Así es Arroios, el barrio más 'cool' del planeta que está en Lisboa

Arroios ha conseguido desbancar al barrio madrileño de Lavapiés como uno de los barrios más vivos y atractivos del mundo según la revista británica de viajes Time Out. La revista lo presenta no solo como un paraíso para el paladar, sino también como un lugar multicultural donde lo nuevo coexiste con lo clásico por delante de áreas como Shimokitazawa en Tokio.

La selección de la lista ha sido realizada por el equipo de editores de dicha revista tras la realización de una encuesta, en la que participaron más de 27.000 votos de ciudadanos de todo el mundo. Ésta recoge un total de 50 vecindarios. Todos ellos, reúnen la misma característica: han conseguido renovarse con el tiempo y convertirse en ambientes llenos de arte, ofertas de ocio y diversidad.

En definitiva, una lista para salir de la ruta turística habitual y descubrir lugares habitualmente frecuentados por residentes bien informados.

Arroios, un mundo en sí mismo

Este barrio portugués ha sabido renovarse, de ser uno de los más conflictivos a convertirse en uno de los más interesantes del mundo. Un lugar donde se funde lo clásico con el modernismo. Nuevas vertientes artísticas cerca de palacetes de finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX.

Calles en las que perderse entre colores pastel, algún que otro azulejo, formas redondas, artesanía de toda la vida, galerías de arte al aire libre y arte urbano por cada rincón. Diversidad en su concepto más amplio que hacen de él un mundo en sí mismo según la revista. Un crisol de culturas y tradiciones reducido en el barrio más grande de Lisboa.

¿Qué hacer en Arroios?

Cruzar Arroios, uno de los barrios más grandes de Lisboa, en media hora es más que posible. A no ser que uno se pierda contemplando cualquiera de sus muchos atractivos. Y es que alrededor de Almirante Reis, uno puede encontrar auténticos tesoros. Por ejemplo, la biblioteca de São Lázaro: la más antigua de Lisboa. Un edifico emblemático que preserva entre sus muros publicaciones originales del siglo XVII al XXI.

Aunque si lo que realmente te apetece es empaparte de la esencia del vecindario, acude a alguno de sus centros deportivos o culturales. Allí podrás ver películas, obras de teatro, acudir a charlas o realizar deportes tan saludables como el yoga.

A la hora de comer o cenar, no dudes en probar nuevos sabores. Sus calles están repletas de restaurantes de todos los rincones del mundo. Aunque, si acudes a Arroios no olvides visitar el bar más pequeño de Lisboa: el Vlade Lounge. Por último, degusta la hidromiel. Es la alternativa perfecta a la sidra.

A pesar de que en los buscadores siga apareciendo como un barrio a evitar, Arroios es a día de hoy un barrio de lo más recomendable lleno de universitarios y personas de mentalidad abierta.