De los rascacielos de diseño a la selva, de las playas sedantes al ajetreo del Canal, del consumismo imparable a las costumbres indígenas, este país-istmo, cruce de caminos en el centro del mundo, busca su identidad en las mezclas, el contraste y el cóctel de intereses monetarios que la utilizan como un puente entre dos océanos.
Panamá, puente entre océanos
Enrique López-Tapia
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Los "Diablos Rojos" surcan las calles de la capital profúsamente decorados en su interior con e
Los "Diablos Rojos" surcan las calles de la capital profúsamente decorados en su interior con estampitas, luces o peluches. -
El Estado panameño ha reconocido cinco comarcas indígenas, que representan el 8 por ciento de la p
El Estado panameño ha reconocido cinco comarcas indígenas, que representan el 8 por ciento de la población. En la doble anterior, Gamboa Rainforest Resort, un complejo ecoturístico con exuberantes bosques y vida silvestre a orillas del río Chagres. -
Discoteca panameña.
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Vistas del centro financiero de Panamá.
Panamá, puente entre océanos
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Villa de Bastimentos.
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Ciudades, selvas y playas de Panamá (I)
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Panamá es todo un prodigio de la naturaleza, un territorio que cuenta con tres parques declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: La Amistad, Darién y Coiba. Arriba, una mujer kuna, y abajo, travesía en barca por el Caribe panameño. -
Los 15 parques nacionales de Panamá ocultan 967 especies de aves y 1.500 de mariposas.
