Reforestación de castaños en Galicia

Cada vez son más los alojamientos que apuestan por la sostenibilidad ambiental y el cuidado del medio ambiente y el entorno que los rodea. En este sentido el hotel Relais & Châteaux A Quinta da Auga se autodefine como un eco-hotel pionero en materia de responsabilidad social y medioambiental y se ha querido sumar a la iniciativa de WWF La Hora del Planeta, símbolo de la lucha contra el cambio climático, que se celebra cada año el último sábado de marzo (el 30 de marzo en 2018).

Bajo este marco, el hotel ha decidido donar tres euros de cada estancia que se realice en el mes de marzo para la compra de castaños autóctonos, que serán plantados en una finca aledaña propiedad del hotel. Esta actuación viene motivada por la necesidad de reforestación de la zona, tras los incendios acaecidos en Galicia en año pasado y que asolaron sus montes.

Además, los castaños plantados son micorrizados, es decir, han sido inoculados en la raíz con los hongos adecuados para producir Boletus edulis y seleccionados para la producción de castañas de gran calidad; además son resistentes al fuego y a la enfermedad de la tinta (la más grave que afecta a esta frondosa). Estos árboles proceden de Hifas da Terra, un centro de investigación con sede en Pontevedra especializado en micología aplicada, y los frutos que den se recogerán en los próximos otoños para ser utilizados en la carta del restaurante del hotel, Filigrana, siguiendo la filosofía de cocina de kilómetro cero de los Relais & Châteaux: del árbol a la mesa.

El hotel Relais & Châteaux A Quinta da Auga se abrió en 2009 con la sostenibilidad ambiental por bandera. Así, todas sus instalaciones están pensadas para conseguir la máxima eficiencia y el mayor ahorro energético posibles. En este sentido, dispone de suelo radiante alimentado por energía geotérmica y paneles solares, un sistema de mico-cogeneración que produce electricidad y agua caliente por combustión de gas, iluminación con encendido de tipo presencial y el calor disipado por la demanda de refrigeración del hotel se aprovecha para el calentamiento del SPA, entre otros.

A 3 kilómetros del casco antiguo de Santiago de Compostela, este hotel se ubica en una finca de una hectárea y en un conjunto arquitectónico del siglo XVIII.