Te contamos por qué Sozopol debería ser tu próximo destino en Europa
La antigua ciudad griega de Apolonia te espera frente al mar Negro...
Habitado desde hace miles de años, un punto de la costa sur del actual territorio de Bulgaria se asoma en uno de los extremos de la bahía de Buzar para mostrarnos todo el encanto del mar Negro como destino de vacaciones.
Sozopol, antigua ciudad griega de Apolonia, combina a la perfección los atractivos de una población marinera reconvertida al turismo de sol y playa y un gran bagaje histórico que se traduce en un casco antiguo digno de conocer.
Las dos caras de Sozopol
Sozopol no podría definirse como una sola entidad. Las notables diferencias entre su parte antigua y la nueva obliga a diferenciarlas. Esta característica, lejos de constituir una cualidad negativa, otorga a esta población costera una personalidad y una variedad espacial que aúna en poca distancia formas de hacer turismo diferentes.
La parte más nueva corresponde a los barrios residenciales que se extienden desde la península de Sozopol hasta la playa de Harmanite, donde una larga avenida que discurre paralela al mar concentra un gran número de puestos de toda índole, asemejando la típica estampa de sol y playa. Mientras, el área donde se localiza el casco viejo de la ciudad nos da la bienvenida con otra extensión de arena – denominada «Central» -, que hace de separación entre ambas realidades. Al otro lado, en la parte occidental, se encuentra el puerto deportivo, que acaba justo a la altura del Museo Arqueológico.
La morfología costera sobre la que se asienta Sozopol suele recordar a la vecinaNessebar, situada más al norte, que también se asienta sobre una península, siendo una de las joyas del mar Negro, tal y como reconoce su inclusión en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
Un casco viejo para empaparse de la Bulgaria del mar Negro
Sozopol ha sido un verdadero crisol de pueblos a lo largo de su dilatada historia – tracios, griegos, romanos, bizantinos y otomanos -. Desde que se fundara como ciudad en época del apogeo griego – cuando su nombre respondía al de Apolonia -, el devenir de los siglos fue convirtiendo a esta población en un importante centro pesquero, hasta su reconversión como destacado destino turístico del mar Negro en la actualidad.
El casco viejo, que ocupa una pequeña península, especialmente su mitad más avanzada hacia el mar, es un conjunto de calles adoquinadas en el que destacan los restos arqueológicos y las típicas casas de madera y piedra del Renacimiento búlgaro de esta parte de costa. A su vez, dos largas arterias recorren la península de extremo a extremo, permitiéndonos avanzar por toda ella hasta el cabo Skamni, donde se encuentra a la vista un gran espacio repleto de vestigios arqueológicos.
Por su parte, junto al mar, el paseo marítimo es de imprescindible visita, pues desde él es posible bordear toda la magnífica y antiquísima muralla restaurada hasta los muelles del puerto y contemplar así algunas de las mejores vistas tanto del casco viejo como del mar o las cercanas islas de San Iván y San Pedro.
En pleno centro histórico – declarado Reserva arquitectónica y arqueológica en 1974 -, el gran número de iglesias y monasterios nos habla de la importancia comercial de Sozopol durante la Edad Media, así como hace la nutrida serie de anclas – el símbolo de la ciudad – con las que nos toparemos recorriendo sus calles.
Una de esas iglesias, situada al principio de la península, la de San Cirilo y San Metodio, es quizás la más importante de todas ellas, tanto por su armónica figura con su campanario como por ser el lugar donde se custodian las famosas reliquias búlgaras de San Juan Bautista, encontradas en 2010 en un monasterio paleocristiano de la isla de San Iván, siendo hasta la fecha los restos óseos hallados que más probablemente coincidan con la figura del santo.
A nosotros nos encanta... ¿Y a ti?
Síguele la pista
Lo último