No es Japón, pero lo parece: la espectacular ruta de senderismo que te lleva por los cerezos en flor más bonitos de España
Japón puede esperar, el Valle del Jerte te ofrece una experiencia increíble en la que puedes disfrutar de los cerezos en flor a tan solo unos kilómetros de tu casa. ¿Te lo vas a perder?

Cuando alguien te dice “cerezos en flor”, tu mente vuela directamente a Japón, al monte Fuji con su corona de pétalos rosados, a los templos de Kyoto acariciados por la brisa primaveral. Pero ¿y si te dijera que no hace falta cruzar medio planeta ni aprender a usar palillos para vivir esa misma magia? Porque en España tenemos nuestro propio paraíso rosado, y se llama el Valle del Jerte.
Japón en versión extremeña
Ubicado en el norte de Cáceres, el Valle del Jerte se transforma cada primavera en un espectáculo natural que parece sacado de un ukiyo-e. Más de un millón y medio de cerezos se sincronizan como por arte de magia y florecen casi al mismo tiempo, tiñendo las montañas de blanco y rosa. Si hay una palabra que lo defina, es “efímero”, pues solo dura entre 10 y 15 días, y cuando se va, se va. Así que guarda esta fecha en el calendario; el momento clave es entre finales de marzo y principios de abril.

Pero no llegas hasta ahí solo para mirar. Has venido a caminar. A respirar. A maravillarte. Y para eso, hay una ruta que te va a dejar con la boca abierta.
Senderismo con vistas al paraíso
La ruta más popular (y fotogénica) es con salida y llegada en Tornavacas. Son unos 22 kilómetros (circular en su parte central, con tramos de ida y vuelta al inicio y al final), aunque puedes hacer solo un tramo si lo tuyo es más “paseíto de domingo que trekking alpino” y empezar en Jerte en lugar de en Tornavacas. Lo importante es que vayas con los ojos bien abiertos, porque cada curva del camino es un cuadro en movimiento. Eso sí, si haces la ruta entera tienes que tener en cuenta que vas a tardar unas seis horas, por lo que te recomendamos agendar más de un día para poder realizar alguna que otra ruta y visitar la espectacular cascada del Caozo.

El sendero serpentea entre maravillosos campos de cerezos, pequeños arroyos que bajan cantando desde la sierra, bosques de castaños, robles, gargantas con pozas cristalinas y miradores naturales. Si te preguntas cuál es la parte de la ruta que sí o sí tienes que pararte un poquito a disfrutar, Los Pilones o el mirador del Chorrero de la Virgen. Cerca, las montañas del Parque Natural de la Garganta de los Infiernos, con ese nombre que suena a heavy metal pero que en realidad esconde pozas cristalinas, saltos de agua y unas vistas de ensueño.

Consejos de caminante (para que no mueras en el intento)
- Lleva ropa cómoda y capas, que por la mañana refresca y al mediodía te achicharras.
- Agua y algo de picar, porque entre selfie y selfie te va a entrar hambre.
- Consulta el estado de la floración antes de ir: hay webs como que actualizan día a día cómo va el espectáculo.
Y si te quedas con ganas de más…
Alójate una noche en la zona, que no se acaba todo con los cerezos. Puedes hacer rutas por la Garganta de los Infiernos, bañarte en las pozas naturales si el clima acompaña, o simplemente ver el atardecer sobre el valle con una copa de vino en la mano. Porque a veces, la felicidad son las pequeñas cosas; un banco de madera, el aire fresco y el rumor de los pétalos cayendo.

Japón puede esperar
El Valle del Jerte es una joya que tenemos aquí al lado, y cuando los cerezos florecen, se convierte en uno de los paisajes más alucinantes de Europa. Así que ya sabe.. Coge la mochila, carga la batería del móvil y lánzate a la ruta. Porque no es Japón, es Extremadura; un destino increíble a pocos kilómetros de casa. Así que, lo dicho, Japón puede esperar. ¡Y qué más da! Teniendo el Valle del Jerte…
Síguele la pista
Lo último
