En invierno, hoteles con chimenea y spa

Cuando llega el frío nada apetece más que una chimenea. El calor del fuego, ese que te pone los mofletes rojos y del que cuesta salir, es el mejor aliado en los días de lluvia y nieve. Pero también lo es un buen spa. Esto lo que ahora os proponemos, fuego y agua para combatir las bajas temperaturas invernales en la mejor compañía posible. Porque no hay nada más romántico que pasar un fin de semana yendo del spa a la chimenea y vuelta a empezar.

En medio de la montaña, de un bosque, en la profundidad de un valle o en una encantadora villa rural, el entorno del establecimiento también tiene mucho que decir a la hora de elegir la escapada perfecta. Ávidos aventureros no dudan en echarse a los senderos de las montañas para "coger frío" antes de disfrutar del calor del lugar. Mientras que hay otros que prefieren disfrutar del paisaje desde la ventana. Sea cual sea la opción y para todos los gustos, os proponemos algunos de los mejores establecimientos en los que disfrutar de una buena chimenea, pero también del spa perfecto.