Esta playa es conocida como el "Caribe gallego": "Un auténtico espectáculo natural rodeado de acantilados"

Galicia es un sitio que, debido a su geografía, alberga los mejores lugares para hacer escapadas. Hay una presencia importante de la naturaleza (como en la gran parte del norte peninsular) y esto junto al paisaje marítimo hace que muchos turistas se acerquen a contemplar sus encantos.

Un pueblo costero en La Coruña contiene una playa a la que muchos llaman el "Caribe gallego", por su arena fina y agua turquesa, dos características que, recuerdan a auténtico paraíso. La playa de Fornos está ubicada en la península de Figueiroa, pertenece al municipio de Cariño. Se encuentra en la parte izquierda de la ria Ortigueira; una de las más altas de Galicia.

La playa tiene forma de media luna y está resguardada, por lo que es ideal para quienes buscan alejarse de las zonas más masificadas. Está rodeada de vegetación autóctona y por formaciones rocosas típicas del entorno natural atlántico. Los días sin nubes se pueden admirar unas vistas increíbles del litoral norte de Galicia: una verdadera joya visual. Además, su cercanía a los acantilados más altos de la Europa continental y al Cabo Ortegal proporcionan a este lugar un valor paisajístico inigualable.

Los alrededores de la Playa de Fornos invitan a perderse por sus senderos, que conectan con otros puntos de interés del municipio. Permiten combinar la playa con paseos por la naturaleza ofreciendo una experiencia completa.

Más sitios para explorar

Su cercanía a Cariño amplia aún más las posibilidades de disfrutar de Galicia. Además de la playa, puedes enriquecerte con la cultura del norte: visitar el casco urbano de Cariño, la Iglesia de San Bartolomé o adentrarte profundamente en sus tradiciones como la subasta de la lonja en su puerto pesquero.

Por otro lado, si te interesa más descubrir nuevos paisajes, El Mirador de Cabo Ortegal es la mejor opción. Es uno de los puntos más destacados del Geoparque del Cabo Ortegal. Desde allí hay unas vistas impresionantes de la costa gallega, incluyendo los islotes de Os Aguillóns y la Serra Capelada. También se ve el faro de Cabo Ortegal, y lo más impresionante es ver la unión del océano Atlántico y el mar Cantábrico.

La playa de Fornos no es la única que tiene para ofrecer esta zona. Situada en la ría Ortigueira, la Playa de Morouzos es conocida por su fina arena blanca, su entorno natural y sus dunas. Es uno de los arenales más extensos de la costa gallega y cuenta con la distinción de la bandera azul. Para llegar hay que cruzar un hermoso pinar; además, hay senderos y mesas para pasar el día tranquilamente. Es perfecta para hacer deportes como el surf, además cuando baja la marea se puede cruzar ir caminando a la Isla de San Vicente.