Estas son las ciudades en las que mejor se come de España, según los chefs más prestigiosos del mundo
España es un país donde la gastronomía se convierte en una joya muy valiosa, y los chefs más prestigiosos lo saben.

No hay opinión más fiable en cuanto a la comida que la de un reputado chef. Es cierto que tampoco es demasiado complicado adivinar que España es uno de los países del mundo donde mejor se come. Pero es un territorio muy amplio, y cada quién tiene su opinión sobre la ciudad en la que más satisfecho puede salir un visitante. Descubrimos las favoritas de los mejores chefs de España.
El chef José Andrés y su unión a Andalucía
Internacionalmente conocido por su trabajo humanitario al frente de su ONG World Central Kitchen, este chef, asturiano de nacimiento, prefiere una ciudad en la otra punta de España para comer. Si bien Asturias podría ser su elegida, ha escogido Cádiz y su pescaíto frito, asegurado que "no se come en ningún lugar mejor, y no solo por el producto, sino por las historias que hay detrás".
El chef pasó buena parte de su infancia allí y su mujer es originaria de Algeciras, por lo que guarda un bonito sentimiento hacia la provincia en general. Entre sus restaurantes preferidos -todos conservando la esencia tradicional andaluza- están Casa Babino en Sanlúcar, El Campero en Barbate, el Mercado de Abastos en Zahara de los Atunes o La Marea de Marcos en Jerez de la Frontera.
Dabiz Muñoz demuestra su amor por la tierra donde nació
Madrileño de cuna y amante acérrimo de la capital española, el chef de DiverXo, Hungry Club, RabioXo, StreetXo y GoXo barre para casa cuando se trata de elegir dónde comer. Tiene fama de tener un paladar exigente, pero aun así, se acerca a diferentes restaurantes para degustar platos tradicionales como los callos, el bocadillo calamares o el cocido y otros más vanguardistas.
En sus redes sociales ha mostrado en algunas ocasiones sus locales de confianza, como Lhardy, que tiene su "cocido favorito del mundo"; La Maruca, que sirve productos de origen cántabro; La Catapa, donde acompañar un buen vermú de croquetas, mejillones o ensaladas; El Filandón, que destaca por su pescado fresco; o La Duquesita para aportar el toque dulce.
Jordi Cruz y Ferrán Adriá coinciden en gustos
Jordi Cruz es uno de los cocineros más conocidos del país, debido a su paso por el programa de televisión 'Master Chef' donde ejerce de jurado. Además, su restaurante ABaC fue elegido en 2024 como el mejor restaurante del mundo según The World's 50 Best Restaurants. Al igual que Dabiz Muñoz, él también elige su ciudad natal como el lugar donde mejor se come: Barcelona.
Recientemente, en una charla con el influencer Borja Iglesias Jato, desveló que su restaurante favorito era Disfrutar, dirigido por los exjefes de cocina de El Bulli, Mateu Casañas, Oriol Castro y Eduard Xatruch. Más que un restaurante, se trata de una auténtica experiencia vanguardista, donde cada plato está pensado minuciosamente y con un cuidado único.
Por su parte, Ferrán Adriá está de acuerdo con su paisano y tiene una larga lista de restaurantes donde siente que toca el cielo. Uno de ellos es Los Caracoles, en pleno barrio gótico y cuyo plato estrella, como no podía ser de otra manera, son los caracoles; otro es Enigma, donde se siente como en casa. Fuera de la ciudad, también recomienda Can Jubany en Calldetenes para tapear en condiciones.
Karlos Arguiñano como el chef más cercano
Si hay un cocinero televisivo, carismático y adorado por toda España, ese es Karlos Arguiñano. Ha conquistado a todos con sus recetas "fáciles y ricas", tanto a través de la televisión como en su restaurante con preciosas vistas al Cantábrico. Su local está ubicado en Zarautz, y allí es donde también se encuentra el restaurante de confianza del cocinero, al que lleva acudiendo más de 20 años.
Se trata de la Sidrería Izeta, especializado en carnes y con un menú del día que se adapta a la temporada y tiene un precio de 16 euros, incluyendo primero, segundo, bebida, postre y café. Aunque también recomienda ELKANO en Guipúzcoa para degustar un buen pescado. Pero este no es apto para todos los bolsillos, puesto que su menú puede llegar a costar hasta 200 euros.
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