¿Alguna vez había visto un baño flotante? El estudio japonés Suppose Design Office ha hecho realidad esta loca idea y ha creado un bloque de baños con unas paredes de hormigón de 7,5 metros de altura y que se alzan a 50 centímetros del suelo.

Esta imponente estructura monolítica se encuentra junto a la estación Sendagaya, cerca del estadio olímpico de Tokio. Sus muros de hormigón se unen a unas columnas centrales dentro del bloque de baños y los espacio alrededor de la base del bloque permiten que entre algo de luz y aire en la estructura.

El bloque tiene 75 metros cuadrados, y se accede por una puerta cortada en la fachada de hormigón que da a la estación. Esto conduce a un área central con lavabos y baños para hombres y mujeres dispuestos a ambos lados. Los cubículos están revestidos con paneles de madera y hay colocados letreros de latón por todas partes. Además, un largo tragaluz recorre todo el bloque y lo ilumina desde arriba.

Según el arquitecto, con este proyecto buscaban el contraste entre el peso del hormigón y el efecto flotante de las paredes. Además, el baño servirá a los pasajeros que visiten el Estadio Nacional diseñado para los Juegos Olímpicos de este año. Y es que el proyecto forma parte del esfuerzo de la ciudad para mejorar Tokio antes de los Juegos Olímpicos a partir de pequeñas intervenciones arquitectónicas.