Una villa medieval de España, entre los pueblos más bonitos del mundo, según ONU Turismo

Últimamente, me sorprendo a mí misma fantaseando en una retirada absoluta a la naturaleza y al silencio. Y cuanto más fantaseo, más posibilidades se me presentan en España. El bosque, casas acogedoras que mantienen la esencia del medievo, tranquilidad, tiendas artesanales, una comunidad muy reducida... Hay un sitio así que existe, y que ha sido escogido por ONU Turismo como uno de los pueblos rurales más bonitos del mundo para visitar. Que lo visites y quieras quedarte ahí a vivir es algo que puede pasarte, te voy advirtiendo desde ya.

Esta villa situada en lo alto del parque Natural Sant Llorenç del Munt i l'Obac, tiene todos los ingredientes perfectos para aquel que busca perderse en un pueblo medieval a tan solo una hora de la repleta Barcelona. Este municipio de la comarca el Bages podría denominarse como: un oasis verde y calmado, que ofrece mucho más que calles empedradas y casas medievales. Bienvenidos a Mura.

“Mura, Talamanca y Rocafort, tres pobles de mala mort”

Mura nunca ha podido presumir de tener una gran población. Las primeras noticias que tenemos de este municipio se remontan a la creación de la iglesia parroquial de Sant Martí que data de los años 1088. Alrededor de esta iglesia —y como cualquier otro pueblo de la historia de España— empezaron a reunirse los muratans para levantar las primeras casas del municipio.

A medida que pasaba el tiempo los habitantes de Mura aumentaban y disminuían con respecto a las plagas que azotaron la península en el siguiente siglo. La peste negra, las guerras de los Remences y la plaga de filoxera castigaron duramente a los muratans dejándoles sin habitantes y sin sus cosechas y viñedos. Por ello se popularizó bastante entre los habitantes de pueblos cercanos el dicho: “Mura, Talamanca y Rocafort, tres pobles de mala mort”.

Buscando otras formas de sobrevivir, los muratans probaron con la industria del carbón utilizando los troncos de árboles de la montaña, hasta que el uso de la energía eléctrica la hizo desaparecer. No parecían acertar en sus intentos de aumentar el pueblo, por lo que instalaron una fábrica textil de hilados a principios del s. XX. Esta fábrica estabilizó la subsistencia del pueblo durante unos años hasta que cerró en 1964, provocando un éxodo rural a Barcelona o pueblo cercanos que hicieron disminuir la población de Mura a mínimos históricos.

El turismo ha salvado este municipio en todos los términos posibles. Comprando segundas residencias y ahora gracias a la ONU y su reconocimiento, Mura se alza como uno de los pueblos rurales más bonitos del mundo. Quizás los constantes golpes que recibió y la poca población que ha tenido ha hecho que este pueblo mantengan intacta la esencia medieval.

Esto es todo lo que no puedes perderte en Mura

Por eso cuando llegues, deja el coche en el aparcamiento, te aseguro que no lo vas a necesitar. Recorrer a pie las calles empedradas y subir poco a poco descubriendo el casco histórico de Mura es un regalo para cualquier visitante. Sus casas históricas se mantienen casi intactas, por lo que viajar a otra época nunca había resultado tan fácil.

Otro de los puntos que no puedes perderte de este recorrido, y del que ya hemos hablado, es la iglesia de Sant Martí. Aunque no la encontrarás como los primeros murants. Esta iglesia ha ido ampliándose a lo largo de los años y ahora lo más destacado de su arquitectura es el tímpano de la puerta de acceso.

Paseando por Mura te encontrarás cuatro restaurantes contados. Nosotros te recomendamos que repongas fuerzas antes de seguir con tu camino en la Plaza d'Àngel Guimerà, donde encontrarás la terraza de un bar —seguramente llena—, en la que podrás disfrutar de ricos embutidos de la zona acompañados de un buen vino. Si tienes prisa porque en tu plan tienes pendiente alguna ruta, te aseguro que aquí encontrarás los mejores bocadillos para llevar.

La proximidad del parque Natural Sant Llorenç del Munt i l'Obac, un "must" en todos los sentidos

Para mis "ruteros" de confianza: este es el paraíso para hacer una buena ruta. Con una superficie protegida de 13.694 hectáreas, el parque natural de Sant Llorenç es perfecto para hacer senderismo por sus bosques, sus riscos y montañas. Es una experiencia única, por eso aquí están algunas de las rutas más bonitas de nuestro país.

Nosotros te recomendamos que sigas la ruta de Coll d'Estenalles a Mura que te ofrece un usuario en Wikiloc, con esta maravillosa ruta circular podrás ver panorámicas únicas y pasarás por Mura, donde podrás ver todo el pueblo, comer y luego continuar con las pilas cargadas. Así que ya sabes, es momento de ataviarte con tus zapatos especializados, tu bocadillo de embutido de Mura y tus ganas de vivir una experiencia medieval absoluta:

No te lo pienses mucho más. Este municipio es ideal para visitar en cualquier época del año, y combinándolo con una ruta tendrás el plan perfecto para alejarte del estrés de la ciudad. Eligiendo Mura como tu próxima escapada rural no errarás el tiro, te lo aseguro.