Parques Nacionales de Cánada

Por su impresionante historia vikinga e inusual geología, los fiordos del Parque Nacional Gros Morne son nuestra segunda parada. Están en la mira de la UNESCO para convertirse en Patrimonio de la Humanidad. Estos fiordos son los segundos más grandes de Canadá, su agua es cristalina y sus vistas espectaculares.

La siguiente parada va dirigida a todos esos amantes del firmamento. Para apreciar su esencia en máximo esplendor dirígete al Parque Nacional Grasslands y a su Dark Sky Preservem, uno de los sitios más grandes y oscuros para observar el cielo de Canadá. 

El Parque Nacional Waterton Lakes es el siguiente destino. Déjate sorprender por la increíble vista a un lago rodeado de glaciares nevados de las Rocallosas Canadienses. Este sitio, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, no solo es único, silencioso y tranquilo, tamién cuenta con una gran biodiversidad y es hogar de la mitad de las variedades de plantas de Alberta.

Extensas franjas de bosque se encuentran con la zona de praderas en el Parque Nacional Riding Mountain en Manitoba, a tan solo tres horas de Winnipeg. 

La mejor forma de explorar sus caminos es a través del sendero de 55 kilómetros Rockwall Trail. Recorre este trayecto que toma de tres a cinco días de recorrido, y pasa por valles llenos de flores, picos abruptos y pasos montañosos, así como cascadas y riachuelos alpinos. Lo más destacado es el Lago Floe y los Paint Pots, riscos de piedra caliza naranja que acompañan al sendero.

Los pintores del reconocido colectivo artístico Grupo de Siete de Canadá encontraron su inspiración en el icónico Parque Nacional Georgian Bay Islands en 1920 y es fácil saber por qué. Este lugar no solo cuenta la costa esmeralda, también podrás llegar en barco a las costas abruptas de granito para caminar a través de pinos blancos y acampar en la playa del archipiélago de agua dulce más grande del mundo.