El Pueblo Mágico a menos de una hora de Madrid con el monasterio más impresionante de España

Son numerosos los monasterios que salpican la geografía española, cada uno con su particular encanto. El de San Lorenzo de Escorial presume de un encanto distintivo por ser considerado una de las obras arquitectónicas más importantes del renacimiento, construido entre los años 1563 y 1584 por mandato de Felipe II, quien lo convirtió en un símbolo de poder.

Su grandiosidad lo llevó a ser nombrado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984. Situado en San Lorenzo de El Escorial, a tan solo 60 kilómetros de Madrid, está rodeado de un entorno natural privilegiado, y es un lugar perfecto para escapadas de un día o fines de semana combinables con los encantos naturales que lo circundan, protagonizados por los bosques de la Sierra de Guadarrama.

Estos ofrecen numerosas rutas de senderismo y ciclismo idóneas para conocer la naturaleza madrileña.

Una de las rutas más populares es la que conduce a la Silla de Felipe II, un conjunto de plataformas escalonadas talladas sobre rocas de granito desde las que obtener impresionantes panorámicas. Su nombre viene dado porque se dice que este era el punto desde el que Felipe II supervisaba la construcción del monasterio.

Este Pueblo Mágico también ofrece la oportunidad de degustar una extensa oferta culinaria en sus numerosos restaurantes y recorrer calles históricas en busca de otros tesoros que visitar, como la Casita del Príncipe, un palacete rodeado de jardines que fue construido en el siglo XVIII como pabellón de recreo para Carlos IV, o el Real Coliseo de Carlos III, uno de los teatros más antiguos de España aún en funcionamiento. Edificado en el siglo XVIII acoge una variada programación a lo largo de todo el año.

Una joya arquitectónica e histórica

Diseñado por los arquitectos Juan Bautista de Toledo y Juan de Herrera, el Real Monasterio de El Escorial fue concebido como residencia real, con un panteón destinado a la familia de los Austrias y un centro religioso. Felipe II quiso erigir este edificio para conmemorar la victoria en la Batalla de San Quintín, acaecida en 1557, concretamente en el día de San Lorenzo. El lugar elegido respondía a su deseo de alejarse del bullicio de la Corte y crear un espacio para el recogimiento espiritual.

De estilo herreriano, nombre dado por el arquitecto que finalizó su construcción, se caracteriza por su simetría y sobriedad, que marcan tanto su fachada como sus salas, entre las que destaca la Sala de Batallas, decorada con frescos que cuentan las victorias militares españolas. Todo un lugar de peregrinación para los amantes de la historia y de la arquitectura. No es de extrañar que con esta fabulosa joya arquitectónica, San Lorenzo de El Escorial figure en la prestigiosa lista de Pueblos Mágicos de España.

Albergando el Palacio Real, la Basílica, la Biblioteca –que acoge miles de volúmenes históricos- y el Panteón Real, donde reposan los restos de la gran mayoría de monarcas que gobernaron España desde Carlos I. Junto al Monasterio se despliega el Jardín de los Frailes, un espacio verde ornamentado con fuentes y setos que ejemplifica la estética renacentista aplicada al paisajismo. Un fabuloso lugar para pasear y contemplar en calma el monasterio y la Sierra de Guadarrama.

Recorre la Gran Ruta de Ciudades Mágicas y Villas de los Antiguos Reinos, en la que se ubica San Lorenzo de El Escorial, con este mapa interactivo de los Pueblos Mágicos de España.