Una ruta por Mallorca a través de sus alojamientos

Convertida en un referente turístico del Mediterráneo, Mallorca concentra el 60% de la oferta de alojamiento de las Islas Baleares. Así, la isla se sitúa como el destino ideal para disfrutar de unas vacaciones en sus más de ocho tipos diferentes de alojamiento adaptados a las necesidades de cada viajero. Se trata de un destino pionero en el ámbito turístico que también ha sabido serlo en el terreno de la innovación y la calidad, especialmente en aquello que se refiere a asegurar una estancia segura a sus visitantes.

Calidad y especialización

Con la sostenibilidad como pilar fundamental, los hoteles mallorquines ponen a disposición del visitante una amplia variedad de servicios y de oferta complementaria para hacer de su experiencia en la isla algo único e irrepetible. Así, situados a lo largo de la costa mallorquina y en el centro neurálgico de la isla, en Palma, cada vez son más los hoteles que apuestan por la especialización como aspecto diferenciador: campos de golf, instalaciones para deportistas o parques y piscinas para los más pequeños son solo algunas de las opciones que se ofrecen en Mallorca.

Adentrarse en la Mallorca desconocida

Pero si lo que se deseas es huir de las zonas turísticas y adentrarse en la Mallorca rural, los hoteles de interior y rurales situados en los pueblos más pintorescos o en entornos paisajísticos de indomable belleza se convierten en la mejor opción para satisfacer al visitante.

La autenticidad como seña de identidad

Mallorca se puede disfrutar y conocer de infinidad de maneras y una de ellas es mediante las possesions. Estas fincas rurales ubicadas en la Sierra de la Tramuntana y en el Pla de Mallorca basan su estancia en la autenticidad, la paz y el sosiego que transmite el contacto directo con la naturaleza. Reformadas para albergar a aquellos que buscan unas vacaciones diferentes, estas viejas fincas agrícolas y casas señoriales te adentran en las costumbres mallorquinas y su filosofía de vida.

Refugios, albergues y zonas de acampada

Sin salir de la sierra de la Tramuntana, para aquellos que busquen un contacto todavía más directo con la naturaleza, las zonas de acampada y los refugios mallorquines se erigen como el alojamiento perfecto.

Paz y espiritualidad sin salir de la isla

Alejado de la vida cosmopolita de Palma y sumergido en la más absoluta tranquilidad se encuentran los santuarios y monasterios donde la paz y espiritualidad impregnan el ambiente en un contacto directo con la naturaleza. Estos alojamientos místicos gozan de emplazamientos singulares en parajes de extraordinaria belleza que harán de la estancia un recuerdo inolvidable.

Viviendas vacacionales

Además de todos los alojamientos mencionados, Mallorca ofrece como alternativa al alojamiento tradicional las viviendas vacacionales de particulares que se comercializan por periodos de corta duración y se ubican a lo largo de toda la geografía insular.