La bebida estrella en la Estación Espacial Internacional no es la que te imaginas
En gravedad cero y a 14 kilómetros de la tierra el suministro de agua u otro tipo de bebidas está considerablemente limitado, por lo que los astronautas destinados a la ISS tienen que recurrir a este curioso método para hidratarse.

Si ya hay problemas a la hora de querer pasar una botella de agua por el control del aeropuerto, es difícil imaginar cómo hacen los astronautas para conseguir subir la comida y la bebida que van a consumir durante sus misiones. Y es que organizar un viaje al espacio es mucho más complicado de lo que pensamos. Aunque un vuelo de la tierra a la Estación espacial Intencionalidad (ISS en sus siglas en inglés) dura apenas 2 horas y media, la logística y cálculos necesarios para una misión de dos personas requiere mucha preparación y equipos con cientos de integrantes para hacerlo posible.
Sumado a todo esto, está el tema del dinero. La astrofísica española Luisa Lara admitió en 2007 que llevar un kilo de peso al espacio costaba más de 1 millón de euros. Aunque es verdad que los precios se han abaratado considerablemente desde entonces, el peso en la carga de los cohetes sigue siendo un tema fundamental que debe calcularse al milímetro. Cada gramo cuenta.
La solución… ¡Haz tu propia agua!
El problema del agua ha sido uno de los principales desafíos que la ingeniería aeronáutica ha tenido que sortear para seguir haciendo posible los lanzamientos. Es por ello que la NASA ha desarrollado un nuevo sistema con el que se puede abastecer a los integrantes de las misiones espaciales durante toda su estancia, que es capaz de reconvertir la orina producida por los astronautas en agua potable.

El funcionamiento del Procesador de Orina es capaz de sustraer el H2O remanente en los desechos de los astronautas mediante la destilación de vacío. A continuación, el líquido se somete a un proceso de purificación para garantizar que su consumo sea cien por ciento seguro, dando como resultado agua incluso más pura de la que bebemos normalmente en la tierra, según afirma la NASA.
Hasta el momento, de toda el agua que llega a la ISS, el sistema de procesamiento es capaz de reciclar entre el 93 y 94% gracias al Sistema de Control Ambiental y Soporte Vital, encargado de controlar todos los parámetros que garanticen unas condiciones de habitabilidad óptimas para los integrantes de las misiones. Hace relativamente poco, unas modificaciones en el Conjunto Procesador de Orina (UPA) ha conseguido que su eficacia aumente hasta el 98%.
Las complicaciones de llevar un ser humano al espacio
En las misiones espaciales, todo está calculado con precisión durante su transcurso, también el agua que se consume. La Agencia Espacial Estadounidense calcula que sus tripulantes requieren de medio litro de agua al día en total, lo que incluye consumo, preparación de alimentos e higiene, lo que resulta muy inferior a los dos litros diarios que se recomiendan consumir a los que no nos encontramos en gravedad cero.

Sin embargo, los astronautas se someten a una preparación exhaustiva que incluye todo tipo de entrenamientos, así como a un seguimiento médico que garantice su buena salud y capacidad para llevar el viaje sin complicaciones.
Síguele la pista
Lo último
