Masía Pou de la Vinya: un entorno natural lleno de belleza y de paz

Se puede llegar por distintas vías, pero la más rápida es por la autopista de los túneles que nos dirige a Sitges, saliendo por Sant Pere de Ribes. Otra posibilidad es venir por la nacional 340 en dirección a Vilafranca.

Es una finca de 9 hectáreas, rodeada de viñas y bosques de pinos y encinas, a las puertas del Parque Natural del Garraf. Se trata de un edificio de piedra, de más de 200 años, restaurado respetando la esencia del pasado, sin renunciar a las comodidades del mundo actual.

Cuenta con 4 habitaciones dobles con baño, con un gran salón con chimenea, con una cocina perfectamente equipada, y con un comedor anexo. Además, está envuelta de jardines en los que la naturaleza y la tranquilidad son los protagonistas.

El Cau es un salón comedor, un magnífico espacio para celebraciones familiares, con una barbacoa de horno de leña de Pereruela, donde se cocinan los calçots del huerto de la Masia Pou de la Vinya, paellas, parrilladas o cordero al horno… en cualquier época del año, además de una gran zona ajardinada para poder celebrar banquetes al aire libre. Pero si el tiempo no lo permitiera, en Pou de la Vinya disponen también de una gran sala polivalente donde poder organizar múltiples actividades e incluso, en caso de una climatología adversa, usar de comedor o sala de baile. Sin embargo, el punto fuerte de la finca se encuentra en magnífico enclave, en la fauna y flora que le rodea, en sus rincones llenos de calma y en sus vistas espectaculares.

Pou de la Vinya es el lugar ideal para escaparse de la ciudad, descansar y vivir una experiencia de paz y tranquilidad en plena naturaleza. Su filosofía: “que cada visitante que pase por Pou de la Vinya se sienta como en casa y que disfrute de una experiencia única”.