Descubre estos exclusivos alojamientos: en forma de tubo, con piscina privada y en medio de la naturaleza

Cuenta la mitología griega que las Pléyades eran siete hermanas, hijas del titán Atlas, que fueron perseguidas por Orión hasta que Zeus las convirtió en estrellas para protegerlas. Buscarlas desde la cama, bajo el cielo limpio de Sierra Morena, es quizá el plan más romántico que ofrece La Dehesa Experiences. Pero en este rincón de Córdoba hay otros muchos más. Relajarse en su bañera hidromasaje, pegarse un chapuzón en la piscina o desayunar con los primeros rayos del sol en su terraza privada son solo algunas de las propuestas.

Este exclusivo concepto de alojamiento tipo glamping ha revolucionado el turismo rural en el sur de España gracias a sus experiencias en pleno contacto con la naturaleza. 

El complejo se encuentra localizado en una finca ganadera de 27 hectáreas bañadas por un mar de encinas centenarias. Entre ellas se reparten sus seis cabañas estilo tiendas-safari y sus hotel burbuja con seis alojamientos Tubbo.

Lujo, naturaleza y sostenibilidad 

Este proyecto nació durante la pandemia, con la idea de ofrecer un alojamiento diferenciador para quienes huían de las masificaciones y del turismo tradicional en busca de experiencias en un espacio natural. Porque aquí, el slow travel es la norma.

El escenario no podía ser mejor. En plena Sierra Morena cordobesa, en una zona declarada por la UNESCO como Reserva Starlight, idónea para contemplar las estrellas gracias a sus impolutos cielos, que premian con las famosas Perseidas durante los meses de julio y agosto. Además, la finca cuenta con otras bondades, como su biodiversidad y sus paisajes tranquilos, pero cerca de atractivos culturales como la ciudad de Córdoba.

Para disfrutar de este entorno, la finca cuenta con una variedad de alojamientos integrados con el entorno y pensados para diferentes tipos de viajero, pero son sus Tubbos los que destacan entre las parejas que buscan una escapada llena de romanticismo. Se trata de cápsulas completamente acristaladas, y ubicadas sobre plataformas de 100 m², que permiten el contacto continuo con el entorno sin renunciar al lujo.

Estos Tubbos están equipados con piscina privada en la terraza, bañera de hidromasaje con vistas, ducha exterior con efecto lluvia, toldos eléctricos regulables, cama king size, productos de kilómetro cero y un completo desayuno servido cada mañana en la propia habitación.

Gastronomía a la carta

También el desayuno puede ser personalizado en todo momento, contando siempre como base con productos de temporada. Lo mismo sucede con el resto de comidas, que pueden realizarse en la habitación bajo petición. No hay un restaurante ni comedor común. Aquí impera la absoluta privacidad. Entre las delicias que se pueden degustar, destacan los embutidos, los aceites de oliva virgen y las carnes de crianza ecológica.

Porque este alojamiento íntimo, sostenible y especial es perfecto para desconectar del día a día. Ya sea disfrutándolo uno mismo o regalando una estancia a alguien especial. Para esta última propuesta ha creado un configurador de bonos intuitivo donde es posible elegir el tipo de alojamiento en el que alojarse y añadir experiencias como masajes, cenas o masajes.

Experiencias para todo el año

La Dehesa Experiences personaliza experiencias apropiadas para cada época del año, creando todo un calendario de opciones minuciosamente pensado que se puede disfrutar sin salir de la finca o a pocos minutos en coche.

El calendario de actividades anual de La Dehesa Experiences

Enero: hora de recargar las pilas

A todos nos ha ocurrido que terminamos las vacaciones navideñas más cansados de lo que las empezamos, y es que la retaíla de encuentros, comilonas y eventos no pasa sin pena ni gloria. Por eso las actividades de enero están centradas en la recuperación y el descanso: masajes relajantes, técnicas innovadoras como la maderoterapia y tratamientos en las propias suites.

Febrero: que viva el amor

La agenda de enero gira en torno al día más romántico del año. Las suites se decoran con temática de San Valentín, se organizan cenas a la luz de las estrellas y se preparan una serie de detalles para las parejas que visitan el complejo.

Marzo: el mes florido

Como si se tratara de un aperitivo de la primavera que comienza, los almendros siempre son los primeros en presumir de colores durante el mes de marzo. Los campos de almendros ubicados a tiro de piedra del glamping son el escenario ideal de los paseos guiados que ofrece la empresa.

Abril: naturaleza pura

Los amantes del senderismo disfrutarán especialmente en este mes, en que la temperatura es perfecta para hacer la ruta "Senda de los Ciervos" a través de los bosques locales. También es posible hacer paseos a caballo.

Mayo: ¿quién dijo feria?

Las fiestas de Córdoba son el gran acontecimiento regional. Desde la feria hasta os Patios o las cruces, el alojamiento se propone como punto de partida para visitar los grandes eventos locales y, también, para completar la experiencia reservando un paseo en carro de caballos.

Junio: surcando los cielos

El buen tiempo del mes de junio es perfecto para hacer una de las experiencias más impresionantes de la propuesta: un viaje en globo aerostático. Una forma diferente –superior– de vivir el paisaje.

Julio: hora de refrescarse

La mejor forma de convivir con las altas temperaturas estivales, con perdón de las piscinas privadas de las suites, es darse un baño en río. Por eso la actividad del mes de julio es una salida en kayak.

Agosto: lluvia de estrellas

Ya hemos comentado que la zona tiene certificación Starlight. Agosto, con sus magníficas Perseidas, es el momento ideal para organizar noches de observación astronómica guiadas por expertos.

Septiembre: pedal y montaña

Una vez ha bajado la temperatura, volvemos a hacerlos a la naturaleza asistiendo a las rutas en bicicleta por la montaña que propone el glamping. Una forma muy distinta y auténtica de descubrir el paisaje.

Octubre: la vida se abre paso

El mes de octubre es el mes del celo del ciervo y, con él, de su berrea. Desde el glamping se organizan salidas al amanecer o al atardecer para ser testigos de este fenómeno con guías expertos en la fauna.

Noviembre: gastronomía líquida

No hace falta decir que una de las joyas de Andalucía son sus aceites. El oleoturismo es la actividad propuesta en noviembre, con visitas a olivares, catas de aceites y, de paso, promociones especiales en Black Friday.

Diciembre: la gran fiesta

Para cerrar el año, desde el alojamiento se ofrecen dos grandes eventos: la búsqueda guiada de setas en la dehesa y, por supuesto, la Navidad. El complejo completo se decora y la experiencia recibe su guinda en forma de menús festivos.