Italia quiere que su "espresso" sea declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad
Para los italianos el espresso es mucho más que un café, es, prácticamente, una religión. Es por eso que han empezado a hacer campaña para que su célebre manera de preparar el café, para muchos la mejor del mundo, sea reconocida por la Unesco.
La cultura del café está claro que es importantísima para Italia. Los italianos no pueden vivir sin dos cosas cada día: una es la pasta, y otra su "espresso". No olvidemos que Italia es el país que inventó esa manera de hacer el café, a máquina, corto y extremadamente fuerte, casi como un shot y que se suele beber de un solo trago. Ahora, las autoridades italianas están iniciando una campaña para que el célebre espresso sea reconocido por la Unesco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, para salvaguardar su preparación tradicional y sus características.
El espresso, preparado en máquinas en bares y cafeterías es parte esencial de la cultura italiana. No se trata sólo de una manera de preparar el café si no de un auténtico ritual social. Eso es lo que dice al menos el Consorcio para la Salvaguarda del Café Espresso italiano tradicional, uno de los organismos impulsores de esta propuesta.
Aunque Italia tiene otros cafés igualmente célebres, como el Capuccino, el espresso se lleva la palma de la popularidad. Un 93% de los italianos lo consume habitualmente, ya sea en casa o en el bar.
Italia ya consiguió en 2017 que su Pizza Napolitana fuese declarada patrimonio inmaterial de la Unesco. Y es que este organismo internacional no sólo reconoce monumentos y lugares, sino cosas "intengibles" tan variadas como el Flamenco, la acupuntura china, la cerveza belga, las Fallas de Valencia o más recientemente, la cerámica de Talavera de la Reina.
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