La Plaza Roja

La Plaza Roja
La Plaza Roja

Una visita a Moscú siempre debe comenzar por la Plaza Roja. El lugar que da origen a todas las rutas de Rusia posee 695 metros de longitud y 130 metros de ancho, siendo la tercera plaza más grande del mundo. El nombre de Plaza Roja no proviene del color de los ladrillos que la rodean ni hace referencia al comunismo sino que deriva de la palabra rusa "Krásnaya", que en el antiguo ruso significaba "bonita". Sus cuatro costados definen el pasado y presente de la historia de la ciudad: al Norte, el Museo Histórico y la Puerta de la Resurrección; al Sur, la catedral de San Basilio el Bendito, cuyas nueve torres con cúpulas de "cebolla" constituyen uno de los iconos de la capital (para algunos, su "skyline"); al Este, los grandes almacenes GUM, con tiendas y boutiques con precios fuera del alcance de la mayoría de los moscovitas (y de los turistas), y al Oeste, la muralla del Kremlin, la fortaleza de 28 hectáreas que fue residencia de los zares y ahora del presidente, y que, además del mausoleo que guarda la momia de Lenin, alberga el cañón más grande del mundo (40 toneladas) y la campana más grande del mundo (200 toneladas). En las paredes de esta "ciudad dentro de la ciudad" descansan los restos de otros héroes rusos, como el escritor Máxim Gorki, el astronauta Yuri Gagarin y Josef Stalin.

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