5 rutas desde Cangas de Onís

La esencia de Asturias es una mezcla de historia, tradición y fe que se amalgaman en esta vertiente occidental de los Picos de Europa. Lagos de Covadonga y Real Sitio fueron, en el siglo VIII, escenario de la legendaria Batalla de Covadonga y es una ruta que atrapa al viajero. El monasterio del Parador de Cangas enlaza directamente con esta parte de la historia. Desde el Parador nos dirigiremos hacia Covadonga por la AS-262, cruzando la localidad de Cangas de Onís, capital del Reino Astur con su primer rey, Pelayo. En Covadonga, la visita tanto a la Basílica (obra de Federico Aparici, culminada en 1901) como a la Santa Cueva es obligada, pues ya la inmersión en esta gruta, guardiana de la imagen de la Santina de Covadonga, proporciona una sensación sobrecogedora, en un escenario difícilmente igualable. Tras un paseo por el Real Sitio nos dirigiremos, bien en coche o en autobús (dependiendo de la temporada turística), por la CO-4 hacia los Lagos de Covadonga, siendo el Enol (1.070 m) el primero al que se llega, continuando hacia el lago Ercina (1.108 m) desde cuyo mirador Entrelagos se admira todo el complejo lacustre. En la ascensión se puede divisar el vuelo majestuoso de los buitres o toparse con hermosas vacas roxas (raza autóctona), cabras y ovejas en plena carretera.No te lo pierdas. Pasear por los vestigios de las minas de Buferrera al lado del lago Ercina y visitar el mercado dominical de Cangas de Onís, con productos típicos y los mejores quesos asturianos.

Asturias presume de algunas las playas más bellas del norte de España. A poco más de media hora de Cangas de Onís, dejando atrás Arriondas, la N-634 acerca a la villa marinera de Ribadesella (en la foto). Conocida por ser la meta del Descenso Internacional del Sella y porque este río salmonero desemboca en el Cantábrico dejando a un lado una de las playas más visitadas de la zona: la de Santa Marina. Con Q de calidad y elegida por veraneantes de toda España, su arena dorada contrasta con el marco de los palacetes modernistas que la rodean, reflejo de su pasado esplendor. Forma parte del Camino de Santiago por la Costa y guarda en sus acantilados huellas de dinosaurios. En poco más de media hora se accede desde Ribadesella a la bellísima playa de Rodiles, tomando la A-8, saliendo en el ramal Villaviciosa-Rodiles y siguiendo por la coqueta VV-6. Todo un paraíso para surfistas y visitantes por su limpieza, calidad de sus olas y refrescantes eucaliptales. Dejando Rodiles por la N-632 pasamos por Villaviciosa, e internándonos por la AS-256 hacia Tazones se llega a este encantador pueblo donde desembarcó Carlos I en 1519. En sus restaurantes, guisos marineros, pescados y mariscos aguardan en sus fogones.No te lo pierdas. La visita a las pinturas parietales de la cueva de Tito Bustillo o la adquisición de algún objeto de azabache de la zona de Villaviciosa, ¡es el mejor del mundo!

Las más de treinta playas que tiene Llanes forman parte del Paisaje Protegido de la Costa Oriental. Arenas blancas y caprichosas formaciones cársticas donde la bravura del Cantábrico se manifiesta sin pudor en el luminoso oriente de Asturias. Partiendo de Cangas de Onís visitaremos la playa de Cuevas del Mar, próxima a Nueva de Llanes, en el occidente del concejo. Para llegar, tomaremos la A-8 dirección Llanes desviándonos hacia Nueva y siguiendo por la AS-340. Dos gigantes calizos horadados flanquean una concha plana de arena. Siguiendo hacia Llanes se encuentra la peculiar playa de Gulpiyuri, toda una sorpresa geológica. Para conocerla, podemos continuar por la N-634 o tomar de nuevo la A-8 desviándonos en Naves para, cruzando sobre esta autovía, dirigirnos a un amplio parking y, caminando a través de caminos agrícolas, llegar hasta esta rareza natural. Otra opción es la playa de Torimbia (Niembro), conocida por ser uno de los primeros arenales naturistas de Asturias. Conectada con esta por la LLN-11 y a menos de 5 km está la accesible playa de Barro, de aguas cristalinas y escenario del rodaje de varias películas.  No te lo pierdas. Recorrer la senda costera que une la playa de Cuevas del Mar (en la foto) con los espectaculares Bufones de Pría. Probar especialidades llaniscas como el pantruque (masa de harina, maíz, huevo, cebolla y tocino) o practicar espeleopaddle en las aguas de Llanes.

El Mirador del Fito o Fitu, emblema turístico de Asturias, es un destino cercano a Cangas de Onís. Se accede a este mirador tomando la N-625, que acerca a la localidad de Arriondas, desde cuyo puente arranca, cada año, el Descenso Internacional del Sella. Del centro de Arriondas parte la sinuosa AS-260 que, en once kilómetros, conduce a este elevado mirador que sobrevuela el espacio como un ovni de hormigón construido hace noventa años en plena Sierra del Fitu, desde donde se avista, de fondo, el Cantábrico, las sierras del Sueve, el Parque Natural de Ponga, los Picos de Europa y varias villas marineras. Bajando por la AS-260 y tomando la A-8, y ya en Colunga la AS-257, se llega al MUJA, un museo inspirado en una gigantesca icnita tridáctila, que alberga fósiles y réplicas a tamaño natural de los dinosaurios que poblaron Asturias en el Jurásico (museojurasicoasturias.com). La ruta finaliza en la bellísima villa marinera de Lastres, de empinadas calles, donde conviven casas marineras con regios palacios.   No te lo pierdas. Conocer los asturcones, raza autóctona de ponys única en el mundo, en Piloña o realizar un paseo por el barrio de San Juan de Duz (Colunga), lleno de casonas de indianos.