¿Sabías que los romanos también comían de 'take-away'?

Tenían súper alimentos en su dieta. Proliferaban los takes away en la calle. Tomaban croquetas y hamburguesas. Los trampantojos estaban a la orden del día. Y ya sabían lo que era el umami. Así se comía en Itálica, una de las grandes ciudades del Imperio Romano. ¿Y nosotros nos creemos modernos?

Romanos
Romanos / Art Collection 4
Romanas
Romanas / The Picture Art Collection / ALAMY

El Garum. Un súper alimento

Una delicatessen en la época de Itálica. Un potenciador de sabor era muy complejo de fabricar. De ahí sus altos precios. Unos 400 euros de la época costaba cada botella. Sus aromas a pimienta verde, frutos secos y especias, acompañaban muy bien a la caza.

Garum
Garum / Daniel Gonzalez Acuna

¿Quieres probarlo?

Si quieres conocer su sabor, ahora puedes hacerlo. La Universidad de Cádiz lo ha reconstruido científicamente. El trabajo del arqueólogo Manuel León junto a un grupo de científicos, nos permite disfrutar de sus propiedades. Contenía ácidos grasos, proteínas y mucho calcio.

Un take away en La Casa de los Pájaros

El almuerzo era ligero. Tanto que en muchas ocasiones lo compraban en establecimientos de comida rápida que había en la calle. Habían nacido los primeros take away de la historia. Tan funcionales como los de ahora. En una barra vendían los productos para tomar en la calle o en casa.

Garum
Garum / Daniel Gonzalez Acuna

Pescaíto frito

Entre las recetas abundan las de salmonetes, morena, pescados de sangre azul como la sarda o el atún. Lo elaboraban al horno o cocido en una solución de aceite con garum. Y por supuesto, frito. Platos muy nuestros para disfrutar con un vino fermentado con pétalos de flores, miel y especias. Eso sí, lo tomaban caliente.

Masa madre

Hasta una panadería con hornos de leña había en Itálica. En la ciudad, elaboraban pan de trigo o avena. Y también ese que está tan de moda en las panaderías, el de centeno. En el El Horno de Vélez de Lebrija, conocen los secretos de este pan antiquísimo y los elaboran también a la antigua usanza.

Garum
Garum / Daniel Gonzalez Acuna

Poleá romana

Hoy es uno de esos postres tradicionales que aún se mantienen vivos. (Afortunadamente). Recuerda a aquel plato que tomaban los romanos de a pie. Trigo hervido y machacado que disfrutaban generalmente caliente una vez al día.

Es la hora

El horario europeo ya se estilaba en Itálica. Almorzaban a la misma hora que nosotros. La cena era más temprano, sobre las 7 de la tarde. En la actualidad, Antonio Bort, jefe de cocina del Restaurante Ispal de Sevilla, trabaja con materias primas habituales en la cocina romana. El vinagre, el cordero o el cabrito son protagonistas en sus cenas.

Italica
Italica / D.R

Bien vale una estrella

Usaban técnicas que utilizan siglos después muchos de los chefs con estrella Michelin. Emulsiones a altas temperaturas o cocciones a baja temperatura eran solo algunos de esos procedimientos. Camila Ferraro, del Restaurante Sobretablas de Sevilla, ha fusionado las técnicas culinarias actuales con algunas de estas elaboraciones.

Oro parece

Los trampantojos eran un clásico en Itálica. Los chefs jugaban con las texturas y formas. Las carnes parecían pescados. En el sabor y en la forma. El hígado de pollo con garum era uno de los platos que triunfaban. Y es que el garum fue el mami de la época romana.

Garum
Garum / Daniel Gonzalez Acuna

Sobremesas unisex

La sobremesa era solo para los hombres. Después del almuerzo, las mujeres salían del salón porque no les estaba permitido beber vino. Entonces ellos arrancaban este ritual con 5 almendras. El resto, queda para los que lo vivieron.

“Papas guisás”

Sin patatas. Porque ella llegaría de América siglos después. Así que en tiempos romanos, los platos de cuchara los tomaban con castañas por su alto poder calorífico. Aunque lo cierto es que los guisos no estaban entre los habituales de su despensa.

Itlálica
Itlálica / D.R

Croquetas. Ese plato tan nuestro

Ese indispensable en cualquiera de nuestras barras, ya lo conocían los romanos. Se trataba de pequeñas bolitas aplastadas o redondas a las que llamaban iscias. Se comían con la mano derecha. Y se disfrutaban desde el primer bocado.

Garum
Garum / D.R

Una burger de piñones

Más premium, imposible. En las cocinas preparaban estas hamburguesas que ellos mismos elaboraban con carne, piñones y hierbas mediterráneas.¿Quién sabe si ellos fueron los precursores de las hamburguesas? Con permiso de Hamburgo. Siempre.

Italica
Italica / D.R

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