Cinco planes irresistibles para dar bienvenida al otoño en la isla que nunca duerme
¿Te resistes a despedir el verano? La capital de Mallorca es el lugar perfecto para seguir disfrutando del sol, el mar y la diversión estival con estos maravillosos planes.
Toca poner fin a la estación más vibrante y enérgica del año, pero, por suerte, aún hay lugares en nuestra geografía donde podemos estirarlo un poquito más.
Es el caso de Mallorca, que goza de buen tiempo durante gran parte del año para poder disfrutar al máximo de todas las propuestas que ofrece la isla. A su benigna climatología se suma la imparable agenda cultural de Palma y el hecho de poder disfrutar de sus estupendas playas sin apenas gente.
Descubre los mejores planes para “veroñear” en la capital balear y alarga el verano hasta que llegue Navidad.
Báñate en las mejores playas y calas sin multitudes
Las mismas playas que en julio y agosto están abarrotadas de gente, durante el resto del año son auténticos oasis de tranquilidad. La temperatura del agua puede que haya bajado un poco, pero durante los días soleados seguirá apeteciendo nadar en ellas.
La Playa de Palma es la más famosa y extensa de la ciudad, pero hay otras que también gozan de las aguas cristalinas del Mediterráneo y de la naturaleza balear, como es el caso de Cala Major, Cala Comtessa y Cala Fornells.
Haz una ruta en bicicleta por la bahía de Palma y más allá
En Palma hay diversos sitios donde es posible alquilar una bicicleta para recorrer el carril bici que bordea la bahía siguiendo el paseo de la Playa de Palma hasta el puerto deportivo. Esta zona es especialmente bonita al atardecer, cuando las luces se encienden y el ambiente de sus restaurantes contagia las calles.
Si sigues pedaleando, llegarás al castillo de Bellver, una fortaleza circular situada en una colina con espectaculares panorámicas de Palma.
Explora la historia y la cultura de Palma
Palma es una ciudad que merece la pena pasear sin prisas para descubrir todos los encantos que encierra, especialmente en su casco histórico, repleto de palacios señoriales, iglesias y establecimientos con encanto.
Descubre todos los secretos de la Catedral de Palma y sube a sus impresionantes terrazas para admirar la bahía desde las alturas.
También conocida como “La Seu”, esta obra gótica sorprende con su enorme rosetón, el cual forma un ocho al ser reflejado al otro lado de la fachada durante dos momentos concretos del año. Frente a la catedral se encuentra el Palacio de la Almudaina, una visita imprescindible.
Cuando termines estas visitas, piérdete por las laberínticas calles del barrio judío para desembocar en sus pequeñas plazas donde las tiendas de artesanía y los restaurantes continúan mostrando el encanto de otros tiempos.
Disfruta de la gastronomía mallorquina
Desde la ensaimada a la sobrasada, la gastronomía en Mallorca es una auténtica delicia para el paladar y en Palma podrás probarla sin fin, ya sea realizando una ruta de tapas, sentándote a la mesa de sus aclamados restaurantes o adentrándote en sus mercados.
El barrio de Santa Catalina está de moda por su vida nocturna y su apetecible escena gastronómica. No dudes en reservar mesa en alguno de sus restaurantes, te recomendamos Stagier Bar, o en acercarte al mercado del Olivar para degustar una amplia variedad de sabores.
Visita sus museos
En la agenda cultural mallorquina siempre hay interesantes propuestas, aunque los museos de la ciudad cuentan con interesantísimas exposiciones permanentes con las que disfrutar del arte local, nacional e incluso internacional.
Ubicado en una antigua fortaleza defensiva, podremos visitar Es Baluard, un museo de arte contemporáneo.
Los amantes del arte no pueden perderse Casal Solleric, la Fundación Juan March y, por supuesto, una visita guiada a la que fuera casa y taller de Joan Miró.