Las mejores rutas senderistas del mundo están en un destino a dos horas de España y con la mayor variedad de especies vegetales por kilómetro cuadrado
Viajamos hasta la conocida como isla jardín del Atlántico para descubrir una de sus actividades estrella: el senderismo entre levadas.

A tan solo dos horas de vuelo desde España descubrimos un edén para senderistas que llegan desde todas las partes del mundo. Y es que la isla portuguesa perdida en medio del Atlántico que hoy visitamos, es una sinfonía verde que se eleva sobre acantilados, bosques de laurisilva y montañas que tocan las nubes. Y, por si esto fuera poco, puede presumir de ser uno de los lugares del mundo con mayor variedad de especies vegetales por kilómetro cuadrado.
No exageramos si decimos que este pequeño paraíso (con un tamaño parecido a la isla de Menorca) ofrece algunas de las rutas de senderismo más espectaculares del mundo. Además, muchos de estos caminos serpentean por bosques de laurisilva que son patrimonio Mundial de la Unesco. Bienvenidos a Madeira y a sus levadas.

Levadas: caminos del agua
Las levadas son antiguos canales de riego que se construyeron a partir del siglo XVI para transportar el agua desde las montañas del norte hasta los campos de cultivo del sur, donde el clima es más seco. El ingenio de los madeirenses creó una red de más de 2.400 kilómetros de canales, que se extienden entre bosques y valles que bien podrían ser el set de rodaje de Parque Jurásico.
En sus orígenes, estas levadas estaban construidas de madera, pero con el paso del tiempo, se fueron reforzando con hormigón. Y sus estrechos márgenes se transformaron en senderos naturales, ofreciendo a los senderistas una forma única de conocer la isla, ya que se ven envueltos en un exuberante paisaje rodeados de infinitas especiales vegetales y con el canto de los pájaros y el sonido del agua como banda sonora de excepción.

Decíamos que Madeira es uno de los lugares del mundo con mayor variedad de especies vegetales por kilómetro cuadrado. Su joya más preciada son los bosques de laurisilva, que cubren buena parte de la isla y que han sido declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO. Este ecosistema único está formado por especies endémicas que desaparecieron en el resto de Europa hace millones de años.
Caminar entre los árboles de las levadas más altas (la laurisilva se da a partir de los 700 metros de altitud con respecto al nivel del mar) es internarnos en un mundo místico. El aire está cargado de humedad, el suelo cubierto de musgo y hay helechos gigantes por todas partes.

Las mejores rutas senderistas de Madeira
Cada levada ofrece una experiencia distinta. Algunas son fáciles y accesibles, perfectas para familias o principiantes, mientras que otras, son más exigentes y desafían a los senderistas más experimentados con túneles, acantilados y desniveles de infarto. No en vano, nuestro guía Danilo (colaborador de MBTours) nos cuenta durante el recorrido que todos los días hay que activar los servicios de emergencia para realizar rescates en alguna levada. Por cierto, si quieres saber cómo sobrevivir en la montaña, aquí tienes una guía de supervivencia básica.Y, llegados a este punto, es momento de descubrir cuáles son las 3 levadas más impresionantes de la isla:
Levada do Caldeirão Verde
Una de las rutas más populares y fotogénicas. Parte del parque forestal de Queimadas, cerca de Santana, y serpentea durante 13 kilómetros (ida y vuelta) hasta llegar a una impresionante cascada de 100 metros que cae en un anfiteatro natural de roca. El camino atraviesa túneles, precipicios y una vegetación tan densa que parece sacada de un cuento.

Levada das 25 Fontes y Risco
Situada en el área de Rabaçal, en el suroeste de la isla, esta levada es una de las imprescindibles. El camino conduce hasta una laguna rodeada de pequeñas cascadas (las famosas 25 fuentes) y finaliza en el salto del Risco, una cascada que se precipita entre las montañas. Es una ruta de 9 kilómetros (contando ida y vuelta).
Pico do Arieiro a Pico Ruivo
No es una levada propiamente dicha, sino una de las rutas de montaña más espectaculares de Europa. Une los dos picos más altos de Madeira (1.818 y 1.862 metros) a través de túneles, escaleras talladas en la roca y crestas de infarto. En días despejados, las vistas sobre el mar de nubes son de una belleza prístina. Es una caminata exigente y en la que más servicios de rescate se realizan.

Consejos prácticos para disfrutar las levadas
- Calzado adecuado: aunque algunas rutas son sencillas, los caminos pueden ser resbaladizos. Se recomienda llevar botas de montaña y bastones telescópicos.
- Linterna: muchas levadas atraviesan túneles largos y oscuros; una linterna (o el móvil con batería suficiente) es esencial.
- Respeto por la naturaleza: la laurisilva es patrimonio de la Humanidad, además de un ecosistema frágil. No se recomienda salir de los senderos y, sobre todo, evitar dejar residuos.

- Guías locales: en las rutas más largas o desconocidas, contratar un guía puede enriquecer la experiencia con información sobre flora, fauna e historia.
- Medidas de seguridad: la norma más importante con respecto a la seguridad es detenerse siempre si se va a sacar una foto o hacer un video. En movimiento puede resultar bastante peligroso.
En definitiva, a poco más de dos horas de vuelo de España descubrimos un paraíso que nos permite disfrutar de las mejores rutas senderistas del mundo gracias a sus levadas, que bien podrían ser el lugar en el que se esconden las hadas. Y es que, aunque parezca que estamos en Hawái, Madeira sorprende y enamora gracias a su intensa vegetación, que la convierte en uno de los lugares con mayor variedad de especies vegetales por kilómetro cuadrado del mundo.
Síguele la pista
Lo último