Las cinco playas más impresionantes de Cantabria

Hablar de Cantabria y de sus playas es sinónimo de hablar de belleza. La increíble costa cántabra se ve jalonada por un sinfín de playas que van marcando la diversidad y autenticidad de esta región.

Ante tal diversidad y cantidad de opciones a veces nos sentimos abrumados. Es por ello que hemos querido hacer una pequeña selección eligiendo las playas que, según nuestro criterio, resultan ser las más espectaculares de Cantabria.

Playa de los Locos (Suances)

Situada cerca del núcleo de población costero de Suances, si bien es preciso realizar una pequeña caminata, esta playa ofrece tanto unas vistas maravillosas desde lo alto del acantilado que la da forma, como un escenario sublime a lo largo del arenal que se extiende en la línea de mar. Perfecta para la práctica del surf debido a su oleaje es, al mismo tiempo, un espacio perfecto para caminar o disfrutar de sus sensacionales puestas de sol. Una playa de arena dorada a la que se accede por una larga escalinata en cuya parte superior es posible aparcar.

Playa de Langre (Langre)

Quizás una de las playas de Cantabria que mayor unanimidad despierta en cuanto a su espectacularidad. Al igual que la Playa de los Locos de Suances, está abrigada por un imponente acantilado que da una marcada personalidad a este rincón próximo a la ciudad de Santander. Dividida en dos partes – conocidas localmente como La Pequeña y La Grande -, el fuerte oleaje es perfecto para los amantes del surf, si bien es necesario tener precaución a la hora de bañarse. Tanto las vistas desde lo alto de las escaleras que dan acceso como el telón de fondo de los acantilados desde la base de la playa, hacen de Langre una de las playas preferidas de la zona.

Playa de Arnía (Santa Cruz de Bezana)

En pleno corazón de la Costa Quebrada, la Playa de Arnía muestra un paisaje extraordinario en el que las formaciones geológicas toman el protagonismo entremezclándose con las aguas del mar y la arena del litoral. Sus pequeños islotes, así como las características crestas de sus flancos o las líneas rocosas que marcan la dirección de las aguas crean un entorno idílico en el que es posible el acceso tras un pequeño trayecto a pie. Su fina arena dorada se ve cubierta por las aguas salvo en la bajamar, mientras que el abrigo de las formaciones rocosas rebajan el oleaje en este punto.

Playa de Mataleñas (Santander)

Aunque su cercana situación a la ciudad de Santander pueda hacer pensar que esta playa es un típico destino de miles de personas durante el verano, se trata sin embargo de un lugar mucho menos concurrido que la mayoría de las playas del entorno – tal vez por la dificultad de su acceso -, por lo que en ella podremos disfrutar del sosiego y tranquilidad de este paisaje maravilloso. Tanto el color de sus aguas en su parte más somera como las vistas que nos regala a nuestro alrededor, hacen de ella un lugar idóneo para deleitarse con un magnífico día de playa.

Playa de Berellín (Prellezo)

La llamativa Playa de Berellín, punto final de la ensenada del mismo nombre, acaba en dos entrantes de arena – uno de ellos se llama Playa de Prellezo - rodeados por formaciones rocosas de gran belleza. Su acceso está limitado por las mareas, pero en los momentos en que es posible merece mucho la pena adentrarse por ellas y dejarse llevar por el color de las aguas, la arena de tonos blanquecinos y el asombroso y bonito entorno. Un aparcamiento próximo a la playa facilita la llegada hasta ella.