Oviedo, cruce de caminos, siglos y culturas
La capital del Principado celebra en 2025 un conjunto de efemérides que refuerzan su papel como destino cultural de referencia en el norte de España. El peso de su historia milenaria convive con el pulso de la modernidad, representado en dos grandes apuestas de futuro: la candidatura a Capital Europea de la Cultura 2031 y a Ciudad Europea del Deporte 2026.

¡Bienvenidos a Oviedo! Desde esta ciudad partió el primer peregrino rumbo a Santiago de Compostela: el rey Alfonso II el Casto, allá por el siglo IX. Por ello, Oviedo es conocida como el “Origen del Camino” y el kilómetro cero del Camino Primitivo.
Fue también Alfonso II quien ordenó custodiar en la ciudad, alejada de las amenazas infieles, una de las grandes reliquias de la cristiandad: el Santo Sudario, llegado a Oviedo oculto en un cofre hoy conocido como el Arca Santa, cuya apertura cumple este año su 950 aniversario. Aunque aquel día solemne del año 1075, en que el tesoro fue revelado ante la mirada del rey Alfonso VI de León y Castilla, su hermana la reina doña Urraca y el famoso Cid Campeador, queda ya lejos en el tiempo, su fuerza espiritual permanece viva casi mil años después.

Ese mismo legado se entrelaza con otra conmemoración destacada: el décimo aniversario del reconocimiento del Camino Primitivo como Patrimonio Mundial por la UNESCO. Una ruta que no para de crecer y cada vez más buscada por peregrinos que quieren un camino donde la autenticidad del paisaje aporta una conexión más profunda con la magia del Camino de Santiago.
Oviedo también celebra en 2025 los 40 años del reconocimiento del prerrománico asturiano como Patrimonio Mundial, un arte único en Europa. Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo fueron las primeras en recibir la distinción, ampliada más tarde con la Cámara Santa, San Julián de los Prados y la fuente de La Foncalada. Todos ellos forman hoy en día parte del conjunto reconocido como Monumentos de Oviedo y del Reino de Asturias.
La sidra y la calle Gascona
A estas celebraciones se suma un reconocimiento más reciente: la declaración de la Cultura Sidrera Asturiana como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Un legado vivo que alcanza su máxima expresión en la calle Gascona, el bulevar de la sidra y el corazón sidrero de la ciudad. Punto de encuentro de locales y visitantes que comparten “culinos” bien escanciados siempre acompañados de platos tradicionales. Porque, como mandan las buenas costumbres, la sidra siempre se toma en buena compañía social... y maridada con la mejor comida.

La fiesta del primer peregrino
Y como no hay celebración sin fiesta, cada julio Oviedo revive aquel primer viaje del rey Alfonso II y su comitiva con una recreación histórica que transforma durante una semana las calles de la vieja Vetusta —como la llamó el escritor Leopoldo Alas Clarín en su inmortal La Regenta— en una villa medieval llena de pendones, capas, caballos y ambiente festivo. La edición de este año será más grande y participativa que nunca, pues hay mucho que celebrar. La cita es del 11 al 13 de julio.
Capital cultural con futuro
Pero Oviedo no solo vive del pasado. La ciudad tiene también la mirada puesta en el futuro con determinación, como demuestra la candidatura a Capital Europea de la Cultura, un proyecto que se apoya en una visión regional consolidada por el respaldo del Principado de Asturias, la Junta General del Principado, la Federación Asturiana de Concejos y ayuntamientos como Gijón, Avilés, Siero, Mieres y Langreo.
El proyecto 2031 quiere reforzar la gran programación cultural de la que ya se disfruta en Asturias con otras iniciativas que generen y fortalezcan una nueva e innovadora industria cultural. Así termina este recorrido por una ciudad que lo tiene todo: historia, cultura, espiritualidad, gastronomía, naturaleza, arte y celebración. Un puzle perfecto que en Oviedo encaja sin esfuerzo. Y que en 2025 se completa con la fuerza de su pasado y la energía del presente.
Más información en www.oviedo.es

Deporte y naturaleza
En paralelo, Oviedo apuesta por convertirse en Ciudad Europea del Deporte 2026, una propuesta coherente con su entorno privilegiado. No es una exageración decir que en menos de 15 minutos, y sin salir del municipio, se puede pasar del corazón urbano y comercial a recorrer senderos que atraviesan montes, prados con ganado, ríos, cascadas y bosques donde respirar el aire limpio del paraíso natural asturiano.
¿Senderismo, bicicleta de montaña, rutas urbanas, running? No hace falta elegir. En Oviedo todo es posible. La ciudad ha trabajado en los últimos años para integrar el deporte en la vida local. No como una moda, sino como un hábito que se vive a cualquier edad. Una propuesta que también atrae a quienes buscan destinos equilibrados, sostenibles y con alma.