiene delante de sí todo un abanico de experiencias por descubrir, desde la relajación de un baño en aguas termales hasta el disfrute de la cocina más refinada o el delicado arte que se esconde tras la singular ceremonia del té. Unas citas que se han de apuntar en la agenda si de verdad se quiere conocer la capital japonesa en todo su esplendor.

1. Sumergirse en un onsen

La naturaleza volcánica de Japón lo ha convertido en uno de los países con mayor número de fuentes termales del mundo. Para sumergirse en las aguas calientes de un onsenhay que seguir ciertas reglas: los baños se toman tras lavarse bien, desnudo -sin joyas o relojes- y en estancias separadas por sexos. Algunos rotemburos-aquellos localizados al aire libre- son mixtos, por lo que el baño se debe realizar con toalla. La diferencia entre los onseny los sentoestriba en que éstos son baños públicos donde las aguas no son termales. Se puede disfrutar de esta experiencia en el Asakusa Kannon Onsen (2-7-26 Asakusa, Taito-ku), a cien metros del templo de Senso-ji; en el famoso Ooedo Onsen Monogatari (2-6-3 Aomi, Koto-ku), una especie de parque temático al estilo de la antigua Edo; o en el Toshimaen Niwa-no-Yu (Koyama 3-25-1, Nerima-ku), que está rodeado de un enorme jardín y con áreas mixtas donde el bañador es obligatorio.

2. Ir a los parques

Los espacios verdes de la ciudad resultan perfectos para observar a los tokiotas en un contexto relajado, disfrutando del poco tiempo libre que les dejan sus maratonianas jornadas de trabajo. Además, muchas de las subculturas de Tokio se pueden ver en los parques, como en Yoyogi-koen, que está muy animado durante el fin de semana. Junto a la entrada próxima al puente de Jingu-bashi, cada domingo se puede ver a los jóvenes seguidores del visual kei, un llamativo estilo que imita al de ciertos grupos musicales de glam-rock, punk y metal.. Si la visita a la ciudad coincide con la floración del cerezo, se verá a la gente salir en masa a disfrutar del hanami, una costumbre muy arraigada en el país que consiste en pasear por los rincones más florecidos, hacer picnic bajo un cerezo y beber el tradicional sake junto a los compañeros de trabajo, los amigos o la familia. El parque Sumida, en Asakusa, es uno de los sitios más populares para ello.

3. Dormir en un ryokan

Una de las mejores formas de experimentar la cultura japonesa y sus costumbres es alojarse en un ryokan, un establecimiento tradicional caracterizado por sus amplias habitaciones cubiertas de tatamis. Sobre las esteras se extienden los futones, colchones con funda de unos cinco centímetros de grosor que durante el día permanecen recogidos en los armarios. En la habitación, junto a la puerta, encontrará las sandalias con las que moverse por el establecimiento, quizás de camino a los baños de agua caliente, ya que la mayoría de los ryokanesofrecen también este servicio. En la tarifa diaria suele ir incluido el desayuno y, en los establecimientos de categoría más elevada, también la cena, que será un exquisito menú kaiseki. Siempre se sirven en la habitación, donde nunca falta el té ni el delicado arreglo floral acorde con la estación del año.

4. Acudir al sumo

Para conocer el deporte nacional hay que ir al Ryogoku Kokugikan (1-3-28 Yoko-ami, Sumida-ku. Ryogoku Station. www.sumo.or.jp), el edificio donde se celebran durante 15 días y tres veces al año -en enero, mayo y septiembre- los grandes torneos de sumo. Esta ceremoniosa modalidad de lucha, relacionada con la simbología ritual del sintoísmo, se inicia en cuanto los luchadores, llamados rikishi, apoyan los puños en el suelo. A partir de ese momento, el objetivo será conseguir que cualquier parte del cuerpo del contrincante, a excepción claro está de los pies, toque el suelo del doyo(círculo) o que éste se salga del mismo. Si durante la estancia en Tokio no se celebra ningún torneo, siempre se puede visitar el museo abierto en el interior del pabellón o los recintos de entrenamiento de los más destacados luchadores.

5. Probar una refinada cocina

Un festín para los sentidos. Así se puede definir al kaiseki-ryori,una elaborada comida que tiene sus raíces en el arte de la ceremonia del té, donde se comenzó a incluir un ligero tentempié en la creencia de que así los invitados disfrutarían más del sabor de la infusión. Continuando con el espíritu zen que subyace en la ceremonia, este tipo de cocina es delicada, artística y remite a la naturaleza y al paso del tiempo. Los productos empleados han de ser de temporada, y flores y hojas adornan los diferentes platillos servidos en preciosos recipientes de cerámica o madera lacada. El menú del kaiseki-ryorise sirve en un orden establecido y está compuesto siempre por verduras, pescados y carnes cocinados de diferente manera: a la plancha, en tempura, en guiso, en sopa o crudos, creándose así un viaje culinario donde la estética y las variadas texturas y sabores crean un conjunto armonioso. Se puede disfrutar de un menú kaisekien ryokanesy en restaurantes especializados.

6. Diferenciar una lolita de una gyaru

Una de las razones que convierten el paseo por Tokio en toda una experiencia es que permite descubrir las subculturas japonesas. En zonas como Harajuku, Ikebukuro o Shibuya es difícil no girar la cabeza al cruzarse con un cosplayero una lolita. Cada tribu urbana tiene su estilo propio. Existen las gyaru, chicas jóvenes que se caracterizan por su obsesión por la imagen, las marcas, el maquillaje y el uso de uñas postizas; las decoras, aficionadas al color rosa y a un exagerado número de accesorios como peluches, horquillas y bolsos; los cosplayers, que se disfrazan de personajes de manga, anime o videojuegos; los visual kei, con estrafalarios maquillajes, peinados y atuendos, y las famosas lolitas, inspiradas en las estéticas rococó y victoriana y que se dividen en numerosos subgrupos, como las góticas o las sweet, con un aire mucho más infantil. Los domingos por la tarde, el puente de Jingu-bashi, en Harajuku, constituye el mejor escenario para fotografiar y observar algunos de los más originales miembros de estas tribus japonesas.

7. Celebrar la ceremonia del té

La búsqueda de la verdadera belleza, sencilla y simple, marca muchas de las tradiciones japonesas, como el ikebana, la caligrafía o la ceremonia del té o chanoyu. Influenciada por el budismo zen, se rige por unas normas estrictas que marcan desde los movimientos hasta el tipo de vajilla a utilizar. La ceremonia consta, por este orden, de una comida kaiseki, una pausa intermedia, una fase principal donde se sirve un té espeso y, finalmente, el disfrute de un té claro. La duración de toda la ceremonia ronda aproximadamente las cuatro horas, aunque muchas veces se limita a sólo 60 minutos en la que se realiza la última fase. Algunos hoteles ofrecen esta inolvidable experiencia, como el Okura, aunque si se quiere profundizar un poco más se puede asistir a una completa clase en la Fundación Urasenke (1-4 Ichigayga-koura-cho, Shinjuku-ku. Tlf. 52 25 07 87).

8. Un café en un meido kissa

La clásica vestimenta de las sirvientas inglesas durante la época victoriana inspiró hace una década la creación de estos particulares cafés, cuyo nombre deriva del vocablo inglés maid, que significa "criada". Aunque se pueden encontrar en otros barrios de la capital japonesa, lo suyo es ir a su lugar de nacimiento, Akihabara. Por las calles de este "distrito electrónico", chicas vestidas con delantal y cofia informan a los clientes para que pasen a los locales y, una vez dentro, son recibidos ceremoniosamente con un "Bienvenido a casa, señor". Con el tiempo, han aparecido otro tipo de locales como los shitsuji kissa, que son atendidos por camareros ataviados con el uniforme de mayordomo; o los danso kissa, donde los mayordomos son en realidad mujeres. En Akihabara también se pueden encontrar los manga kissa, un tipo de cafés con biblioteca de cómics, videojuegos y acceso a Internet.

9. Vestir un kimono

Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, la occidentalización trajo la modernidad al vestuario japonés y con ella el kimono dejó de ser prenda de uso habitual, quedando prácticamente relegado a bodas, funerales, graduaciones o festivales tradicionales. Por eso no es extraño cruzarse en la calle o en el metro con una japonesa luciendo esta bella y elegante prenda camino de alguna cita de relevancia. En Tokio es posible conocer de cerca este traje confeccionado tradicionalmente en seda y cuyo estampado y corte varía en función del sexo, la edad, el estado civil, la ocasión y la estación del año. La empresa HIS Experience (www.hisexperience.jp) ofrece entre sus actividades culturales la experiencia de vestir un kimono, incluso mientras se aprende danza tradicional japonesa.

10. Sentarse a la mesa

Los platillos de cera expuestos en los escaparates de muchos restaurantes, que reproducen la comida ofrecida en la carta, es una de las curiosidades que el viajero se encontrará en su primer paseo por tierras japonesas. En este caso, le será de ayuda incluso para pedir su comida al camarero, pero hay otras informaciones que conviene saber de antemano. Por ejemplo, en la entrada. Muchos restaurantes cuelgan en ella unas pequeñas cortinas, llamadas noren, para mostrar que están abiertos. Una vez dentro, si el local tiene mesas, en ellas habrá un timbre que se utiliza para llamar al camarero. Si se va en grupo y sólo se ve una barra, siempre hay que preguntar si tienen salones privados, por cuyo uso a veces se carga una cantidad extra en la cuenta. Y una vez ha llegado la comida, no hay que olvidar que los cuencos siempre se sujetan con la mano a la altura del pecho, salvo si es un plato con líquido, que se ha de acercar hasta la boca. Por último, los palillos nunca se dejan clavados, no se gesticula o se señala con ellos ni se pasan alimentos de un juego de palillos a otro. Y al finalizar la comida, se han de dejar apoyados en el "hashi-oki".

Pasear con un tokiota

Qué mejor forma de conocer Shinjuku o el frenético ritmo de Shibuya que de la mano de un guía voluntario que hable español o inglés. El Ayuntamiento de Tokio ofrece numerosos recorridos gratuitos que permiten adentrarse con ventaja en esta increíble urbe, que tan confusa resulta al principio. Se puede elegir recorrido y reservar en la web www.tourism.metro.tokyo.jp

Museos de Tokio

La tradición artística japonesa se mezcla con el "Anime", el arte contemporáneo y las colecciones extravagantes en los museos de la ciudad, rica tanto en muestras exquisitas que hablan del pasado como en exhibiciones donde se palpa el pulso actual de un país que no deja de mirar hacia delante. Los museos, al igual que las calles, también reflejan el particular carácter de la capital japonesa.

Museo Nacional de Tokio

13-9 Ueno Park, Taito-ku. Ueno Station.

Tlf. 54 05 86 86

Si se tuviera que elegir sólo uno de entre todos los museos de la ciudad, éste sería sin duda el que nadie debería perderse. El museo más antiguo de todo el país alberga más de 120.000 objetos y obras de arte procedentes de Japón y otros países asiáticos. En el pabellón Honkan, y bajo el nombre de Las obras maestras del arte japonés, se exhibe una exquisita selección cronológica cuyo contenido rota periódicamente por razones de conservación, por lo que nunca se repite el muestrario, que incluye distintas artes como cerámica, grabado ukiyo-e, escultura, caligrafía, textiles, piezas militares... La colección de arte asiático y la galería de los Tesoros de Horyuji son otras de sus muestras imprescindibles.

Centro Nacional de Arte

7-22-2 Roppongi, Minato-ku. Nogizaka Station.

Tlf. 57 77 86 00

Situado en el distrito de Roppongi, en el Triángulo del Arte, donde también se encuentran el Museo de Arte Suntory y el Museo Mori Art, ofrece 14.000 metros cuadrados de espacio expositivo, el mayor de todo el país. Desde su inauguración en el año 2007 está dedicado exclusivamente a las exposiciones temporales, con más de diez muestras que pueden admirarse al mismo tiempo. Merece la pena acercarse hasta él, aunque sólo sea para ver el diseño arquitectónico de este edificio de cristal. Se puede tomar un café en el salon Rond, localizado en lo alto de un cono invertido, o saborear las delicadezas servidas en el restaurante Brasserie Paul Bocuse Le Musée.

Museo Ukiyo-e Ota

1-10-10 Jingu-mae Shibuya-ku. Harajuku Station.

Tlf. 34 03 08 80

El arte ukiyo-e, también conocido como las pinturas del mundo flotante, se desarrolló en la cultura metropolitana del periodo Edo, inspirado en los placeres del teatro, las geishas y las populares casas de té. La colección privada de Seizo Ota compila 12.000 estampas grabadas en madera que, gracias a la iniciativa de su familia, hoy se exponen en este museo memorial que ofrece un inolvidable viaje por los grandes secretos de este arte popular japonés.

Museo Edo-Tokyo

1-4-1 Yokoami, Sumida-ku. Ryogoku Station

Tlf. 36 26 99 74

Con una superficie de más de 30.000 metros cuadrados, este museo permite conocer la historia, la cultura y el estilo de vida de Tokio. El recorrido de la exposición permanente muestra desde los orígenes de la ciudad, con réplicas como la del Puente Nihombashi -un histórico punto comercial en la época Edo, ya que de él partían las rutas comerciales más importantes de la época-, hasta la tremenda reconstrucción que tuvo que realizar Tokio tras la Segunda Guerra Mundial.

Museo Ghibli

1-1-83 Simorenjaku, Mitaka-shi. Mitaka Station.

Los aficionados al anime -los populares dibujos animados japoneses- seguro que no se pierden este museo abierto por el Estudio Ghibli, creador de clásicos como La Princesa Mononoke o El viaje de Chihiro, donde se pueden conocer los fundamentos y las herramientas utilizadas en la animación. Una de las principales atracciones del museo es el cine Saturno, donde se proyectan de forma cíclica una serie de cortos realizados por Hayao Miyazaki exclusivamente para el museo. La entrada se ha de adquirir en España a través de la agencia Jaltour (www.jjtour.es).

Parásitos, espadas y carteles publicitarios

La capital japonesa acoge en su larga lista de museos algo más que obras de arte. Entre ellos se puede encontrar la única colección del mundo dedicada a los parásitos, el Museo Parasitológico Meguro (www.kiseichu.org), creado en los años 50 del siglo pasado y en cuya tienda se pueden incluso comprar llaveros con un parásito sellado en plástico; o colecciones para los amantes de la historia bélica, como el Museo de las Espadas (4 -25 - 10 Yoyogi, Sibuya-ku), donde se exponen 152 refinadas piezas, algunas de ellas designadas tesoros nacionales. La indumentaria toma relevancia en el Museo del Traje Bunka Gakuen (3-22-7 Yoyogi, Shibuya-ku), donde se expone una extensa colección de vestimentas y accesorios históricos tanto de Japón como del resto del mundo. En el Museo de Publicidad y Marketing (www.admt.jp) se puede ver una amplia colección que arranca desde los primitivos anuncios japoneses del siglo XVII. Un centro imprescindible para los amantes del diseño y de las artes gráficas.

Espacios urbanos

A pesar de que muchos de los puntos de interés de Tokio están desperdigados, es posible aunar unos cuantos en recorridos que pueden durar una jornada completa. Museos, rascacielos, calles comerciales, templos y parques aparecen en estos tres paseos que ofrecen en su conjunto una completa visión para quienes viajen por primera vez a esta fascinante ciudad, que logra mantener el aburrimiento totalmente a raya.

Si se va a estar poco tiempo en Tokio, éste es uno de los mejores paseos donde encontrar los neones y rascacielos que han hecho famosa a la ciudad. Shinjuku(1)se divide en tres áreas: el sur y el este concentran el ambiente comercial y de ocio del barrio, mientras que en el oeste, llamado Nishi-Shinjuku, se levantan rascacielos de oficinas y hoteles de lujo. El punto de partida es la estación de Shinjuku , donde se ha de tomar la salida oeste en dirección al edificio del Gobierno Metropolitano. Se irá por la dirección adecuada si en minutos se ve a la derecha la Mode Gakuen Cocoon Tower(2), una construcción de 50 plantas que lleva la firma del arquitecto Kenzo Tange, el mismo que diseñó el rascacielos que acoge las oficinas metropolitanas(3)y que se encuentra en la acera de la izquierda unos pocos minutos más allá. Sus torres gemelas levantadas a ambos lados de la estructura central son inconfundibles. Cuenta con dos observatorios, uno en cada torre. La entrada es gratuita, y las vistas, magníficas. Enfrente de la torre sur se encuentra el rascacielos Shinjuku NS Building(4), con un atrio del que cuelga un reloj de péndulo de 28 metros de largo. Tomando la calle Gijido-dori en dirección sur se llega a Koshu-Kaido. Si se tuerce a la derecha, en pocos minutos se llegará a la torre Shinjuku Park (5), cuyos últimos trece pisos están ocupados por el famoso hotel de la película Lost in Traslation: el Park Hyatt Tokyo. En cambio, si se gira a la derecha se terminará llegando a la salida sur de la estación de Shinjuku. A un paso está el complejo comercial de Takashimaya Times Square, donde se puede hallar uno de los establecimientos de la famosa cadena Tokyu Hands, y, una vez cruzada la calle Meiji-dori, el parque Shinjuku-gyoen (6),un oasis de tranquilidad que está especialmente hermoso durante la floración de los cerezos y la llegada del otoño. Después de pasear o incluso de tumbarse en el césped para almorzar una caja bento, hay que dirigirse hacia el este -hacia la izquierda del punto desde donde se entró- en dirección a la estación de Shinjuku-Sanchome. Junto a ella se encuentra de nuevo la calle Meiji-dori, que conduce al santuario sintoísta de Hanazono(7)tras pasar los grandes almacenes Isetan, cruzar Yasukuni-dori y girar a la izquierda en un callejón unos metros más allá. Dedicado a la deidad del comercio, la entrada es libre y se puede visitar hasta el anochecer, momento en el que los vecinos callejones que conforman el llamado Golden Gai (8)bullen de animación. Frecuentado en los años 60 y 70 por artistas y bohemios, sus locales de copas siguen pendientes de una remodelación urbanística que podría hacer desaparecer este rincón. Una vez se sale de él, aparece Kabukicho (9), donde se reparten salas de juego, karaokes, clubes, bares y restaurantes donde cenar, aunque lo suyo es dirigirse de vuelta a la estación de Shinjuku. Junto a la salida este, comienza la calle Shinjuku-dori (10), donde se puede terminar echando un vistazo a la ropa Lolita Gótica de Marui One o entrando en los almacenes Mitsukoshi.

El ritmo frenético de Shibuya, las subculturas tokiotas y el glamour van de la mano en este recorrido que puede durar desde medio día hasta la jornada entera, dependiendo del tiempo dedicado a sus puntos de interés. La estatua del perro Hachiko (1), que está junto a la salida de la estación de Shibuya y punto habitual de encuentro de jóvenes, marca el principio del paseo. La música de los anuncios proyectados en las pantallas gigantes, las luces y el ir y venir de la gente cruzando uno de los pasos de peatones más famosos del mundo seguro que impactarán al viajero. Para observar el ritmo de este rincón, lo mejor es tomarse un café en el Starbucks que hay en la primera y segunda planta de The Q Front. Después conviene entrar en el centro comercial Shibuya 109 (2), que es uno de los mejores escaparates de moda juvenil de la ciudad, muy frecuentado por las chicas gyaru, obsesionadas por la estética, las prendas de marca, los tacones y el maquillaje. A la salida, hay que volver al cruce para desde allí tomar Koen-dori (3). Repleta de tiendas, boutiques y cafés-restaurantes, constituye también un excelente escaparate para observar a la juventud tokiota. Conviene salirse momentáneamente de ella para curiosear por las calles adyacentes, donde también hay comercios interesantes, como Parco -a la izquierda de Koen-dori- o el Beams Time. También se puede ver el Museo del Tabaco y la Sal, con una interesante colección de trabajos ukiyo-erelacionados con estos dos productos. En cualquier caso, se ha de llegar hasta el final de la calle, que acaba justo enfrente del parque Yoyogi. A la derecha se verá el Estadio Nacional Yoyogi (4), diseñado por Kenzo Tange en el año 1964 y considerado aún el edificio moderno más importante de Japón. Continuando en la misma dirección, en pocos minutos aparece el puente de Jingu (5), donde habrá mucho entretenimiento si se llega a él una tarde de domingo, ya que estará repleto de jóvenes que lucen orgullosos los atuendos propios de las tribus urbanas a las que pertenecen. Lolitas, cosplayers y suka-to danshi (chicos que llevan faldas sobre sus vaqueros) pueden verse aquí y en la entrada al parque Yoyogi (6), un excelente lugar donde descansar tras haber entrado al santuario de Meiji-jingu (7), fino ejemplo de arquitectura shinto. Al salir, hay que dirigirse a la estación de Harajuku para tomar la calle peatonal Takeshita-dori (8), donde se puede curiosear los modelos de las Lolitas o entrar en la famosa cadena de todo a cien Daiso. En el cruce con Meiji-dori, se ha de girar a la derecha. Enseguida se verá el complejo comercial de siete plantas Laforet, con las últimas tendencias, y a su espalda, siguiendo por una angosta calle, la soberbia colección de arte ukiyo-e del Museo de Arte Conmemorativo Ota (9). Al salir, se ha de girar a la derecha para tomar la avenida de Omotesando (10), una de las más sofisticadas de Tokio. Al igual que en Ginza, el lujo y la arquitectura se dan la mano en este tramo del paseo, donde aparecerán los exclusivos centros comerciales Omotesando Hills y Gyre, las tiendas Dior Omotesando y Louis Vuitton -cuya fachada refleja los árboles del bulevar-, la estructura acristalada del edificio Hanae Mori o el diseño firmado por Herzog De Meuron del edificio de Prada Aoyama, entre otros.

El barrio imperial

Repleto de hoteles de lujo, restaurantes de nivel y tiendas exclusivas, Marunouchi es ante todo el barrio que acoge el Palacio Imperial. Su interior no se puede visitar, excepto una parte y sólo en dos fechas del año: el 2 de enero y el 23 de diciembre, día del cumpleaños del Emperador. Sin embargo, los jardines Kokyo Gaien, Kokyo Higashi Gyoen y el parque Kita-no-maru-koen, sí están abiertos a los visitantes.

Arte y tradición caracterizan este paseo en el que se habrá de recurrir al metro para evitar perder tiempo en recorrer la distancia entre ambas zonas. El punto de partida es la estación Okachimachi, desde donde se cruzará la calle Kasuga-dori para llegar a Ameya Yokocho (1), una calle comercial muy popular con aproximadamente 500 tiendas de alimentos, ropa o cosméticos. A partir de las 10 de la mañana ya suele haber animación. Al final de la misma se verá la estación de Ueno. Hay que girar a la derecha para llegar a la entrada sur del parque Ueno, donde se levanta la estatua de Saigo Takamori, un guerrero y político muy popular por su activo papel a finales del shogunato Tokugawa y el principio de la era Meiji.

Ueno (2) fue uno de los primeros parques públicos de todo Japón, y lo que le hace único es la concentración de museos de arte y edificios históricos que se desperdigan por él. A pocos metros, a la derecha de la estatua, ya aparece la primera de las colecciones, el Museo Real de Ueno, y un poco más allá, el Museo Nacional de Arte Occidental, cuyo diseño corrió a cargo de Le Corbusier, y el Museo Nacional de Ciencias. Aunque la joya es, sin duda, el Museo Nacional de Tokio (3), en cuyo edificio principal se expone una soberbia colección que recorre la historia del arte japonés. Totalmente imprescindible. Si se prefiere visitarlo otro día, se puede aprovechar el tiempo para pasear por el parque -precioso durante la temporada de floración de los cerezos- y descubrir algunos de los edificios religiosos que en él se encuentran, como el templo budista Kan-eiji, a la derecha del museo, o el santuario de Toshogu, situado entre el zoo y el estanque Shinobazu. Una vez terminado el paseo por el parque, hay que volver a la estación de Ueno. Si se prefiere ir a Asakusa caminando, desde aquí se tomará la avenida Asakusa-dori; si no, se cogerá la línea Ginza en la estación para bajarse tres paradas después en Asakusa. Al salir a la calle, lo primero que se verá, al otro lado del puente, es el edificio de la empresa cervecera Asahi (4), coronado por un curioso remate dorado que representa una llama. Y, en primer plano, está el río Sumida (5), cuyas orillas se embellecen con la floración de los cerezos y desde donde parten muchos barcos, a bordo de los cuales se obtienen unas interesantes vistas de la ciudad. Tras avanzar unos metros por la calle Kaminarimon (6), se llega a la puerta homónima, de la que cuelga una enorme linterna de más de 600 kilos de peso. Tras ella, comienza la calle Nakamise, con puestos de regalos, souvenirsy comida, que conduce a la entrada de Sensoji (7), el templo budista más importante de la capital japonesa. Detrás del mismo se encuentra el santuario de Asakusa, que en el mes de mayo acoge uno de los festivales más importantes de todo el país, el Sanja Matsuri. Al oeste de Sensoji -a la izquierda según se mira de frente al templo- se abren una serie de calles de casas bajas y ambiente tranquilo que mantienen un cierto aire de lo que fue la antigua Edo. Cualquiera de ellas llevará hasta Kokusai-dori, que hay que cruzar para seguir hacia el oeste hasta llegar a Kappabashi Dogugai-dori (8). Casi un kilómetro de tiendas donde comprar palillos, cuencos, menaje, juegos de té, cestas de bambú y todo lo que a la cocina se refiere, incluyendo las famosas reproducciones de cera que se exponen en los escaparates de los restaurantes. Una verdadera tentación para muchos viajeros que, sin duda, agradecerán que sea el fin del paseo para irse directo al hotel con las nuevas compras.

La isla artificial

Odaiba nació a mediados del siglo XIX para proteger la ciudad de los ataques marítimos y hoy en día es un lugar de ocio muy popular entre los japoneses. La mejor manera de llegar es a través de la línea de monorraíl Yurikamome, que se coge en la estación de Shimbashi. Hay que bajarse en la parada de Aomi, junto al complejo de ocio Palette Town, donde se encuentra el parque temático Mega Web. Allí los amantes del motor podrán ver lo último y lo clásico de la compañía Toyota, además de poder probar uno de sus modelos en un pequeño circuito. Después se puede cambiar el volante por la toalla y sumergirse en un baño caliente en el Ooedo Onsen Monogatari. Si el cuerpo no ha quedado demasiado relajado para unas lecciones de ciencia, un poco más allá se encuentra Miraikan, el Museo Nacional de Ciencia Emergente e Innovación, donde se puede ver al robot Asimo en acción o asombrarse con las imágenes que se proyectan en su planetario. Tras un corto paseo, junto a la estación de Daiba, se llega al parque Odaiba Kaihin, con unas vistas inmejorables de la bahía de Tokio y el puente del Arco Iris. Las mejores fotografías se toman al atardecer a la altura del Hotel Nikko Tokyo o, un poco más allá, junto a una reproducción de la Estatua de la Libertad. Justo enfrente de ésta se encuentra la sede de Fuji TV, un espectacular edificio diseñado por Kenzo Tange y fácilmente reconocible por la enorme esfera de dos mil toneladas que se alza en lo alto de la estructura. La entrada permite hacer un tour por los estudios y subir al observatorio situado en el interior de dicha esfera.

Restaurantes de Tokio

Con casi doscientos locales con estrellas Michelin en su haber, once de ellos con la máxima puntuación, la ciudad de Tokio se ha revelado en los últimos años como un auténtico destino para amantes de la buena mesa. El universo culinario japonés es tan amplio, que resulta imposible abarcarlo en una estancia corta. Desde la sofisticación de la cocina kaiseki hasta la sencillez de un pincho, todo un mundo asoma para saciar la curiosidad gastronómica del viajero.

Hinokizaka

Tokyo Midtown, 9-7-1. Akasaka, Minato-ku.

Tlf. 34 23 80 00

El Ritz-Carlton es el único hotel de Tokio que alberga un restaurante japonés distinguido con una estrella Michelin. En su interior, decorado en estilo tradicional, se saborea la alta cocina kaiseki y los menús cambian cada mes para reflejar el paso de las estaciones. Como curiosidad, el agua usada para elaborar la sopa dashi es traída desde el sur de la región de Kansai para garantizar la originalidad de su sabor.

Kanda

1F Ka-mu Moto-Azabu Building. 3-6-34 Moto-Azabu, Minato-ku.

Tlf. 57 86 01 50

El chef Alain Ducasse es un admirador de la cocina kaiseki que se prepara en este restaurante. Sus tres estrellas Michelin aseguran una auténtica experiencia culinaria. Es imprescindible reservar.

Maru

B1F Aoyama KT Building. 5-50-8 Jingumae, Shibuya-ku.

Tlf. 64 18 55 72

Este local próximo a la estación de Omotesando es una buena dirección para probar la cocina kaiseki a un precio económico. Es muy popular, por lo que conviene evitar los fines de semana. También se puede pedir a la carta.

Yuian

Shinjuku Sumitomo Bldg. 52F. 2-6-1 Nishi-Shinjuku. Shinjuku-ku.

Tlf. 33 42 56 71

La piedra, la madera, los tatamis, las luces bajas y los ventanales abiertos a unas fantásticas vistas -el restaurante se encuentra en la planta 52- caracterizan este local de Shinjuku. Una buena selección de sake acompaña a la carta de especialidades, aunque también se puede elegir entre varios menús. Mejor reservar si se quiere disfrutar de las mesas junto a los ventanales.

Chez Aburiya

Nakameguro Branch: Higashiyama 1-6-16, Meguro-ku.

Tlf. 37 92 45 55

Restaurante de tipo izakaya, con pocos asientos y una barra donde probar algunos de los platos de su extensa carta. Un menú en inglés facilitará la decisión sobre qué pedir, donde no debería faltar el zaru dofu, un plato a base de tofu casero. Buena selección de sake.

Gonpachi

1F/2F 1-13-11 Nishiazabu, Minato-ku.

Tlf. 57 71 01 70

Aunque tiene varias localizaciones, es la de Ginza la más popular y la más adecuada para los extranjeros, ya que algunos camareros hablan inglés. En este amplio local han comido presidentes del país y mandatarios extranjeros. Especializado en yakitori, también es recomendable su tempura.

Nihonryori RyuGin

1F Side Roppongi Bldg. 7-17-24 Roppongi, Minato-ku.

Tlf. 34 23 80 06

Con dos estrellas Michelin y situado entre los 50 mejores restaurantes del mundo, chefs y gourmets visitan este templo de la cocina molecular, dirigido por Seiji Yamamoto. Sin romper pilares básicos de la cocina tradicional japonesa, como el respeto por la frescura y la estacionalidad de los productos, propone en su menú gastronómico creaciones tan fabulosas como su manzana acaramelada 2010, un postre deconstruido donde una cobertura de caramelo caliente envuelve un suave granizado de manzana.

Esaki

B1 Hills Aoyama Bldg, 3-39-9 Jingumae, Shibuya-ku.

Tlf. 34 08 50 56

Su decoración minimalista, con el color blanco como principal protagonista, permite concentrar toda la atención en los diversos platos de alta cocina japonesa que ofrecen los menús de este tres estrellas Michelin, uno de los más asequibles de la ciudad, sobre todo en sus propuestas para el almuerzo.

Tapas Molecular Bar

Hotel Mandarin Oriental. 2-1-1 Nihombashi Muromachi, Chuo-ku.

Tlf. 32 70 88 00

Valorado con una estrella Michelin, es imprescindible la reserva. La razón: tan solo ocho asientos y un menú de 20 pequeños platos similares a tapas que tarda dos horas en finalizarse. Más próximo a un laboratorio que a una cocina, el cliente puede ver cómo se preparan unos platos donde la deconstrucción juega un papel importante.

Sushi Saito

1F Jitensha Kaikan, 1-9-15 Akasaka, Minato-ku

Tlf. 35 89 44 12

Sus tres estrellas Michelin avalan la calidad, la frescura y la exquisitez del sushi que se sirve en este pequeño restaurante, situado frente a la embajada de Estados Unidos y cuya entrada sin señal alguna pasa desapercibida. Mejor reservar.

Kyubey

8-7-6 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 35 71 65 23

Un clásico del suhsi que lleva abierto desde hace más de 70 años y que fue el lugar donde nació el gunkan maki, una pieza cilíndrica formada por arroz envuelto en nori y cubierta habitualmente por huevas. Su local más emblemático es el que está situado en Ginza, aunque tiene otros abiertos en los hoteles Okura, New Otani, Keio Plaza e Imperial.

Daiwa Sushi

5-2-1 Tsukiji, Chuo-ku.

Tlf. 35 47 68 07

Famoso por la increíble frescura de su pescado y la singular destreza de sus cocineros, es una de las paradas imprescindibles cuando se visita el Mercado de Tsukiji. Unos locales más allá se encuentra Dai Shushi, otro de los sushi-bar más famosos de la ciudad.

Ukaitei

Jiji-Tsushin Bldg. 5-15-8 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 35 44 52 52

Lámparas art decó, cristalería de Baccarat, antigüedades europeas y toques japoneses decoran este local con aires románticos. Es uno de los mejores restaurantes de teppanyaki, donde los platos se preparan en plancha de acero. Su filete de wagyu, una raza bovina originaria de Kobe apreciada por su textura y sabor, es la estrella de la carta.

Seryna

3-12-2 Roppongi, Minato-ku.

Tlf. 34 02 10 51

Uno de los mejores lugares para disfrutar de un shabu-shabu. Este local de tres plantas también ofrece exquisitos filetes de ternera de Kobe acompañados de su salsa de sésamo y sashimi, entre otros platos.

Nagatacho Kurosawa

2-7-9, Nagata-cho, Chiyoda-ku.

Tlf. 35 80 96 38

Retroceder 200 años a la época Edo es posible en este restaurante famoso por su shabu-shabu, acompañado de fideos soba caseros. Los fans de Akira Kurosawa no podrán resistirse a probar algunos de los platos que el propio director comía, ya que la carta incluye recetas familiares de su hermana mayor.

Bird Land

B1F Tsukamoto Suzan Bldg, 4-2-15 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 52 50 10 81

Entre las estrellas Michelin también se encuentran restaurantes que ofrecen yakitori, como este local que para muchos amantes del pincho de pollo es el lugar por excelencia donde ir a tomarlo. El elaborado con okukuji shamo -gallo de pelea procedente de la prefactura de Ibaraki- y su paté casero son dos de sus especialidades.

Toufuya Ukai

4-4-13 Shiba-Koen, Minato-ku.

Tlf. 34 36 10 28

Al pie de la Torre de Tokio y situado en el interior de una antigua fábrica de sake se encuentra este restaurante especializado en platos elaborados con tofu, que elaboran artesanalmente con agua pura y brotes de soja recogidos manualmente. Una de sus especialidades es el tofu frito dos veces acompañado de miso dulce y crema de huevo.

Chanko Dining Waka

T-Wing B1F. 1-6-2, Kabukicho, Shinjuku.

Tlf. 52 92 45 27

Para probar la comida de los luchadores de sumo, la llamada chanko-nabe, conviene visitar este local, propiedad del campeón de sumo Masaru Hanada, conocido como Wakanohana. En la carta hay varios tipos de este guiso compuesto de caldo, vegetales y carne o pescado.

Ten-ichi

6-6-5 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 71 19 49

Este local de Ginza es uno de los mejores para probar la tempura. Fundado en 1930, tiene muchas franquicias por la ciudad, aunque el local por antonomasia es éste, localizado en las proximidades de las tiendas de Hermés y Chanel. Ligera y sin pizca de grasa, así es la tempura más famosa de Tokio. Por la noche es mejor reservar.

Maisen

4-8-5 Jingumae, Shibuya-ku.

Tlf. 34 70 00 71

Cercano a la estación de Gotanda y señalado por un cartel blanco donde aparece el dibujo de un cerdo, se encuentra este popular restaurante especializado en tonkatsu, chuletas de cerdo finamente empanadas. La cola a su puerta garantiza la calidad de sus materias primas y el buen precio que las acompaña. También es posible descubrir otros platos que cambian según la estación del año.

Sometaro

2-2-2 Nishi Asakusa, Taito-ku.

Tlf. 38 44 95 02

Hay que quitarse los zapatos y dejarlos a la puerta al entrar en este agradable local de mesas bajas especializado en okonomiyakis, que pueden cocinarse con los ingredientes que uno quiera o siguiendo las propuestas de la carta, como el furusatoten, donde el panqueque iría relleno de una sabrosa mezcla de vegetales que incluye flores de colza, helecho y brotes de bambú, entre otros. Además, hay un menú en inglés donde se explica cómo preparar un okonomiyaki.

Ivan Ramen

3-24-7 Minamikarasuyama, Setagaya-ku.

Roka-Koen Station.

Tlf. 67 50 55 40

Ivan Orkin es el nombre del neoyorquino que ha vuelto locos a los aficionados al ramen, la popular sopa de fideos de origen chino, desde que abriera en 2007 este pequeño local situado a un par de minutos de la estación Roka-Koen -salida norte-, en la línea Keio-honsen. Las colas a la entrada demuestran que sus fideos, elaborados por él mismo, algo no tan frecuente en los restaurante que ofrecen ramen, son realmente delicados y el caldo que lo acompaña, muy sabroso.

Tentake

6-16-6 Tsukiji, Chuo-ku.

Tlf. 35 41 38 81

Aunque se puede comer a lo largo de todo el año, es en invierno la mejor temporada para disfrutar del que se dice es uno de los alimentos más peligrosos del mundo: el fugu o pez globo. Sólo los chefs especialmente entrenados pueden cocinar este pescado que se ofrece en variados platos en este restaurante, ubicado junto al Mercado de Tsukiji, justo cruzando Harumi-dori. El local se enorgullece de servir el tora-fugu, la más buscada y peligrosa de las especies de peces globo.

Les Creations de Narisawa

2-6-15 Minami-Aoyama, Minato-ku.

Tlf. 57 85 07 99

Teniendo en cuenta que sus tutores han sido los reputados chefs franceses Paul Bocuse y Joel Robuchon, no es de extrañar que la innovadora cocina de Yoshihiro Narisawa haya catapultado este restaurante a la exclusiva selección de los mejores del mundo. Algunas de sus fabulosas creaciones son la ensalada de agua de manantial gelatinizada con nabo, berros y hoja de wuasavi o la delicada fritura de ayu (pez dulce) acompañada de pétalos de cerezo espolvoreados con azúcar glas.

Beige Tokyo

10F Ginza Chanel Bldg. 3-5-3 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 51 59 55 00

La alta costura se une a la alta cocina en este local selecto donde se dan la mano Chanel y Alain Ducasse. Situado en la última planta del edificio que la lujosa firma de moda tiene en Ginza, el Beige Tokyo es una dirección perfecta para saborear cocina contemporánea francesa con vistas a la zona.

Aroma Fresca

12F Trecious. 2-6-5 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 35 35 66 67

Aunque hace falta reservar con meses de anticipación, merecería la pena el intento por conocer el restaurante italiano más popular de Tokio. Su carta, donde se fusiona el recetario italiano con ingredientes propios de la cocina japonesa, ha sido ya galardonada por Michelin.

Sant Pau

Coredo Nihonbashi Annex. 1-6-1

Nihonbashi, Chuo-ku.

Tlf. 35 17 57 00

Si el paladar necesita volver a los orígenes mediterráneos, siempre se puede visitar el restaurante que la chef catalana Carme Ruscalleda tiene en Tokio. Nada cambia respecto a su local de Sant Pol de Mar, e incluso las materias primas son importadas desde España.

Hoteles en Tokio

La mayoría de los hoteles de Tokio se encuentran situados en edificios altos y rascacielos, lo que permite al viajero disfrutar de fantásticas panorámicas de la capital japonesa, que, al caer la noche, se convierte en un irreal escenario parpadeante de luces rojas. Un lujazo que equilibra el hecho de que, salvo en hoteles de categoría alta, las habitaciones no resultan demasiado espaciosas. Estas dos variables serán determinantes para la elección del alojamiento.

The Peninsula Tokyo

1-8-1 Yurakucho, Chiyoda-ku.

Tlf. 62 70 28 88

Localizado en el prestigioso distrito de negocios de Marunouchi, junto al Palacio Imperial y el parque Hibiya, es uno de los hoteles más exclusivos de la capital japonesa. Con unas vistas excepcionales de la ciudad, ofrece uno de los alojamientos más amplios de Tokio, con un mínimo de 51 metros cuadrados en la categoría inferior: la Superior Room.

Shangri-La Tokyo

1-8-3 Marunochi, Chiyoda-ku.

Tlf. 67 39 78 88

Ofrece una de las mejores vistas sobre la bahía de Tokio al ocupar las últimas 11 plantas del novísimo edificio Marunouchi Trust Tower Main y el sello de calidad propio de los establecimientos Shangri-La. Su exclusivo y solicitado spa CHI constituye el lugar perfecto para relajarse y probar tratamientos autóctonos como el kisetsu, inspirado en el paso de las estaciones y que utiliza sólo productos de temporada, como el yuzu, un cítrico que aparece, por ejemplo, en las terapias de invierno. Es mejor asegurarse la reserva.

Mandarin Oriental, Tokyo

2-1-1 Nihombashi Muromachi, Chuo-ku.

Tlf. 32 70 88 00

Las vistas desde su impresionante vestíbulo, localizado en la última planta de un edificio de 38 alturas, merecen la pena por sí mismas, aunque el Mandarin Oriental cuenta con otros atractivos, como el culinario, ya que entre sus cinco restaurantes se encuentran el Sense y el Tapas Molecular Bar, cada uno con una estrella Michelin. Sus 179 habitaciones y suites se localizan entre las plantas 30 y 36 y, si se desea una panorámica al Monte Fuji, hay que pedir las orientadas al oeste.

The Ritz-Carlton Tokyo

9-7-1 Akasaka, Minato-ku.

Tlf. 34 23 80 00

Situado en el edificio más alto de Tokio, el Midtown Tower, lo raro es que el lujoso The Ritz-Carlton no contara con las soberbias vistas de 360 grados que ofrece sobre la ciudad, incluido el Monte Fuji. De entre sus habitaciones y suites destaca la Japanese Carlton Suite, localizada en las plantas 47 y 48 y decorada al estilo tradicional, con futón, puertas shoji y tatamis. Su restaurante japonés Hinokizaka ha sido galardonado con una estrella Michelin en los últimos tres años.

Okura Tokyo

2-10-4 Toranomon, Minato-ku.

Tlf. 35 82 01 11

Situado a pocos pasos de Roppongi Hills y el llamado Triángulo del Arte, el elegante Hotel Okura Tokyo cuenta con una amplia colección de 2.500 piezas de arte budista y pintura tradicional japonesa a pocos pasos del edificio principal. Diseñado en los años 60, sus lujosas habitaciones aún retienen en la decoración toques de la época, al igual que el Orchid Bar, uno de los 12 restaurantes y bares que aloja en sus dos edificios.

Conrad Tokyo Hotel

1-9-1 Higashi-Shinbashi, Minato-ku.

Tlf. 63 88 80 00

Las obras de arte, tanto contemporáneas como tradicionales, hacen parecer a la mayoría de los espacios públicos de este establecimiento una verdadera galería de arte. Tras pasar por su impresionante vestíbulo, el cliente se encuentra con amplias habitaciones que tienen baños acristalados y vistas a los jardines de Hamarikyu y la bahía de Tokio, con el Puente del Arco Iris en la distancia.

Imperial Hotel

1-1-1 Uchisaiwai-cho, Chiyoda-ku.

Tlf. 35 04 11 11

Pocos elementos quedan del edificio original que diseñara el arquitecto Frank Lloyd Wright en 1923, aunque aún permanece cierto aire retro en el vestíbulo y el bar, puntos de encuentro de burócratas y gente adinerada de compras por la cercana Ginza. Su situación, junto al parque Hibiya y a poca distancia del Palacio Imperial, se suma al excelente servicio que ha hecho famoso al hotel. Las habitaciones del edificio principal son mucho más amplias que las de la torre, aunque éstas tienen mejores vistas.

The Capitol Hotel Tokyu

2-10-3 Nagata-cho, Chiyoda-ku.

Tlf. 35 03 01 09

Las shoji (puertas deslizantes de papel) le dan un aire tradicional a las 251 habitaciones y suites de este hotel inaugurado en el otoño de 2010. Situado en Akasaka, sobre la colina del santuario de Hie, tiene entre sus atractivos el restaurante Suiren, rodeado de jardines y estanques, un entorno tranquilo, situado en pleno centro de Tokio y perfecto para disfrutar de la kaiseki, la exquisita alta cocina japonesa.

New Otani

4-1 Kioi-cho, Chiyoda-ku.

Tlf. 32 65 11 11

Escenario en su día del cuartel de Spectra en la película de James Bond Sólo se vive dos veces, el Hotel New Otani puede presumir de tener uno de los jardines japoneses más agradables de la capital japonesa: cuatro hectáreas de 400 años de antigüedad que en su día pertenecieron a un señor feudal y que hoy sigue siendo uno de los principales atractivos de este enorme hotel, distribuido en tres edificios, donde son necesarios dos puntos de información para aquellos que se despistan en la búsqueda de alguno de sus 37 restaurantes, bares o cafés.

Four Seasons at Chinzan-So

2-10-8 Sekiguchi, Bunkyo-ku.

Tlf. 39 43 22 22

La soberbia Japanese Suite, los excepcionales tratamientos del Yu, The Spa y el oasis de paz que conforman las siete hectáreas de jardín que rodean al establecimiento convencen al huésped más sibarita. Además, es uno de los mejores lugares de la ciudad para hospedarse durante la Sakura o floración del cerezo, ya que se encuentra junto a las orillas del río Kanda, que se tornan blancas con la llegada de la primavera. Durante el fin de semana, la pagoda de mil años de antigüedad y la cascada, localizada en el jardín, son escenario habitual de bodas.

Ginza Yoshimizu

3-11-3 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 32 48 44 32

Situado en pleno distrito comercial de Ginza, este ryokan es una buena dirección para disfrutar del alojamiento tradicional del país. El característico estilo minimalista de la decoración japonesa aparece en sus habitaciones, donde no hay televisión, nevera ni teléfono por la política nature-friendly del ryokan. Dos baños onsen están disponibles para los clientes que deseen disfrutar de los tradicionales baños calientes del país.

Sukeroku No Yado Sadachiyo

2-20-1 Asakusa, Taito-ku.

Tlf. 38 42 64 31

A diferencia de otros ryokans de la ciudad, cuyo encanto permanece escondido tras fachadas de cemento, el Sadachiyo permite trasladarse a la época Edo desde la misma entrada. Situado a cinco minutos a pie del templo de Asakusa, cuenta con veinte habitaciones de estilo tradicional y dos baños onsen, uno de ciprés japonés y otro de granito negro, que son perfectos para relajarse tras un día de visita por la ciudad. Si se va a trasnochar, hay que tener en cuenta que la entrada del hotel se cierra sobre las dos de la madrugada.

Shibuya Granbell Hotel

15-17 Sakuragaoka-cho, Shibuya-ku.

Tlf. 54 57 26 81

A tiro de piedra de la estación de Shibuya, su excelente localización viene acompañada además de tarifas terrenales. Mejor elegir las twins que las dobles, ya que ofrecen un mayor espacio. También cuenta con siete elegantes suites, entre las que destaca la View Bath Suite, con unas fantásticas vistas que se pueden disfrutar desde la cama, la bañera o la terraza.

Mitsui Garden Ginza Premier

8-13-1 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 35 43 11 31

Encontrar un buen alojamiento a precios razonables en el distrito de Ginza no resulta una tarea fácil, salvo que se reserve directamente en este hotel con vistas a la Torre de Tokio. Las habitaciones están decoradas en tonos cálidos, color tierra, con ventanales de suelo a techo, que incluyen la que posiblemente sea la bañera con vistas a mejor precio de la ciudad y que se encuentra en la View bath Twin.

Park Hotel Tokyo

1-7-1 Higashi-Shimbashi, Minato-ku.

Tlf. 52 11 11

Situado en la moderna zona de Shiodome, este hotel no sólo auna diseño y servicio a buen precio sino que además se encuentra a un corto paseo o a una parada de metro del famoso Mercado de Tsukiji, lo que se agradece bastante dadas las horas tempranas a las que hay que visitar este popular enclave de la ciudad. Desde sus habitaciones se tienen vistas a la Torre de Tokio o a la bahía.

Century Southern Tower

2-2-1 Yoyogi, Shibuya-ku.

Tlf. 53 54 01 11

Este establecimiento hotelero ocupa las últimas plantas de un impresionante rascacielos de Shinjuku, situado justo a un par de minutos de la salida A1 de la famosa estación. Se trata, sin duda, de una buena dirección que ofrece, además de su excelente localización, buenas vistas y habitaciones confortables a precios más que razonables.

The B Roppongi

3-9-8 Roppongi, Minato-ku.

Tlf. 54 12 04 51

Aplicando la idea de que el diseño no se encuentra reñido con el bolsillo, el grupo Ishin Hotels ha creado los The B, unos hoteles boutique donde se dejan de lado ciertas facilidades, como el servicio de habitaciones, para ofrecer un alojamiento más económico, pero no por ello descuidado. El acceso a Internet gratuito, la televisión de plasma o el baño, decorado con todos los detalles posibles, lo demuestran. La cadena tiene otros alojamientos en los distritos de Ikebukuro, Akasaka, Sangenjaya y Ochanomizu.

Claska

1-3-18 Chuo-cho, Meguro-ku.

Tlf. 37 19 81 21

Sus nueve habitaciones, que están decoradas en un acertado estilo minimalista, le convierten en uno de los pocos hoteles boutique existentes en la ciudad. Con unos precios bastante ajustados para hablar de Tokio, es una excelente dirección si se quiere huir de los grandes establecimientos que pueblan la capital japonesa. Localizado en un tranquilo barrio residencial, a unos 15 minutos a pie de la estación JR Meguro, el Hotel Claska cuenta también con una tienda-galería de la que es difícil salir sin un capricho para la casa.

Seiyo Ginza

1-11-2 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 35 35 11 11

Uno de los más exclusivos alojamientos de la ciudad que, debido a que sólo tiene 77 habitaciones -lo que en Tokio casi se puede considerar un hotel boutique-, presume de tener una excelente atención personalizada. Que recuerden las preferencias del cliente, como su desayuno favorito o el alimento que le desagrada, es una de sus mejores bazas, al igual que sus baños, los más espaciosos del país, con unas duchas separadas, tocador y vestidores.

El hotel de "Lost in Translation"

La película de Sofia Coppola convirtió las vistas que ofrece el lujoso Hotel Park Hyatt Tokyo en las más famosas de la ciudad. Localizado en las últimas plantas de un rascacielos de oficinas de Shinjuku, sus habitaciones son elegantes y espaciosas, y la piscina acristalada, espectacular. Si no se es cliente, siempre se puede ir a cenar o tomar una copa al New York Grill, el restaurante donde Bill Murray y Scarlett Johansson se conocen. tokyo.park.hyatt.com

Cafés y bares

Hace veinte años era complicado tomarse un café en Tokio. Afortunadamente, ahora son más los locales que huelen a grano tostado, aunque esta alternativa haya que pagarla cara. Modernos, antiguas rarezas y establecimientos escondidos en callejuelas se unen a "izakayas", bares y algún que otro espacio de vanguardia donde sentarse a probar el sake o acabar la tarde con una cerveza en la mano.

Daylesford Organic Café and Food Hall

La Porte 1 2F, 5-51-8 Jingumae. Shibuya-ku.

Tlf. 34 86 00 80

Si después del paseo por Omotesando apetece descansar con una taza de té o café en la mano, este local que acaba de abrir la compañía inglesa de productos orgánicos Daylesford representa una excelente alternativa. Además de su gran selección de dulces british, destaca el menú de su restarante y su completa tienda de alimentación.

Chatei Hatou

1F Higashiguchi Futaba Bldg. 1-15-19 Shibuya, Shibuya-ku.

Tlf. 34 00 90 88

En una pequeña calle que parte de Meiji-dori y situado a pocos minutos de la estación de Shibuya se encuentra este agradable oasis, donde suena música clásica y el aroma del café lo llena absolutamente todo. Aquí se puede degustar té, dulces y, además, tiene una carta donde se pueden hallar granos de café que han envejecido durante tres años antes de ser tostados y que aportan a la bebida un gusto especial, entre suave y amargo.

Tajimaya Kohiten

1-2-6 Nishi Shinjuku, Shinjuku-ku.

Tlf. 33 42 08 81

Si lo que realmente apetece es tomar un buen café después de admirar los rascacielos de Shinjuku, una magnífica elección es este local que hace esquina con el Hotel Nishi Shinjuku. Dispone de una interesante carta y de fondo suena una suave música de jazz.

Café de l''Ambre

8-10-15 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 35 71 15 51

A pocos metros de las tiendas de Hermès y Chanel de Ginza se encuentra este pequeño local con más de 60 años de historia. Un aroma intenso flota en su interior, donde se puede elegir entre más de 30 variedades de granos de café. Una taza puede costar de 650 a 1.360 yenes -conviene recordar que degustar un buen café en Tokio siempre resulta caro-, pero merece la pena.

Orange Pekoe

1-61-3 Nishigahara, Kita-ku.

Tlf. 39 15 51 50

Un establecimiento perfecto para tomar un té si se va a pasear por el agradable jardín Rikugien. Situado a diez minutos de la estación Komagome, este pequeño local ofrece una amplia variedad tanto nacional como internacional. Se puede acompañar también de sus deliciosos dulces caseros.

Christie

1-16-1 Jingumae, Shibuya-ku.

Tlf. 34 01 28 66

Situado en una callecita que sale de Takeshita dori, este local lleva ofreciendo cerca de cuarenta tipos de té desde hace treinta años. Ambiente relajado y un amplio surtido de dulces lo convierten en la parada perfecta para descansar. Se localiza fácilmente gracias a su cartel, donde aparece una ilustración de un hombre fumando.

Super-deluxe

B1F, 3-1-25 Nishi-Azabu, Minato-ku.

Tlf. 54 12 05 15

Si se desea comprobar por qué Tokio es una de las ciudades más vitales del mundo, hay que acercarse a este local de vanguardia situado a cinco minutos de la salida 1B de la estación de Roppongi. Para tomar un café tranquilo a media tarde -abren a partir de las seis- o para una primera copa mientras se asiste a algunos de sus numerosos eventos multidisciplinares.

Microcosmos

2F Fontis Bldg. 2-23-12 Dogenzaka, Shibuya-ku.

Tlf. 57 84 54 96

A menos de diez minutos de la estación de Shibuya y próximo al Shibuya City Hotel se encuentra este nuevo y agradable café lounge donde resulta posible tanto tomar un café a media tarde, acompañado de un pastel, como almorzar al mediodía o disfrutar de un cóctel al final de la jornada.

Buri

1-14-1 Ebisunishi, Shibuya-ku.

Tlf. 34 96 77 44

A menos de cinco minutos de la estación de Ebisu se encuentra uno de los nuevos tachinomiyas de la ciudad. Estos son locales donde los clientes degustan sake de pie junto a la barra. Tiene una amplia variedad procedente de todo el país y es una excelente dirección para conocer esta popular bebida.

Galali

3-6-5 Jingumae, Shibuya-ku.

Tlf. 34 08 28 18 w www.gala-e.com

A diez minutos de la estación de Gaienmae y la calle Aoyama dori se encuentra esta izakaya, a la que se llega tras cruzar una bonita puerta deslizante de listones de madera. Luces bajas, una amplia selección de sake y doce tipos de salazones entre los que elegir para acompañar cada vaso. También se puede cenar.

Kuri

2F Tony Bldg. 6-4-15 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 35 73 80 33

A pocos minutos del metro de Ginza, en una paralela a Sotobori Dori y junto al Hotel Ginza Bellevue, está un local donde degustar cerca de cien variedades de sake procedentes de todo el país. Se sirve en vasos de 60, 120 ó 180 mililitros.

Belgian Beer Café Antwerp Central

B1F Tokyo Bldg. Tokia. 2-7-3 Marunouchi, Chiyoda-ku.

Tlf. 52 88 73 70

Perfecto para quienes tengan morriña de los sabores y la estética de las cervecerías europeas. Con varias localizaciones en la ciudad, ésta es la más fácil de encontrar, ya que se encuentra a un paso de la estación de Tokio, en los bajos del edificio Tokia, que también cuenta con numerosos restaurantes donde cenar antes o después de tomarse la cerveza.

Sekirei

2-2-23 Moto-Akasaka, Minato-ku.

Tlf. 37 46 77 23

Abierto durante la temporada de verano, es sin duda uno de los mejores espacios de la ciudad de Tokio para disfrutar de una cerveza al aire libre. Muy próximo a los jardines del santuario Meiji y a la estación de Aoyama-itchome, por la noche se pueden ver representaciones de danza tradicional japonesa. Si no se quiere esperar, conviene acercarse antes de las 17.30 horas.

La Jetée

1-1-8 Kabukicho, Shinjuku-ku.

Tlf. 32 08 96 45

Los callejones del Golden Gai son fascinantes, aunque la mayoría de sus locales suelen ser para una clientela fija local. Sin embargo, La Jetée es una excepción. Propiedad de un cinéfilo, a su barra se han sentado Quentin Tarantino, Wim Wenders o Francis Ford Coppola. Hablan francés y algo de inglés, y merece la pena dejarse caer por él si se está en Shinjuku.

Lupin

5-5-11 Ginza, Chuo-ku.

Tlf. 35 71 07 50

A pocos minutos de la salida de la estación de Ginza, situada en Harumi Dori, se encuentra este local con historia, tomando la calle donde hace esquina la tienda Coach. Abierto en 1928, este bar, frecuentado en su día por escritores japoneses, es un local tranquilo para charlar mientras se toma una copa o una cerveza. A partir de las nueve de la noche suele estar lleno.

Tomar un café con glamour

Disfrutar de una taza de café en Tokio puede convertirse en una experiencia glamourosa si el lugar elegido lleva por nombre Chanel o BVLGARI. Las firmas de moda ofrecen espacios sofisticados donde relajarse tras el shopping. Se puede, por ejemplo, tomar un expreso acompañado de chocolate en Maison Hermès Le Café (2F, 5-4-1 Ginza, Chuo-ku) o se puede ir a Chanel (3-5-3 Ginza, Chuo-ku), en cuya azotea está Le Jardin de Tweed, donde se puede disfrutar de un café acompañado de dulces firmados por Alain Ducasse. Si se prefiere un té con dulces japoneses, lo mejor es ir a Mikimoto Ginza 2 (2-4-12 Ginza, Chuo-ku), donde sirven el caro té de orquídea. Y si el paseo tiene lugar en Omotesando, habrá que ir al BVLGARI il Café, el primero que abre la compañía en el mundo (Gyre 2F, 5-10-1 Jingumae, Shibuya-ku).

Noche y espectáculos

Tokio es una de esas ciudades del mundo que tarda en irse a la cama. Quien busque su lado nocturno tiene ante sí toda una variedad de posibilidades, que incluye locales sofisticados con gente guapa, pequeñas salas de rock, elegantes establecimientos donde tomarse un exclusivo cóctel o clubes a la última. Sin olvidar las artes escénicas tradicionales, donde el alma del pueblo japonés queda al descubierto.

Teatro Nacional de Noh

4-18-1 Sendagaya, Shibuya-ku.

Un centro cultural que está dedicado a la representación del noh y el kyogen, las artes escénicas más antiguas del país, con más de 600 años de historia. El primero, más sofisticado, busca la perfección de la belleza, mientras que el kyogen, más humorístico, intenta captar la verdadera esencia humana. El noh tiene un significado más profundo que el kabuki y es una experencia singular de la cultura japonesa.

Kabuki-za

4-12-15 Ginza, Chuo-ku.

Es uno de los principales escenarios de Japón para la representación del kabuki, el arte escénico más conocido del país. Las obras son dramáticas, el vestuario soberbio y las historias universales, por lo que los extranjeros pueden seguirlas con la ayuda de audios facilitados en inglés. El Kabuki-za está siendo reconstruido y hasta su nueva inauguración, programada para el año 2013, la mayor parte de las representaciones se desarrollan en el vecino teatro Shimbashi Enbujo (ver web de referencia).

Teatro Nacional de Japón

4-1 Hayabusacho, Chiyoda-ku.

Aparte de representaciones de otras artes escénicas, incluyendo el kabuki, aquí se puede ver bunraku, el tradicional teatro de títeres de Japón que tiene sus orígenes en el siglo XVII. Las historias se pueden seguir con audios en inglés.

Teatro Tokyo Takarazuka

1-1-3 Yurakucho, Chiyoda-ku.

La compañía femenina Takarazuka es la más prestigiosa del país dentro del campo de los musicales. Famosa por su puesta en escena y su fantástico vestuario, interpreta éxitos modernos tanto de Broadway como creaciones nacionales.

Ginza Bar Rage Boss

Ginza Boss Building 4F,5F 8-5-24 Ginza. Chuo-ku.

Tlf. 55 68 19 68

Cócteles de alto nivel en este local a pocos minutos de la estación de Ginza. El arte de la mezcla del bar Rage ofrece tanto las combinaciones habituales como creaciones propias, con toques exóticos gracias al uso de frutas frescas del país.

New York Bar

Park Hyatt Tokyo. 3-7-1-2 Nishi-Shinjuku, Shinjuku-ku.

Tlf. 53 23 34 58

Localizado en el piso 52 del Park Hyatt Hotel, el New York Bar es una cita para cinéfilos y amantes de las buenas vistas. Con música jazz de fondo, los que quieran emular a Bill Murray en la película Lost in Translation pueden pedir el cóctel LIT, que, aunque ya no aparece en la carta, lo siguen haciendo a petición: sake, zumo de arándanos, lima y licor de cereza y melocotón. Se cobra entrada (2.200 yenes) a partir de las ocho de la tarde.

Kita Aoyama Saloon

B1F Yamazaki Bldg. 2-7-18 Kita-Aoyama, Minato-ku.

Tlf. 34 79 75 53

Junto a la salida 3 de la estación de metro de Gaienmae, en el edificio Yamazaki se halla este sofisticado local cuya cuidada decoración crea el clima perfecto para tomarse una copa de champán o un cóctel.

Bar Do Not Make It a One Night Stand

B1F Wind Roppongi Bldg. 3-13-6 Roppongi, Minato-ku.

Tlf. 37 46 96 60

La quinta salida de la estación de metro de Roppongi conduce a este establecimiento, que está localizado en una calle trasera, entre el Friday''s y el Don Quijote. En este conocido establecimiento se puede tomar un cóctel o elegir entre sus más de 200 whiskys y licores.

Shot Bar Zoetrope

3F Gaia Bldg. 7-10-14 Nishi-Shinjuku, Shinjuku-ku.

Tlf. 33 63 01 62

La salida D5 de la estación de Shinjuku Nishiguchi conduce a este local, que está próximo al Hotel Nishi-Shinjuku. El cine y el whisky japonés son los verdaderos protagonistas en Shot Bar Zoetrope. Bandas sonoras como música de fondo, proyecciones de cine mudo y lo mejor de las destilerías japonesas convierten a este bar en un clásico.

Trump House

2F Hagi Bldg. 1-6-5 Dogenzaka, Shibuya-ku.

Tlf. 68 09 08 50

A cinco minutos de la estación de Shibuya se localiza una de las citas nocturnas más de moda de la capital japonesa. A partir de las 23 horas, este local, que está repleto de espejos, lámparas y otros adornos, se llena con la juventud guapa tokiota. El ambiente resulta muy entretenido y animado.

Air

Hikawa Bldg B1F-B2F, 2-11 Sarugakucho, Shibuya-ku.

Tlf. 57 84 33 86

Es otra de las localizaciones de la película Lost in Translation. El club Air, estiloso y amplio, pone el ritmo a la noche con los mejores dj''s nacionales e internacionales. Se puede llegar a él desde las estaciones de Shibuya y Daikanyama.

Womb

2-16 Maruyamacho, Shibuya-ku.

Tlf. 54 59 00 39

Situado a unos 10 minutos de la estación de Shibuya, hay que estar atento para encontrarlo, ya que en su exterior apenas hay señales que indiquen que tras el muro se encuentra uno de los mejores clubes del mundo. Como la mayoría de discotecas de Tokio, hay que llevar un documento de identidad válido para poder entrar en su interior.

Le Baron de París

Aoyama Center Bldg. B1, 3-8-40 Minami-Aoyama, Minato-ku.

Tlf. 34 08 36 65

Con cierto aire de antiguo cabaré -es una sucursal del famoso club de París-, este club situado en Aoyama es, sin duda, uno de los mejores locales para quien rebasa los 30 años. La clientela es muy cool.

NewLex Edo

B1F Dai-3 Goto Bldg. 3-13-14 Roppongi, Minato-ku.

Tlf. 34 79 74 77

El antiguo Lexington Queen cambió de nombre, pero sigue presumiendo de ser el mejor lugar para codearse con modelos y celebridades extranjeras en su paso por Tokio. Público local y extranjero a partes iguales. A escasos minutos de la salida 5 de la estación de Roppongi.

Advocates Bar

B1F Dai-7 Tenka Bldg. 2-18-1 Shinjuku, Shinjuku-ku.

Tlf. 33 58 86 38

A cinco minutos de la estación de Shinjuku-Sanchome, este local se encuentra en Ni-chome, una de las zonas gays más populares de la ciudad. El bar es pequeño, pero muy animado, y está abierto tanto a gays como a lesbianas.

Arty Farty

2F Dai-33 Kyutei Bldg, Shinjuku 2-11-7, Shinjuku-ku.

Tlf. 53 62 97 20

Gays y lesbianas se dan cita en este local espacioso donde empezar la noche o mover el cuerpo hasta altas horas de la madrugada. Se encuentra junto a la salida C5 de la estación de Shinjuku-Sanchome.

Kins Womyn

3F Daiichi Tenka Bldg. 2-15-10 Shinjuku, Shinjuku-ku.

Tlf. 33 54 87 20

Próximo a la salida C8 de la estación de Shinjuku-Sanchome, este local de público lésbico es perfecto para viajeras extranjeras, ya que se habla inglés. Es uno de los locales clásicos del barrio.

Dragon Men

1F Stork Nagasaki Bldg. 2-11-4 Shinjuku, Shinjuku-ku.

Tlf. 33 41 06 06

Vecino del Arty Farty, Dragon Men es uno de los espacios más amplios de Ni-chome y, como su propio nombre indica, está dirigido sólo a los hombres. Presume de contar con un ambiente moderno y un público de lo más variopinto.

Loft

B2F Tatehana Bldg. 1-12-9 Kabukicho, Shinjuku-ku.

Tlf. 52 72 03 82

Está situado en un sótano en pleno Kabukicho, cerca del parque Shinjuku Cinecity. Es toda una institución de las actuaciones en vivo de diversos géneros, tanto de grupos nacionales como internacionales.

Shinjuku Pit Inn

B1F Accord Bldg. 2-12-4 Shinjuku, Shinjuku-ku.

Lleva más de 35 años ofreciendo conciertos de jazz y es uno de los clásicos de la ciudad, sobre todo para escuchar a los mejores artistas del país. La salida más próxima desde la estación de Shinjuku-Sanchome es la C5.

Milk

Roob 6 Bldg. 1-13-3 Ebisu-Nishi, Shibuya-ku.

Tlf. 54 58 28 26

Punk, rock y música underground en este local de música en directo que cuenta con tres plantas sótano repletas de personajes variopintos. Una de las mejores salas de Tokio.

Blue Note Tokyo

B2F Raika Bldg. 6-3-16, Minami-Aoyama, Minato-ku.

Tlf. 54 85 00 88

Sucursal del Blue Note Jazz Club New York, es uno de los mejores escenarios para escuchar jazz, al igual que el de New York. Se encuentra a menos de diez minutos de la salida B3 de la estación de Omotesando.

Karaokes para divertirse cantando

Ir al karaoke es una costumbre arraigada entre los japoneses. Tanto les gusta, que es habitual ver en ellos entre semana a grupos de oficinistas que acuden a divertirse a la salida del trabajo. Los hay de sala, donde todo el mundo comparte el micrófono; o los llamados karaokes box, que ofrecen habitaciones privadas a sus clientes. En el primer caso, una buena dirección es Smash Hits (w www.smashhits.jp), gracias a su amplio repertorio de canciones internacionales que incluyen temas españoles. Otro clásico de Shibuya, del tipo box, es Karaoke Kan (30-8 Udagawacho, Shibuya-ku), una cadena nacional cuya sucursal más conocida es ésta, ya que en sus habitaciones 601 y 602 Scarlett Johansson y Bill Murray hicieron gorgoritos en Lost in Translation. En el Shidax Village Club (1-12-13 Jinnan, Shibuya-ku) hay más de 130 habitaciones a un paso del Starbucks que mira sobre el cruce de Shibuya.

Mercados y tiendas

Es difícil volver de Tokio con las manos vacías. Las tentaciones son tantas, que sólo el presupuesto marcará el límite. Habrá quien se vuelva loco con la moda y quien limpie una estantería de cómics. O quien ante la artesanía de cuencos, abanicos o cuadernos decorados con motivos del arte "ukiyo-e" tema por la capacidad de su maleta. "Delicatessen", tecnología y regalos la convierten en un paraíso de las compras.

Mandarake

5-52-15 Nakano, Nakano-ku. Nakano Station.

Con diez sucursales, la tienda de Nakano es la primera que abrió esta compañía especializada en manga y anime. Tiene una amplia gama de novedades y organiza performances de jóvenes disfrazados de sus personajes favoritos. Supone también un atractivo para los amantes del doujinshi, historias realizadas por aficionados.

Cosmint

Rm. 606, 3-2-7 Higashi Ikebukuro, Toshima-ku. Ikebukuro Station.

Es el templo por excelencia para los cosplayers, quienes vienen a esta tienda a buscar las ropas con las que vestirse para emular a sus personajes favoritos. Cosmint, que ha provisto de sus modelos a películas y programas de televisión, es un buen sitio para conocer en qué consiste esta subcultura.

Kinokuniya Shinjuku

3-17-7 Shinjuku, Shinjuku-ku. Shinjuku Station.

La famosa cadena de librerías de Tokio ofrece una amplia selección de manga muy recomendada por los aficionados. Lo más interesante para el viajero es que hay una gran variedad de ellos en inglés.

Book Off

32-13 Udagawa-cho, Shibuya-ku. Shibuya Station.

Ofrece una considerable selección de mangas nuevos, con secciones especializadas en publicaciones de segunda mano. También es posible encontrar CDs y videojuegos.

Animate

4-3-2 Soto-Kanda, Chiyoda-ku.

Akihabara Station.

Ocho plantas repletas de anime, cómics, videojuegos y todo tipo de mercancía asociada con estos productos. Situado en la calle principal de Akihabara, esta tienda es una de las más grandes de la conocida cadena.

Laox

1-2-9 Soto-Kanda, Chiyoda-ku.

Akihabara Station.

Uno de los referentes en Akihabara, con precios interesantes. El staff habla varios idiomas y puede informar de las características y voltajes del país de origen.

Yamada Denki

1-5-7 Higashi Ikebukuro, Toshima-ku.

Ikebukuro Station.

La mayor cadena de productos electrónicos del país. Esta sucursal cuenta con 23.000 metros cuadrados de espacio de venta distribuidos en nueve plantas.

Yodobashi Camera

1-11-1 Nishi-Shinjuku, Shinjuku-ku.

Shinjuku Station.

Plantas y más plantas, hasta trece, de equipos fotográficos y todo lo referente a la electrónica. Un paraíso para los aficionados, quienes además pueden conseguir descuentos al Impuesto del Consumo con sólo llevar el pasaporte en la mano. Tiene más tiendas repartidas por la ciudad.

Bic Camera

1-5-1 Nishi-Shinjuku, Shinjuku-ku. Shinjuku Station.

Aunque tiene una tienda en Shinjuku-dori, a pocos minutos de la salida este de la estación del mismo nombre, es más grande la situada en la salida oeste. Ofrece lo suficiente para satisfacer a quien vaya buscando productos electrónicos. Cuenta con dos tiendas más en Ginza/Yurakucho y en Ikebukuro.

Tower Records

1-22-14 Jinnan, Shibuya-ku. Shibuya Station.

Es la tienda de música más grande de Tokio. Antes de comprar permiten escuchar los CDs en los puestos que están repartidos por la tienda. Tiene una de las mejores selecciones de revistas extranjeras en su librería de la última planta.

Disk Union

30-7 Udagawacho, Shibuya-ku.

Shibuya Station.

Es toda una tentación para los coleccionistas de discos de vinilo que no dudan en acercarse hasta Udagawacho, la calle especializada en este soporte clásico que vuelve de nuevo a estar de moda.

Manhattan Records

10-1 Udagawacho, Shibuya-ku.

Shibuya Station.

Otro de los destinos predilectos para los coleccionistas. Entre su selección destacan las obras de hip-hop y rap nacional. También se pueden encontrar flyers sobre la programación de los clubes.

Chikusen

2-3 Nihombashi Kofune-cho, Chuo-ku. Mitsukoshi-mae Station.

Dedicado al diseño de kimonos desde el siglo XIX, Chikusen pertenece a la categoría de los llamados comercios de toda la vida. Su especialidad son los edo komon, unos finos kimonos de seda apropiados para eventos formales, y los yukata, elaborados con algodón o lino, más informales y apropiados para los festivales de verano. Cierra durante los fines de semana.

Yoshitoku

1-9-14 Asakusabashi, Taito-ku. Asakusabashi Station.

A un minuto de la estación de Asakusabashi se encuentra esta tienda que desde hace 300 años elabora tradicionales muñecas de porcelana y seda. Entre sus clientes se encuentra la casa del Emperador de Japón.

Hashi Ginza Natsuno

6-7-4 Ginza, Chuo-ku. Ginza Station.

La meca de los palillos: tallados a mano, de colores, lacados, especiales para niños... Los precios van desde los 500 a los 10.000 yenes. Se encuentra en la calle Miyuki, a unos dos minutos del famoso cruce de Ginza.

Hakuhinkan Toy Park

8-8-11 Ginza, Chuo-ku. Ginza Station.

A medio camino entre un museo del juego y un parque de atracciones, esta tienda de grandes dimensiones es perfecta para los más pequeños, que podrán divertirse con muñecas, figuras articuladas y videojuegos, entre una infinidad de juguetes. También tiene teatro y restaurantes para niños.

Kamawanu

23-1 Sarugakucho, Shibuya-ku. Daikanyama Station.

Tenugui son las tradicionales toallas de mano que se pueden encontrar en los sento y onsen. Esta tienda ofrece patrones y colores para todos los gustos y tendencias.

Daiso Harajuku

1-19-24 Jingumae, Shibuya-ku. Harajuku Station.

Una de las cadenas más grandes de Tokio, al estilo todo a cien, pero con más de 70.000 productos. Presentan mil de ellos nuevos cada mes: desde accesorios para la vida cotidiana hasta ropa o comida. Es muy popular entre los tokiotas.

Oriental Bazaar

9-13-5 Jingümae, Shibuya-ku. Omotesando Station.

Una de las tiendas más grandes de regalos de la ciudad. Es posible hacerse con artesanía de alta calidad, pero también con recuerdos de Japón a precios asequibles; es por ello uno de lugares más populares entre los turistas.

Tokyu Hands

Times Square Bldg., 5-24-2 Sendagaya, Shinjuku-ku. Shinjuku Station

"Cuando lo visitas, encuentras lo que quieres". Para la casa, para el tiempo libre, para regalar o incluso para nada... Tiene muchos de esos objetos absurdos que uno no sabe ni por qué compra. Muy difícil salir con las manos vacías. Es muy popular en todo el país.

Los turistas extranjeros durante su visita a Tokio pueden ahorrarse unos cuantos yenes con tan sólo enseñar el pasaporte. Ciertos productos están grabados en el país con un 5 por ciento de tasas y en determinados comercios, como los grandes almacenes o las tiendas de tecnología, se devuelve esa cantidad si la compra realizada supera los 10.000 yenes.

Kiya

2-2-1, Nihombashi Muromachi, Chuo-ku. Mitsukoshi-mae Station.

Si se quiere volver a casa con un afamado cuchillo japonés, hay que venir a esta tienda con más de 200 años de historia. Su cuchillería se caracteriza por sus aleaciones de titanio y acero, la elegancia en el diseño y el buen hacer. Cierra los domingos.

Kuroeya

1-2-6 Nihombashi, Chuo-ku. Mitsukoshi-mae Station.

Otro símbolo de la tradición japonesa que funciona desde el siglo XVII. Especializado en objetos lacados, ofrece unas 1.500 piezas entre las que se encuentran recipientes, platos, cajas o utensilios para la ceremonia del té.

Midori-ya

3-13-5 Nishi-Nippori, Arakawa-ku.

Nippori Station.

Junto a unp de los extremos de la calle peatonal Yanaka Ginza se encuentra esta afamada tienda de cestas de bambú, que cuenta entre su clientela con la familia imperial japonesa. Su dueño, Suigetsu Buseki, firma muchos de sus trabajos y utiliza, entre otros tipos, el bambú ahumado obtenido de los bajos de antiguas granjas tradicionales, caracterizado por la gradación del color y el brillo.

Kurofune

7-7-4 Roppongi, Minato-ku. Roppongi Station.

Sólo por ver las antigüedades que rescata su propietario merece la pena visitarla. Está regentada por un coleccionista estadounidense que muestra sus nuevas adquisiciones en su página web.

Muji Yurakucho

3-8-2 Marunouchi, Chiyoda-ku. Yurakucho Station.

No es difícil encontrarse con una tienda Muji mientras se pasea por la ciudad, aunque puestos a elegir lo mejor es acercarse al establecimiento insigne de la compañía, localizado en Marunouchi. Es el más grande de Tokio y en él se pueden hallar los minimalistas complementos para la casa y el ocio que han hecho famosa a la marca Muji.

Yamamotoyama

2-5-2 Nihombashi, Chuo-ku. Nihombashi Station.

El llamado "rocío de jade", el té verde gyokuro, es uno de los mejores tés japoneses. Refinado y caro, se puede encontrar en esta tienda especializada en dicha variedad. También es muy conocida por sus algas marinas.

Ninben

1F Coredo Muromachi, Nihombashi Muromachi. Mitsukoshi-mae Station.

Para comprar katsuobushi (bonito seco, fermentado y ahumado) o furikake (condimento deshidratado a base de algas, pescado o verduras) hay que ir a esta tienda que lleva más de trescientos años especializada en salazones y ahumados.

Okanoeisen

6-14-7 Ueno, Taito-ku. Ueno Station.

El daifuku es un pastel de arroz relleno habitualmente de anko, pasta dulce de judías adzuki. Para comprar esta especialidad japonesa hay que ir a este local situado en la calle comercial de Ameyoko. Con un récord de más de 3.000 pastelillos vendidos en un solo día, llevan más de 130 años elaborando este dulce, cuyo relleno varía según la estación del año.

Prada

5-2-6 Minami-Aoyama, Minato-ku. Omotesando Station.

La gente se para frente a su fachada no sólo para ver sus prendas de lujo sino también para admirar su contemporáneo diseño, firmado por Herzog De Meuron. Es uno de los varios edificios que convierten a Omotesando en un paseo que aúna lujo y arquitectura.

Issey Miyake

3-18-11 Minami-Aoyama, Minato-ku. Omotesando Station.

Imposible no citar al diseñador japonés más famoso del mundo. Conocido por su precisión y cierta extravagancia, sus creaciones libres crean pasión entre sus seguidores. Su tienda, al sur de Omotesando, bien merece una visita.

Shinjuku Marui One

3-1-20 Shinjuku, Shinjuku-ku. Shinjuku-sanchome Station.

Para hacerse con las prendas que visten las famosas lolitas góticas se puede ir a uno de los establecimientos que la compañía Marui tiene en Shinjuku. También tienen las últimas tendencias en moda joven femenina.

Sellenatela?

Seibu Ikebukurohonten 2nd Floor. 1-28-1 Minami Ikebukuro, Toshima-ku. Ikebukuro Station.

Probablemente sea en el calzado donde un japonés más refleje su adscripción a la moda y esta marca tendencia. En los grandes almacenes Seibu, junto a la estación de Ikebukuro, se pueden comprar los modelos de esta firma, cuyo sello distintivo es una tela de araña cosida en el par izquierdo.

Evisu the Tokyo

1-1-5 Kami- Meguro, Meguro-ku. Daikanyama Station.

La marca Evisu es el resultado del empeño de Hidehiko Yamane por crear los mejores pantalones vaqueros al modo tradicional. Dibujaba sobre ellos su marca y en los años 90 se hicieron muy populares. En su tienda de Meguro se puede escoger un modelo y que te pinten el logotipo.

Mikimoto Pearl

4-5-5 Ginza, Chuo-ku. Ginza Station.

Lleva más de un siglo cultivando perlas de gran calidad y su sello es un distintivo de lujo. Sus creaciones se distinguen por el diseño y la cuidadosa selección de las mejores piezas. La tienda de Ginza es una de las paradas obligatorias por el diseño de su fachada.

Acrylic

2-2-10 Motoazabu, Minato-ku. Hiro-o Station.

La utilización de materiales industriales como el acrílico, el aluminio o el caucho caracterizan la mayoría de los trabajos de Masako Ban, una arquitecta que ha volcado toda su creatividad en los accesorios y complementos expuestos en esta tienda.

Shibuya 109

2-29-1 Dogenzaka, Shibuya-ku. Shibuya Station.

Es uno de los lugares más fashion de Tokio, donde se prodigan las kodals, chicas jóvenes que muestran su nivel de renta a través de la moda y la vida social. Más de cien boutiques con las últimas tendencias para gente joven.

Pass the Baton Omotesando

Omotesando Hills West B2F 4-12-10 Jingumae, Shibuya-ku. Omotesando Station.

El universo de la moda vintage. Y es que todo lo que aquí cuelga de la percha o se exhibe en la estantería es de segunda mano. Arte, antigüedades y prendas de marca se exponen en esta tienda de diseño contemporáneo. Tienen otra tienda en la zona de Marunouchi.

A un paso de Shibuya y alejado por completo del ruido, los neones y las multitudes de las calles comerciales más transitadas de Tokio, se encuentra uno de los lugares más de moda de la ciudad. Cafés, galerías de arte y boutiques de moda se reparten por las calles y patios del barrio de Daikanyama, el lugar por excelencia al que ir si se quiere presumir de que se ha conocido lo último de la capital japonesa. Cientos de tiendas independientes atraen a treintañeros en busca de diseñadores en alza, algunos de los cuales se encuentran en los edificios que forman el complejo conocido como Hillside Terrace, un trabajo arquitectónico único levantado hace más de 40 años que se ha convertido en el centro y símbolo del barrio. La estación de Daikanyama, en la línea Tokyu Toyoko, se encuentra a pocos minutos del complejo y enseguida se comienzan a encontrar tiendas a las que asomarse. En él y en las calles adyacentes destacan, entre otras, el trabajo de los japoneses Tsumori Chisato y Sunao Kuwahara, los vaqueros de Okura, las divertidas propuestas de Hollywood Ranch, las sugerentes creaciones de la diseñadora china Vivienne Tam o la tienda outlet Unlimited by LIMI Feu, donde se exponen a buen precio los modelos de temporadas pasadas diseñados por Limi Yamamoto, hermana del afamado Yohji Yamamoto. Las calles Hachiman-dori y Kyu Yamate- dori Street son también perfectas para el paseo entre escaparates y cafés.

Marunouchi naka-dori

A pocos minutos de la estación JR de Tokio se encuentra esta agradable y lujosa calle peatonal, que nada tiene que envidiar a Omotesando y Ginza. Aparte de comercios de gran tradición artesanal, se encuentran firmas internacionales como Hermès, Brook Brothers, Prada o Tiffany Co.

Ameya Yokocho

Su nombre significa "el callejón de las tiendas de caramelos" porque antiguamente sus puestos vendían exclusivamente esta mercancía. Dedicado al mercado negro tras la Segunda Guerra Mundial, hoy Ameyoko, como también se conoce a esta calle peatonal, vende desde ropa hasta alimentación, con algunas tiendas especializadas en salazones o dulces tradicionales. Se encuentra entre las estaciones de Ueno y Okachimachi.

Nakamise-dori

Tras la puerta de Kaminarimon se encuentra el principio de esta calle peatonal, que conduce directamente al templo de Sensõ-ji. En tan sólo 250 metros se sitúan 89 tiendas que ofrecen en su mayoría souvenirs. Esta calle comercial es una de las más antiguas de Japón, ya que sus inicios se remontan al siglo XVII. Está muy cerca de la estación de Asakusa.

Takeshita-dori

La mayoría de sus tiendas son comercios independientes que ofrecen una gran variedad de oferta para la gente joven, sobre todo para las chicas pertenecientes a la tribu de las lolitas y los aficionados al cosplay. Puede resultar muy agobiante durante el fin de semana. Está junto a la estación Harajuku.

Kappabashi-dori

Aunque no es peatonal, merece la pena remarcar esta calle por estar especializada en su casi kilómetro de extensión en toda clase de productos para la cocina. Muchas de sus tiendas surten a los restaurantes de las famosas reproducciones en cera de los platos que lucen en sus escaparates. Palillos, cestas de bambú, cuencos, tazas... todo lo que se ve en la mesa en Japón se puede encontrar en esta zona. Cercana al templo de Sensõ-ji, se puede aprovechar el paseo por Asakusa para conocerla.

Yanaka Ginza

Esta calle peatonal, situada en el área de Yanaka, mantiene una atmósfera única que recuerda al antiguo Tokio. En ella se localizan cerca de 70 comercios que abarcan pescaderías, fruterías o tiendas que venden ropa, dulces, juguetes o té, como Kane Kichien.

MISC

Sus siglas significan Meguro Interior Shops Community, aunque realmente es un tramo de la calle Meguro dori. Esta zona peatonal cubierta comienza en la intersección con Yamate dori y acoge cerca de 60 tiendas que están especializadas en mobiliario y decoración: desde antigüedades hasta diseños italianos. Hay que salir de la estación de Toritsu Daigaku. Los miércoles suelen cerrar la mayoría de las tiendas.

Matsuya

3-6-1 Ginza, Chuo-ku. Ginza Station.

Si no se tiene tiempo para recorrer la principal avenida de Ginza, pero se quiere comprar moda o algún recuerdo, lo mejor es acercarse a un centro comercial donde conviven las tendencias y marcas exclusivas, como Louis Vuitton, Prada y Miu Miu, con la artesanía tradicional. Los productos se pueden adquirir con embalajes para envíos internacionales.

Mitsukoshi

4-6-16 Ginza, Chuo-ku. Ginza Station.

Es el más antiguo de los grandes almacenes de la ciudad y similar a los almacenes Harrods de Londres. Hoy en día es uno de los más exclusivos y tentadores de Tokio y el león situado en la entrada de la esquina se ha convertido en punto de encuentro. Su depachika es una de las mejores.

Matsuzakaya

6-10-1 Ginza, Chuo-ku. Ginza Station.

Es uno de los comercios más antiguos del país, ya que nació hace 400 años en la ciudad de Nagoya. Fue el primer centro comercial de Japón en no exigir a sus clientes que se quitaran los zapatos a la entrada. Los trabajos de Tiffany son algunos de los exclusivos productos que ofrece.

Takashimaya

2-4-1 Nihombashi, Chuo-ku. Nihombashi Station.

Que los ascensoristas vistan impolutos y lleven guantes blancos dice mucho del ambiente que se respira en este exclusivo centro, próximo a la estación de Nihombashi. Fundado en sus orígenes como tienda de kimonos, aún hoy siguen vendiendo ejemplares de segunda mano en eventos puntuales, que atraen multitudes. Conviene pasarse para ver si la visita coincide con esta oportunidad.

Isetan

3-14-1 Shinjuku, Shinjuku-ku. Shinjuku-sanchome Station.

En su interior se pueden encontrar diseños de Issey Miyake, Marc Jacobs, Salvatore Ferragamo, Yohji Yamamoto o Hanae Mori, entre otros. La tienda asigna personal de habla inglesa para los clientes extranjeros. Ya en el sótano de alimentación sugieren delicatessen para todos los paladares y presentan semanalmente especialidades.

Ibasen

4-1 Nihombashikobuna-cho.

Mitsukoshi-mae Station

Este negocio de exquisiteces artesanales hechas con papel y bambú data de 1590. Comenzó vendiendo washi y más tarde incorporó a su catálogo los abanicos (uchiwa) con motivos ukiyo-e. Sus piezas se pueden encontrar hoy en museos, además de en esta tienda.

Ozu Washi

3-6-2 Nihombashi Honcho, Chuo-ku. Mitsukoshi-mae Station.

Muy cerca de la estación de Mitsukoshi-mae, sus coloristas papeles hechos a mano son reconocidos desde hace más de 400 años. En su galería se expone una amplia variedad de washi, incluidas piezas antiguas. Es posible realizar tu propio washi. Cerrado los domingos.

Japan Traditional Craft Center

1-11-1, Nishi Ikebukuro, Toshima-ku. Ikebukuro Station.

Localizado en las dos primeras plantas del Metropolitan Plaza, merece la pena hacer una visita a este centro, aunque no se vaya a comprar nada, porque es ante todo un museo donde descubrir cómo es y cómo se realiza la artesanía japonesa. Este establecimiento pone a la venta, entre otras artesanías, cerámicas de alta calidad, lacados, abanicos, trabajos en madera y washi.

Bingoya

10-6 Wakamatsu-cho, Shinjuku-ku. Wakamatsu-Kawada Station.

Situada justo enfrente de la estación de Wakamatsu-Kawada, hay que moverse con cuidado entre la gran cantidad de piezas artesanales que invaden sus estanterías. Cinco plantas de muñecos artesanales, washi, cerámica, tejidos batik o cristalería hecha a mano. Cerrado los lunes.

Los grandes almacenes japoneses esconden en las plantas subterráneas lujosos departamentos de alimentación que reciben el nombre de depachika. Es toda una experiencia recorrerlos. En ellos se pueden encontrar desde secciones dedicadas al pescado o la fruta hasta productos gourmet provenientes de Europa, como bombones belgas o salchichas alemanas. También se puede comprar comida preparada (incluidas las cajas bento) y en los mejores depachika hay rincones que, llevados por famosos restaurantes, ofrecen delicatessen para tomar en la barra. Si apetece cenar en el hotel, lo mejor es ir a un depachika un poco antes de la hora de cierre, ya que muchos de sus platos preparados se ofrecen a precios más baratos.

48 horas

08.00 h.

Aunque conviene evitar el Metro a esta hora debido a que las estaciones están en su pleno apogeo, no queda más remedio que unirse a la marea humana para dirigirse a la estación de Tsukijishijo, en la línea Oedo. Todo por disfrutar del desayuno tradicional japonés más fresco y sabroso de la ciudad. Éste nada tiene que ver con el occidental, ya que el café y la tostada desaparecen para dar paso al té verde y a un conjunto de platillos que incluyen sopa de miso, arroz, un pequeño surtido de vegetales encurtidos y pescado, que suele tomarse cocido. Uno de los mejores lugares para probarlo es el pequeño local de Daiwa Sushi, situado en la zona de restaurantes que rodea al mercado de Tsukiji. Es posible que haya que esperar cola y el desayuno costará unos 3.000 yenes, pero a cambio se podrá empezar el día saboreando un excelente sushi. Al terminar, se puede curiosear entre las tiendas especializadas en la venta de cuchillos y otros productos para la cocina.

09.30 h.

El templo budista de Sensõ-ji, el más visitado de la capital japonesa, marca el aire de comunidad que caracteriza al barrio de Asakusa. La calle peatonal que conduce a él, Nakamise-dori, está repleta de tiendas de recuerdos. Si se busca un recuerdo o un regalo, hay que girar a la derecha en el cruce con Denbo-in dori, una calle que recuerda al antiguo Tokio, con sus cortinillas noreny sus letreros de madera decorando las entradas de los comercios. Se toma la segunda a la izquierda, llegando a Kannon-dori. En este callejón se encuentra Fujiya, una tienda famosa por su variada oferta de tenugui, tradicionales toallas de mano elaboradas con algodón y que también se usan como pañuelos para la cabeza. Rehaciendo el camino, se vuelve a Nakamise-dori, en cuyo extremo se encuentra el templo dedicado a la deidad budista de la compasión, el Kannon Bodhisattva.

10.30 h.

El tramo del río Sumida a su paso por Asakusa es uno de los puntos más famosos de la ciudad para admirar la belleza de los cerezos en flor. Aunque la visita no coincida con la floración, es interesante llegar a la orilla para ver desde ella el Tokyo Sky Tree, la construcción que se convertirá en el año 2012 en la torre más alta del país.

11.30 h.

El Palacio Imperial se encuentra a un corto paseo de diez minutos desde la estación de Tokio. Tras cruzar el foso Babasaki, se llega a la inmensa plaza que se abre ante los terrenos privados del emperador. Desde ella se obtiene una de las imágenes más populares de la ciudad: el puente Nijubashi, con la residencia imperial de fondo asomando entre los árboles. Kokyo Higashi Gyoen, el Jardín Imperial del Este, está abierto al público y se muestra especialmente bonito durante la floración de los cerezos. Además, es un excelente lugar para dar un paseo, relajarse y admirar la delicadeza de su jardín japonés. La entrada principal es la puerta Õtemon, a menos de diez minutos de la plaza.

12.30 h.

Volviendo sobre nuestros pasos, llegamos de nuevo a la plaza del Palacio Imperial. Con el puente Nijubashi justo a la espalda, se cruza la avenida y se continúa recto hasta girar en la segunda a la derecha. El interior del Foro Internacional de Tokio merece una visita por su impresionante vestíbulo ojival de vidrio. Diseñado por Rafael Viñoly y levantado en la década de los 90, es una de las construcciones contemporáneas más llamativas de la ciudad.

13.00 h.

Un corto paseo de diez minutos lleva hasta la intersección de las avenidas Chuo-dori y Harumi-dori, el punto más famoso de Ginza, con el característico reloj de los grandes almacenes Wako, símbolo de la zona. Para conocer una de las mejores tiendas de alimentación (depachika) de la ciudad, hay que cruzar justo enfrente, a Mitsukoshi, el Harrods tokiota, en cuya planta sótano se pueden encontrar toda suerte de delicatessen. El lujo continúa a lo largo de toda Chuo-dori, donde la arquitectura cobra el mismo protagonismo que la exclusividad de las propuestas de moda de los escaparates.

14.00 h.

En Ginza hay mucho donde elegir a la hora del almuerzo. Para una apuesta refinada, en el mismo edificio de Chanel está Beige Tokyo, el local de Alain Ducasse. Si se prefiere algo más rápido y económico, muy próximo a este edificio y al de Maison Hermés, en Namiki-dori se encuentra Ten-ichi, el mejor lugar donde disfrutar de una tempura perfecta. Con varios establecimientos, ésta es la localización original de la cadena.

15.00 h.

El momento del café ya es un objetivo fácil de conseguir en un país donde desde siempre la bebida nacional fue el té. Aunque aumentan las cadenas internacionales, los locales con encanto aún están limitados. En Ginza hay un pequeño establecimiento, el Café de l''Ambre, con una amplia carta donde elegir el grano preferido. Para llegar hay que volver al cruce de Chuo-dori y Harumi-dori y girar a la izquierda, en dirección a los grandes almacenes Matsuzayaka. En la tercera intersección, se cruza a la otra acera, se continúa por esa calle y se gira en la primera a la derecha, justo antes del Hotel Gracery Ginza.

16.30 h.

La salida número A4 de la estación de Tochomae conduce directamente al Tochõ, el edificio donde se alojan las oficinas del Gobierno Metropolitano de Tokio, uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Para tener una increíble vista sobre los rascacielos de Shinjuku -y gran parte de la ciudad- hay que subir a lo alto de sus torres, con dos observatorios gratuitos. Después se pueden observar en un corto paseo algunas de las construcciones más emblemáticas, como la novísima Mode Gakuen Cocoon Tower.

18.00 h.

A estas horas, Shinjuku comienza a animarse. Si se viaja en invierno, ya habrá anochecido y la avenida de Shinjuku-dori, al este de la estación, lucirá repleta de neones. Es uno de los rincones más fotografiados de la ciudad y una de sus principales arterias comerciales. Se puede comprar electrónica en Bic Cámera o en Yodobashi, moda joven en Studio Alta o Marui One y entrar en los grandes almacenes de Mitsukoshi o Isetan. Si aún hay tiempo y fuerzas, el santuario de Hanazono está muy cerca. Iluminado por la noche, es un curioso remanso de paz a espaldas del Golden Gai, un conjunto de callejones con algunos pequeños bares.

20.30 h.

Subir a la Torre de Tokio proporciona una de las imágenes más impactantes del viaje. Pasará el tiempo, pero las luces rojas de los rascacielos, parpadeando sobre un inmenso escenario que nunca acaba, permanecerán en la memoria del viajero. Con dos plataformas, tanto desde la más alta como desde el primer observatorio es impresionante la panorámica que se observa.

21.30 h.

A pocos minutos de la estación de Roppongi y Roppongi Hills se encuentra Kanda, uno de los mejores restaurantes de Tokio para descubrir el arte que se esconde tras la cocina kaiseki. Reconocido con tres estrellas Michelin, el interior de este magnífico templo culinario es igual de sencillo que su entrada. Mínima decoración para que nada distraiga de la experiencia culinaria creada por su chef Hiroyuki Kanda. Resulta imprescindible reservar con una cierta antelación.

23.00 h.

Si aún quedan energías, la animada noche de Roppongi está a la vuelta de la esquina. Si apetece escuchar jazz en directo, hay que ir a All of me club, punto de encuentro habitual de los mejores artistas locales. Para una copa de champán en un ambiente tranquilo, en Zero Bar tienen una amplia carta donde elegir y, además, abren hasta muy tarde. Si se busca un cóctel con estilo, nada mejor que el elegante bar del Hotel Grand Hyatt Tokyo, en Roppongi. Y si la noche promete, se puede ir a bailar a Ultra Lounge, cuya programación incluye dj''s residentes.

La celebración del "Hanami"

Sakura. Este es el nombre que recibe en japonés la flor del cerezo. Cuando llega la primavera, comienza la celebración del hanami, que no es otra cosa que ir a pasear bajo los cerezos con los amigos o familiares. Es una suerte que la visita coincida con el hanami, no sólo por ver este maravilloso espectáculo natural sino también para conocer la pasión de los japoneses por este momento. Al pasear por un parque se les puede ver sentados a los pies de un cerezo disfrutando de un picnic o incluso guardando el sitio con anticipación. Sobre todo en los lugares más populares, como, por ejemplo, el parque Shinjuku Gyoen, con más de cien cerezos de doce variedades, lo que garantiza florecimientos diferentes y, por lo tanto, más días de hanami. El parque Ueno es el punto más popular, ya que cuenta con más de un millar de árboles a lo largo de la calle que une el estanque de Shinobazu y el Museo Nacional de Tokio. Otro de los típicos rincones donde ir a ver los cerezos en flor es Chidorigafuchi, junto al foso noreste del Palacio Imperial. Cuando llega el momento, multitudes salen de las estaciones de Kudanshita y Hanzomon para contemplar la estampa blanquecina, muchos de ellos desde los botes de alquiler que recorren el foso. El parque de Sumida, cerca de la estación de Asakusa, también es otro de los lugares preferidos por los tokiotas.

09.30 h.

El tiempo vuela mientras se visita el Museo Nacional de Tokio. En el complejo destacan las soberbias colecciones de arqueología japonesa, arte asiático y arte nacional que se encuentran expuestas en las galerías Heiseikan, Hyokeikan y Honkan, respectivamente. Resulta imposible abarcarlo todo, así que lo mejor es decantarse por la exquisita muestra ofrecida en el edificio Honkan, que bajo el nombre de Las obras maestras del arte japonésmuestra las obras más sobresalientes de sus fondos. Una selección que va rotando periódicamente y cuya dimensión es perfecta para conocer la historia artística del país sin que la mente quede abotargada. Si no se acumula demasiado cansancio, merece la pena ver los Tesoros de Horyuji, una colección de 300 objetos procedentes del templo budista homónimo. Para los amantes del arte japonés es imprescindible pasarse por la tienda del museo, con una amplia oferta de libros de arte en inglés, además de una excelente selección de recuerdos y regalos.

12.30 h.

Atravesando el parque Ueno en dirección al estanque se llega al templo de Kiyomizu Kannon. A él acuden a orar las mujeres con problemas de fertilidad. Si su problema se soluciona, vuelven a dejar una muñeca como señal de agradecimiento. Cada 25 de septiembre se celebra una ceremonia donde se incineran todas aquellas donadas durante el año.

13.00 h.

Abierto desde el año 1892, Ueno yabu soba es famoso por su amplia selección de fideos, desde los que se sirven fríos para mojar en caldo hasta los calientes acompañados de verduras y otros ingredientes. También en su carta pueden degustarse otras especialidades japonesas como el tamagoyaki, una tortilla enrollada. Para llegar a este restaurante especializado en fideos soba, hay que cruzar la estación JR de Ueno y tomar la salida Hirokõji. Para localizarlo sin problemas basta con reconocer un farol de madera que cuelga de la fachada de ladrillos del local, que hace esquina.

15.00 h.

El @home Café es tan popular que los fines de semana suele tener a su puerta largas colas de espera. Es uno de los clásicos meido kissade Akihabara, locales divertidos que literalmente significan "cafés de sirvientas" y que nacieron hace una década inspirados en el vestuario utilizado por el servicio de la época victoriana. Situado en la calle Kanda Myojin, tiene cuatro plantas donde tomarse un café acompañado de un dulce. Por 500 yenes, el cliente se puede hacer una fotografía con la camarera para llevársela de recuerdo. Si no se tiene ánimo de buscar un local concreto entre la maraña frenética de Akihabara, a la salida de la estación denominada Electric Town se pueden ver chicas que anuncian con carteles su meido kissay elegir el establecimiento en cuestión siguiendo su propio impulso. En algunos hay que pagar entrada.

16.00 h.

Después del café, hay que tomar Chuo-dori, la avenida principal de Akihabara, repleta de tiendas especializadas donde encontrar cámaras, vídeos, teléfonos y otros productos electrónicos. Sofmap y Yodobashi Akiba, situadas al este de la estación, son dos de las apuestas seguras donde encontrar personal que atienda en inglés. También hay decenas de tiendas de mangay anime, un paraíso para los aficionados al cómic y a la animación japonesa.

17.30 h.

El santuario de Meiji-Jingu, situado junto al parque de Yoyogi, da inicio al recorrido por la zona de Harajuku. Abierto hasta el anochecer, si se quiere ver su Museo del Tesoro, que exhibe, entre otros objetos, los trajes ceremoniales del emperador, habrá entonces que llegar antes de las cuatro de la tarde.

18.00 h.

El mejor escaparate para ver las prendas propias de las lolitas góticasse puede descubrir en los 400 metros que tiene la estrecha calle de Takeshita dori. Aquí lo mejor es ir paseando con tranquilidad e ir entrando en el interior de aquellas tiendas que resulten más atractivas. Si el paseo ha sabido a poco, se puede seguir callejeando por Meiji-dori y el principio de la avenida de Omotesando, que más adelante se convierte en una zona glamourosa con escaparates de lujo.

19.00 h.

A un corto paseo de Harajuku se encuentra la siguiente parada. Aunque sea descafeinado, es obligado tomarse un café en el Starbucks de Shibuya. Muy concurrido, a veces hay que esperar un rato hasta que se consigue un sitio junto a los ventanales, ya que las vistas sobre el cruce de peatones más famoso de la ciudad son fantásticas. Pero

la espera, si la hay, sin duda

merece la pena.

20.00 h.

Si el hotel no queda lejos de Shibuya, quizás sea el momento de ir a descansar un rato. Si no es así, lo mejor es dar un paseo por el barrio antes de ir a cenar. Se puede entrar en el centro comercial Shibuya 109, dedicado a las últimas tendencias de la moda juvenil, o recorrer un tramo de la calle Koen-dori, repleta de curiosas tiendas y buenos restaurantes.

21.00 h.

A un corto paseo de la estación de Shibuya se encuentra el izakayaKina (2-2-17 Shibuya, Shibuya-ku), un local famoso en la zona por estar abierto hasta altas horas de la madrugada. Superficies de piedra y madera oscura decoran el interior de sus tres plantas. En la inferior se encuentra la gran cocina abierta, una larga barra y unas pocas mesas, mientras que en la superior el ambiente es más íntimo, ofreciendo incluso salas privadas para pequeños grupos. En la carta el protagonismo lo tienen los platos a la brasa, con especial protagonismo para las carnes de cerdo y de ternera.

22.30 h.

¿Una copa con vistas? A un minuto de la estación de Omotesando, en el quinto piso del edificio AO se encuentra el Two Rooms Grill Bar, un lugar perfecto para tomarse un cóctel o una copa de vino al aire libre, ya que el local cuenta con una fantástica terraza con vistas. Si el tiempo no acompaña, el loungeinterior es igual de agradable y también se puede ver el escenario nocturno de la ciudad.

24.30 h.

La noche tokiota sigue abierta para quienes tengan energía y ganas de gastarla. Y justo en Omotesando, unos minutos más allá de la estación, en el edificio Aoyama Center se encuentra Le Baron de París, uno de los locales más de moda de toda la ciudad y sucursal del célebre club parisino. Luces rojas, asientos de cuero y mucho ambiente a la última. Perfecto para tomarse una copa y bailar hasta que el cuerpo aguante.

La torre que dominará Tokio

Aún no ha sido terminada, pero ya empieza a aparecer entre las imágenes que se traen los viajeros de vuelta a casa. Dominando sobre el barrio de Sumida, la torre de comunicaciones Tokyo Sky Tree está predestinada a convertirse en uno de los iconos de la ciudad. Con 634 metros de altura, será la estructura más elevada del país y la mayor del mundo en su categoría. Semejante mirador no pasará desapercibido para los turistas. Cuando abra sus puertas en la primavera del año 2012, los visitantes podrán subir a sus dos observatorios, situados a 350 y 450 metros respectivamente. En el primer nivel habrá restaurantes y se tiene proyectado construir una pasarela de cristal en el segundo, que se convertiría en la más alta de su tipo. La construcción de la torre de comunicaciones es parte de un proyecto urbanístico que incluirá centros comerciales y de ocio a lo largo del río Kitajukken.

Alrededores de Tokio

Tan sólo 20 minutos la separan de la capital japonesa, y aunque parezca más de lo mismo ir desde una ciudad como Tokio a otra como Yokohama, que la iguala en ajetreo y modernidad, la segunda urbe más poblada del país acoge varios atractivos para disfrutar de una agradable jornada. Uno de los ejemplos más claros es el conjunto de islas artificiales que conforman el barrio portuario de Minato Mirai 21, muy interesante por los edificios vanguardistas y rascacielos que en él se levantan. Entre ellos destaca sobremanera la Landmark Tower. Con sus 296 metros de altura, es la torre más alta de Japón y cuenta con uno de los ascensores más rápidos del mundo, que realiza su recorrido a 45 kilómetros por hora. Es toda una experiencia subir en él a la planta 69, el penúltimo piso, donde se encuentra el mirador Sky Garden, que en los días claros ofrece unas fantásticas vistas de Tokio, el Monte Fuji y la península de Izu-hanto. Otro de los puntos de interés de la ciudad es su popular Barrio Chino, el mayor del país y un excelente lugar donde hacer una parada para comer en alguno de sus más de doscientos restaurantes.

Los amantes del deporte blanco pueden saciar su ansia de nieve con esta excursión de un día, que permite en poco más de una hora descender ladera abajo por una de las áreas de esquí más populares entre los tokiotas. Conocida por su nieve tipo deep powdery su larga temporada, Yuzawa cuenta con 16 resorts, entre los que destaca Gala Yuzawa, que tiene hasta su propia estación de tren. Se puede por lo tanto tomar el tren-bala Joetsu Shinkansen en la estación de Tokio y estar en la pista 80 minutos después. La tradicional estampa alpina aquí desaparece para asomar la de un resort moderno, con centro comercial, spa, boutiques y numerosos restaurantes. Muy popular, cuenta con pistas para todos los niveles, incluyendo descensos para quienes practican snowboard. Otra opción muy interesante es el resortJoetsu Kokusai, a unos 20 minutos en autobús desde la estación y con una amplia variedad de pistas localizadas en una zona de mil hectáreas de superficie, incluyendo un par de trayectos que sólo admiten dos esquiadores por descenso.

Muy popular entre los japoneses, aún sigue siendo un tesoro oculto para los extranjeros. Localizado a tan sólo media hora de la estación de Ikebukuro, Kawagoe permite sumergirse en la atmósfera del antiguo Japón gracias a sus tradicionales kurazukuri, viviendas similares a almacenes cuyo diseño estaba destinado a proteger las mercancías de los incendios. Gracias a su color negro, sobrevivieron a los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial y hoy quedan en Kawagoe unas pocas docenas de estas casas que, reconvertidas en comercios y restaurantes, mantienen en el pasado a la ciudad, conocida como Koedo, la pequeña Edo. Su principal símbolo es Toki no Kane, la torre de la campana, que se puede escuchar cuatro veces al día. La calle Kashiya-yokocho, un antiguo centro de producción de dulces y golosinas que aún hoy conserva una veintena de tiendas, y el templo Kita-In, con más de 500 budas de piedra, son otros de sus atractivos. En el mes de octubre se celebra el Festival de Kawagoe o Hikawamatsuri, cuyo evento más importante es el Hikawamatsuri, un desfile de carrozas donde los participantes compiten enérgicamente entre ellos tocando música tradicional.

Su nombre es uno de los primeros que se aprende el viajero antes de pisar el país, ya que en ella se encuentra el que hasta hace poco era el único aeropuerto de Tokio, que acogía rutas internacionales. Situada a 60 kilómetros de la capital, puede ser interesante dedicarle el último día del viaje si se va a volver a España desde su aeropuerto y así aprovechar para visitar el destacado complejo budista de Naritasan Shinsyoji. Con más de mil años de historia, fue construido en torno a la deidad budista Fudo Myo-o, llevada hasta allí para reprimir una revuelta samurái contra el emperador. Consiguieron la victoria, pero cuando quisieron devolverla a su lugar de origen no podían moverla porque había crecido milagrosamente. Se llega al complejo desde la estación de tren recorriendo la animada calle de Omotesando, repleta de tiendas con productos tradicionales y recuerdos para los peregrinos. De entre los varios edificios que lo componen, destaca como curiosidad la Gran Pagoda de la Paz, construida a finales del siglo pasado como símbolo para conseguir la paz mundial. Bajo su suelo contiene una cápsula del tiempo donde tanto líderes internacionales como fieles dejaron sus mensajes y oraciones dedicadas a este eterno sueño. El parque del recinto es perfecto para dar un paseo sosegado entre agua y árboles.

La ciudad de Kamakura, emblema de la cultura samurái, es un encantador destino costero que aparece ante el viajero rodeado de montañas y salpicado de cerezos. A sólo una hora de Tokio si se viaja en la línea de tren JR Yokosuka, en ella se encuentran decenas de templos y santuarios, entre los que destaca el de Engaku-ji, junto a la estación Kita Kamakura, desde donde se puede empezar el recorrido. Otro de los cinco grandes templos zen de la ciudad es el de Kenchoji. Es el más antiguo y en los jardines que lo rodean hay dos miradores que ofrecen vistas excepcionales tanto del conjunto religioso como de la ciudad. En el centro de Kamakura se encuentra Tsurugaoka Hachimangu, el monumento sintoísta más importante de la urbe y uno de los más célebres del país para celebrar el Hatsumode, la tradicional visita a un santuario durante los primeros días del año. Lo apropiado es llegar a él desde la playa, para así atravesar la avenida que cruza la ciudad hasta la entrada, con numerosas puertas tori levantadas en el camino. Sin embargo, el verdadero orgullo de Kamakura es el Daibutsuo Gran Buda, una impresionante estatua de bronce de más de 13 metros de altura, la segunda más alta del país después de la localizada en el templo de Todaiji, en Nara.

Algunas de las imágenes más famosas del arte tradicional japonés contienen el singular perfil del Monte Fuji. En más de una treintena de ocasiones lo pintó el maestro del ukiyo-eHokusai, siendo La gran ola de Kanagawauno de sus trabajos más populares fuera del país. Y no era una obsesión particular. Este volcán, que aún continúa activo, es considerado sagrado desde tiempos inmemoriales y, por eso, ascenderlo es una hazaña para los japoneses, que durante la Semana de Obon, en el mes de agosto, suben por millares para honrar a sus antepasados. Cada año unas 200.000 personas coronan la cima, situada a 3.776 metros. Lo más recomendable para quienes desean hacer esta excursión es elegir la temporada de verano y llevar agua, una linterna y ropa de abrigo, porque la climatología en las cotas más altas resulta bastante inestable. Aunque la ruta está dividida en diez estaciones, lo más habitual es llegar por carretera hasta una de sus cuatro estaciones y andar desde ese punto unas cuatro horas y media hasta conquistar la cumbre. El mejor momento sin duda es el amanecer, por lo que conviene hacer noche en uno de los refugios de montaña que hay repartidos a lo largo del ascenso. También es recomendable reservar plaza para no llevarse una sorpresa.

Situado en el Parque Nacional Fuji-Hakone-Izu, a menos de cien kilómetros de Tokio, Hakone es famoso por sus fuentes termales, la belleza de sus paisajes y las vistas que se contemplan del Monte Fuji. El otoño llena de color toda la zona y marca el comienzo de la mejor temporada para ver el famoso cono volcánico, ya que desde noviembre hasta febrero los días suelen ser limpios y claros. Aunque puede ser perfectamente una excursión de un día, lo mejor es pernoctar en la zona para así disfrutar de la experiencia de un onsen. Se puede ir a alguno de los centros termales que hay en Yumoto o relajarse en los baños que ofrecen los encantadores ryokanesexistentes, por ejemplo, en Miyanoshita. Independientemente del tiempo que se vaya a estar, parte del encanto de esta excursión radica en la llegada, ya que una vez se alcance la estación de Odawara, el trayecto continuará utilizando varios medios de transporte: un tren de vía estrecha que recorre en 55 minutos la ruta boscosa de Hakone-Tozan hasta Gora, un funicular que sube desde allí hasta Sounzan -al pie del lago Ashi- y un barco algo kitschestilo galeón que cruza hasta la otra orilla, donde se disfruta de una de las imágenes más conocidas del país, con el Monte Fuji de fondo. Si se van a pasar dos días, se puede aprovechar también para visitar el Museo al Aire Libre de Hakone, en Chõkoku-no-Mori, que posee una impresionante colección de esculturas de artistas japoneses y occidentales, entre los que destacan Henry Moore, Miró o Pablo Picasso.

A menos de una hora en tren de la estación de Shinjuku se encuentra el monte sagrado de Takao, un refugio natural perfecto para desconectar en el mismo Tokio. Con una altura que roza los 600 metros, por sus laderas discurren seis rutas de senderismo, siendo la número uno la más popular. Se tarda dos horas en llegar a la cima, desde donde se ve el Monte Fuji, pero si no se desea hacer todo el recorrido, siempre se puede efectuar la primera mitad del camino en teleférico o funicular. Junto a la estación y en la misma ruta número uno se encuentran Saru-en, un parque habitado por cuarenta macacos japoneses, y un jardín botánico muy agradable con más de 300 especies de plantas. Todas las rutas convergen en la cima, donde se asienta el templo budista Takaosan Yakuo-in, creado por el emperador Shomu en el siglo VIII. Cada segundo domingo del mes de marzo se celebra aquí el festival de Hiwatari Matsuri, un ritual del budismo Shingon, conocido como goma, donde los monjes caminan descalzos sobre las brasas para alejar la mala suerte y purificarse. El Monte Takao es muy frecuentado durante el mes de noviembre, cuando el otoño embellece sus bosques, y en febrero, coincidiendo con la floración del ciruelo.

Si hubiera que elegir una sola excursión por los alrededores de Tokio, ésta sin duda debería ser Nikkõ. Sobre todo si se llega a ella a principios del mes de noviembre, cuando los arces embellecen toda la zona con sus hojas rojas. Situada al norte de la capital japonesa, a unas dos horas en tren, alberga entre sus bosques un valioso centro religioso declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad por ilustrar perfectamente el estilo arquitectónico del periodo Edo. A sus templos budistas y santuarios sintoístas se llega en pocos minutos si se coge el autobús que parte desde la estación de Tobu Nikko y atraviesa la calle principal de la ciudad, aunque también se puede ir caminando en un agradable paseo de una media hora. El conjunto monumental más emblemático es el mausoleo de Toshogu, un complejo de más de una docena de templos y santuarios dedicado a Tokugawa Ieyasu, fundador del sogunato de Tokugawa. Existe una entrada combinada que por mil yenes incluye también la entrada al templo Rinnoji y al santuario Futarasan. Si hay tiempo, merece la pena acercarse a Tamozawa Goyotei, que sirvió como residencia veraniega para la familia imperial durante la primera mitad del siglo XX. Si aún no ha anochecido, lo más recomendable es volver al pueblo dando un paseo.

Cómo llegar

En avión

Tokio cuenta con dos aeropuertos internacionales: Narita y Haneda. El primero, situado a unos 60 kilómetros de la ciudad, es al que llegan la mayoría de las líneas extranjeras como British Airways, Air France-KLM, Lufthansa y Finnair. Al aeropuerto de Haneda, abierto para vuelos internacionales y situado a 10 kilómetros del centro, llega la compañía japonesa Japan Airlinesy British Airways. No existen vuelos directos desde España, aunque las compañías antes mencionadas vuelan diariamente desde Londres, Ámsterdam, París, Frankfurt o Helsinki.

Además Turkish Airlines (www.turkishairlines.com) ofrece vuelos a Osaka y Tokio con una breve parada en Estambul. La compañía turca ofrece desde España 70 vuelos semanales a Estambul desde seis aeropuertos nacionales: Madrid, Barcelona, Málaga, Valencia, Bilbao y Santiago de Compostela, todo vuelos directos.

Para llegar a la ciudad hay variadas opciones, según en qué aeropuerto se aterrice. Desde el de Narita la más interesante es la nueva línea Narita Sky Access, que en tan sólo 41 minutos conecta el aeropuerto con la estación de Ueno (www.keisei.co.jp). Por su parte, el tren JR Narita Express(www.jreast.co.jp) parte cada media hora, para en las estaciones JR de la ciudad y llega a la de Tokio en casi una hora.

También se puede elegir el Autobús Limusina(www.limousinebus.co.jp), que parte cada 15 minutos y para en las estaciones de Tokio y Shinjuku, además de en los principales hoteles.

En barco

Aquellos que se encuentren en Corea del Sur, la Federación Rusa o China, quizás prefieran llegar a Japón por mar, ya que las tarifas pueden llegar a ser más económicas. Desde el puerto de Busan, en Corea del Sur, parten los barcos y ferries de varias compañías. La mejor opción la ofrece JR Kyushu(www.jrbeetle.co.jp), que en tres horas y por unos 13.000 yenes llega a Fukuoka. Llegar desde China es una opción más romántica que práctica, ya que se tarda entre 38 y 50 horas, dependiendo del punto de salida. Desde Shanghái, la compañía Shanghai Ferry(www.shanghai-ferry.co.jp) parte hacia Osaka tres veces por semana en un viaje de 46 horas, cuyo precio es de 120 €.

En tren

Si ya se está en el país, la mejor forma de llegar a Tokio, además de en vuelo doméstico, es en tren. Las principales urbes están conectadas con líneas de alta velocidad. Si se va a hacer uso de ellas, lo mejor es adquirir desde España -en Japón ya no será posible- el Japan Rail Pass(www.japanrailpass.net), que da acceso dependiendo de la tarifa elegida a un número de días en los cuales se puede utilizar cualquier medio de transporte de la compañía JR, trenes bala (shinkansen) incluidos. Los precios van desde 28.300 yenes (250 €) por una semana hasta 57.700 yenes (520 €) por 21 días. La primera opción es rentable si se cogen dos trayectos en tren bala. En el portal en español de la Oficina Nacional de Turismo Japonés(www.turismo-japon.es) facilitan un listado con las agencias donde se puede comprar el pase.

Dada la distancia con la ciudad, el taxi no es recomendable. Si se aterriza en Haneda, la opción más interesante es el monorraíl (www.tokyo-monorail.co.jp. 470 yenes), que llega en 13 minutos a la estación JR Hamamatsucho, desde donde se puede hacer transbordo a las líneas JR Yamanote y Keihin Tohoku. Hay salidas cada diez minutos. La línea de trenKeikyu(www.haneda-tokyo-access.com, 400 yenes) conecta en 15 minutos el aeropuerto con la estación de Shinagawa y la línea de metro Asakusa. También existe un servicio de autobús limusina (www.limousinebus.co.jp) y el taxi es una buena opción si se va a las áreas de la estación de Tokio, Ginza, Shibuya o Shinjuku.

Cómo moverse

Metro

Es la mejor manera de moverse por Tokio gracias a su cobertura, ya que siempre hay una estación cercana allá donde el viajero se encuentre. El sentimiento de pérdida que se tiene la primera vez que se entra en una estación desaparece pronto, ya que el sistema no es tan complicado como parece al principio. Al estar sus 13 líneas divididas entre las compañías Toeiy Tokio Metro, la tarifa dependerá de cuál se usa y de la distancia recorrida. En todas las estaciones hay máquinas expendedoras con información en inglés y mapas donde se indica el precio que cuesta llegar a ella desde el destino elegido. También cruzan la ciudad líneas de cercanías que llevan a las afueras de la capital japonesa. Siempre hay que guardar el billete, ya que se ha de pasar por el torno a la salida. Una línea muy práctica para llegar a los principales puntos turísticos es la Yamanote, perteneciente a la empresa ferroviaria JRy cuyo uso está incluido en el JR Rail Pass. Otra opción es adquirir un billete combinado de las líneas de metro Toeiy Tokio Metro, que por 1.000 yenes ofrece número ilimitado de viajes durante un día. Para estancias de varias jornadas, puede ser interesante hacerse con las tarjetas de prepago Suicay Pasmo, que simplemente hay que pasar por el escáner del torno tanto a la entrada como a la salida; así el viajero se olvida de tener que buscar la tarifa para su recorrido. La cantidad se descuenta directamente de estas tarjetas, que se pueden recargar en cualquier estación. Sirven tanto para el metro como para algunas líneas de cercanías y el autobús. Al adquirirla, se pagan 500 yenes de depósito, que posteriormente se devuelven con la entrega de la tarjeta en el último día de utilización. Más información: www.tourism.metro.tokyo.jp

Autobús

Teniendo una red subterránea tan completa, el autobús pierde protagonismo como medio de transporte, entre otras cosas porque la mayoría lleva el destino escrito sólo en japonés. Si pese a todo no se quiere prescindir de este servicio, lo primero que hay que hacer es conseguir un mapa de las líneas en los Centros de Información Turística de Tokio. El billete cuesta 200 yenes. Sin embargo, si no se quiere renunciar a conocer las calles de Tokio desde el autobús, existe una interesante y reciente opción: el Tokyo Shitamachi Bus(www.kotsu.metro.tokyo.jp/bus/shitamachi). Cada media hora de la cabecera situada frente a la salida Marunouchi North Exit de la estación de Tokio, sale este autobús que realiza paradas en los principales puntos turísticos de la capital japonesa: Nihombashi, Akihabara, Ueno, Kappabashi, Asakusa y Ryogoku. Cada trayecto vale 200 yenes. También se puede comprar un pase de un día de duración por 500 yenes, que permite acceso a viajes ilimitados.

Taxi

Para trayectos cortos son una opción interesante. La bajada de bandera gira en torno a los 710 yenes, ya que cada compañía fija sus precios. Cubre dos kilómetros y a partir de ahí cada 300 metros subirá unos 90 yenes. La tarifa nocturna tiene un recargo adicional del 20 por ciento. Es recomendable llevar las direcciones escritas en japonés (algunos taxis tienen hojas de ayuda en inglés) y no olvidar que las puertas traseras las abre el taxista de forma automática.

Barco

La compañía Tokyo Cruise Ship ofrece varias rutas que conectan principalmente Asakusa con Odaiba, realizando paradas en varios muelles durante el recorrido. No es la opción más rápida para moverse por la zona, aunque sí se puede convertir en una curiosa experiencia. Consultar www.suijobus.co.jpo www.tokyo-park.or.jp/english

Cuánto cuesta

Leche(1 l.): ¥210

Sashimi de atún(100 gr): ¥440

Chocolatina: ¥100

Agua mineral(2 l.): ¥200

Bentõ: ¥545

Bol de ramen: ¥585

Taxi: ¥710 (bajada de bandera)

Capuccino: ¥580

Aspirina: ¥680

Manzana(unidad): ¥125

Calendario

Enero

En la medianoche del nuevo año comienza en todo el país la celebración del Hatsumode, cuando la gente sale a la calle en dirección a los santuarios para comenzar el nuevo calendario con buen pie. Para ello compran o-mamori, amuletos, y devuelven al templo o santuario los antiguos para que sean incinerados. Esta celebración se prolonga durante los primeros días del año y, en el caso de Tokio, el santuario que más visitas recibe es el de Meiji Jingu. Es una de las ocasiones donde los japoneses lucen kimono.

Febrero

El templo de Sensoji, en Asakusa, acoge a principios del mes de febrero la celebración del Setsubun, un rito que da la bienvenida a la primavera. La multitud arroja semillas de soja mientras repiten frases donde llaman a la buena fortuna e increpan a los diablos para que se alejen.

Marzo

El tercer día del mes se celebra el Hina Matsuri(Día de las Niñas). Numerosas muñecas se pueden ver por toda la ciudad. A finales de mes, el llamado Festival de la Floración del Cerezoadorna el parque Ueno con más de 1.500 linternas, que iluminan durante la noche los cerezos en flor. Suele congregar a mucha gente.

Mayo

Durante los primeros días del mes se celebra el Gran Festival del santuario de Meiji Jingu, situado junto a la estación de Harajuku. En honor de los dioses y frente al edificio principal se representan artes escénicas tradicionales, que abarcan desde la música hasta el teatro. También a principios de mes tiene lugar el Festival Kanda Matsuri, uno de los más importantes del país, donde 100 mikoshi(santuarios portátiles) procesionan hasta el santuario de Kanda Myojin. El Sanja Matsuri es otro festival importante que se celebra durante tres días, a mediados de mayo, en el santuario de Asakusa Jinja y que atrae a un millón y medio de espectadores.

Junio

El Sanno Matsuri, que se celebra la segunda semana del mes de junio, es una procesión por el centro de la ciudad, incluyendo la estación de Tokio y Ginza, donde 300 personas vestidas con ropajes antiguos acompañan a los mikoshi camino del santuario de Hie Jinja.

También en Junio, durante el Sennichi Mairi, todo aquel fiel que acude al santuario de Atago Jinja recibe una bendición equivalente a 1.000 visitas al mismo. A la entrada del templo se venden más de 1.500 macetas con farolillos chinos, muy populares en esta fecha. A finales del mes de julio, en Asakusa se celebra el Festival de Fuegos Artificiales de Sumida, donde se explotan más de 22.000 dispositivos pirotécnicos.

Agosto

Otra de las citas de pirotecnia que sobresalen a lo largo del año en el calendario festivo de la ciudad tiene lugar a principios del mes de agosto en la Bahía de Tokio, una cita que congrega a verdaderas multitudes. A mediados de mes y durante tres días, se celebra el Festival Fukagawa Hachiman, donde 55 mikoshique representan a todos los distritos de Fukagawa procesionan por las cercanías del santuario Tomioka Hachimangu. Mientras tanto, algunos asistentes arrojan agua a los portadores para así refrescarles.

Noviembre

El tercer día del mes se celebra en Asakusa el Tokyo Jidai Matsuri, un festival que recrea la atmósfera del antiguo Tokio, aún presente en algunos rincones de este barrio. Con trajes históricos o vestidos con kimono, la gente desfila representando la cultura de la era Edo.

Tokio en números

Población total: 12.640.000 habitantes (según www.tourism.metro.tokyo.jpy http://tcvb.or.jp/en/. Datos de Diciembre 2010).

División administrativa: alberga 23 distritos que incluyen 26 ciudades, 5 ciudadelas y 8 aldeas, con una población de 8,53 millones de personas. Hay que sumarle la región de Tama o Tokio Occidental, donde viven 4,08 millones de personas

Plazas hoteleras: 94.000

Restaurantes: 100.000

Taxis: 50.000

De la A a la Z

Bancos

Abren de 9 de la mañana a 3 de la tarde. Durante los fines de semana los cajeros automáticos (ATM) cobran un recargo. El uso de tarjetas de crédito es tan común como en España.

Bentõ

Cajas de comida para llevar que suelen contener arroz, pescado o carne y acompañamiento vegetal. Se pueden encontrar tanto en los restaurantes como en las tiendas autorizadas situadas en centros comerciales o en estaciones de tren y metro.

Cabinas

La proliferación de los teléfonos móviles está provocando su desaparición, pero es posible encontrarlas. Existe una abundante tipología de teléfonos públicos. En ellos se pueden usar monedas o tarjetas prepago de teléfono a partir de 100 yenes. La tarificación es más económica desde las 23 a las 8 horas.

Electricidad

En Japón el voltaje eléctrico es de 100V, 50/60Hz. Los enchufes son de tipo A y de dos clavijas.

Ikebana

Delicado y complejo arreglo floral derivado de la costumbre budista de ofrecer flores a las almas de los muertos. Las flores y ramas se eligen según la estación del año.

Internet

Los hoteles que ofrecen en sus habitaciones servicio wifi están creciendo. El uso de Internet en los ordenadores, que los hoteles sitúan en las recepciones o los centros "business", no tiene ningún coste adicional para sus clientes. Todos los teclados admiten generalmente tanto los caracteres japoneses como las letras alfabéticas.

Jardín japonés tradicional

Estanques, montículos, piedras, árboles o plantas crean paisajes para ser disfrutados durante las diferentes estaciones del año. Suelen representar escenarios reales del país a pequeña escala.

Moneda

La moneda oficial japonesa es el yen (¥). Existen en circulación seis tipos de monedas (de 500, 100, 50, 10, 5 y 1) y cuatro de billetes (de 10.000, 5.000, 2.000 y 1.000).

Móvil

En Japón la telefonía móvil utiliza el sistema PDC (Personal Digital Cellular System), que no es compatible con el sistema GSM. Sólo si se tiene un terminal 3G y la compañía de telefonía tiene algún acuerdo con una empresa japonesa, se podrá utilizar el móvil. Para estancias largas, se puede alquilar un terminal. Numerosas empresas se dedican a ello, como la NTT. Funcionan con un sistema de prepago y su uso cuesta unos 630 yenes por día, aparte de las llamadas (270 yenes/minuto)

Palillos

Para sujetarlos correctamente hay que tomar uno de los palillos como si fuera un lápiz y luego colocar el palillo restante entre el dedo medio y el anular. Se apoyan sobre un pequeño objeto denominado "hashi-oki".

Propinas

No se aceptan y se considera una falta de educación del cliente, y casi una ofensa para el camarero o el taxista. Eso no afecta a la calidad del servicio, que siempre es impecable.

Shodo

Término que define el arte de la caligrafía japonesa. Las ligeras líneas y la trayectoria recorrida por el grueso pincel son las características que expresan la originalidad de cada autor.

Sumo

Lucha tradicional japonesa surgida hace 1.500 años, cuando los hombres ofrecían su fuerza a los dioses en actos religiosos.

Tabaco

A excepción de los espacios destinados para fumadores, está prohibido fumar en lugares o establecimientos públicos. Además, existen zonas en las que se prohíbe fumar en las calles, y en muchos barrios y ciudades se prohíbe por reglamento tirar basura, objetos o colillas al suelo.

Tarjetas de crédito

Las tarjetas American Express, Visa, Mastercard y Diners Club son aceptadas sin problemas en hoteles y tiendas, al igual que en ciertos tipos de transporte público y algunas companías de taxi.

Tasas

Hay ciertas tasas que los turistas deben pagar durante su estancia en el país. El impuesto de consumo (5 por ciento) es uno de ellos y está incluido ya en el precio. La tasa hotelera se aplica en estancias cuyo precio parta de los 10.000 yenes por persona y noche. El cargo es de 100 yenes por habitación para menos de 15.000 yenes y 200 cuando se supera esa cifra. En Tokio, la mayor cantidad de tiendas duty free están en Akihabara.

Tatuajes

En Japón, aún se relacionan con los yakuza -mafiosos-, por lo que conviene no hacer ostentación de los mismos. En algunos onsen y sentõ está prohíbida la entrada a las personas tatuadas.

Vagones para mujeres

Presentes en las líneas de trenes de JR y las diferentes líneas privadas, en la mayoría de los casos son el primer vagón o el último y siempre durante las horas punta de la mañana o del atardecer.

Yukata

Es un tipo de kimono más informal y ligero usado durante los meses de verano. Elaborado con algodón, se pueden encontrar en las habitaciones de los ryokanes.

Teléfonos de interés

Emergencia: 119

Policía: 110

Sanidad: 52 85 81 81

Diccionario básico

Hola: Konnichiwa

Gracias: Arigato

Lo siento: Gomen Nasai

Me permite: Sumimasen

Adiós: Sayonara

Clima

Las mejores épocas para viajar a Tokio son la primavera y el otoño -sobre todo a partir de mediados del mes de octubre-, cuando las temperaturas son más suaves. Los veranos se caracterizan por las elevadas temperaturas y un alto grado de humedad. La época de tifones es en septiembre. Agosto es más seco, pero no por ello menos sofocante, ya que las temperaturas nocturnas no suelen bajar de los 25 grados. El invierno tiene días fríos con puntuales precipitaciones de nieve.

Otra información útil

TOKIO EN INTERNET

Tokyo Tourism Info.Información turística en español ofrecida por el gobierno metropolitano de Tokio, que incluye numerosos paseos y pistas para conocer los aspectos más interesantes de la cultura japonesa, gastronomía incluida, y una lista de todos los museos de la ciudad.

Yes, Tokyo. Sitio completo con información práctica sobre cómo moverse por la ciudad y descargar en PDF rutas y paseos por los barrios de la capital. Lo mejor para no perderse.

JNTO. El portal turístico oficial de Japón, con amplia información sobre Tokio. Perfecto para hacerse una idea general de los lugares de interés de cada barrio o distrito. Tiene además un localizador de rutas que permite saber cómo ir de una estación a otra.

Japan Guide. Aunque ofrece informaciones de todo el país, también es una excelente dirección para preparar un viaje a Tokio. Se puede buscar por intereses, distritos, tipología de lugares... y también ofrece un foro muy útil donde compartir información con otros viajeros.

Kirai. La mejor web para abrir el apetito y conocer la cultura japonesa de mano de su autor, Héctor García, autor del libro Un geek en Japón.

TOKIO EN EL MÓVIL

Tokyo Style Guide.Ofrece rutas de un día o media jornada por los diferentes barrios de la ciudad, incluyendo lugares de interés, compras, restaurantes o cafés. No hace falta conexión a Internet y es gratuita. También tiene un mapa del metro y un breve diccionario.

Hello Japan. Una aplicación gratuita muy útil que no sólo propone restaurantes y visitas al marcar una localización, sino que también ofrece apuntes sobre la cultura en la ciudad y propuestas mensuales.

Encontrar una dirección en Tokio se puede convertir en una dura batalla para el viajero. El sistema que utilizan es totalmente diferente al occidental y su objetivo es ubicar el destino dentro de un área, ya que sólo las vías principales tienen nombre. Si se toma una dirección cualquiera, por ejemplo "4-12-15 Ginza, Chuo-ku", se entiende que el lugar buscado está en el distrito Chuo, en el chome o área 4 de Ginza, en la manzana nº 12 y en el edificio nº 15. Si no hay suerte, siempre se puede preguntar una vez se está en la zona en un koban o garita de Policía.

• Centros de Información Turística. La capital japonesa cuenta con tres Centros de Información Turística en el área metropolitana. También pone a disposición del viajero 150 ventanillas de información repartidas a lo largo y ancho de la ciudad, donde se ofrecen guías y mapas gratuitos.

• Oficina Central del Municipio de Tokio (primer piso del Edificio Principal del Municipio de Tokio).

Desde las 9.30 hasta las 18.30 horas durante toda la semana (cierra en fin de año).

Tlf. 532 130 77

• Estación Ueno de la línea Keisei (situada frente a la entrada a las plataformas de la estación Ueno de la línea Keisei).

De 9.30 a 18.30, todos los días.

Tlf. 38 36 34 71

• Aeropuerto de Haneda(Nueva Terminal Internacional, 2F)

De 9 a 23 horas, todos los días.

Tlf. 64 28 06 53

Hoteles y Ryokanes en Tokio: www.tokyo-hotel-ryokan.or.jp

Asociación Japonesa de Hoteles y Ryokanes: http://staytokyo.com

Asociación Japonesa de Hoteles:www.j-hotel.or.jp

Japan City Hotel Association: www.jcha.or.jp

Asociación Japonesa de Ryokanes: www.ryokan.or.jp

Hoteles económicos en Tokio: www.e-otomari.jp

Síguele la pista

  • Lo último