La ciudad de Europa que te enamorará: con noches de hotel por menos de 50 euros y vuelos por 40

¿Cuánto llevamos en el 2025? ¿Unas semanas o unos meses ya? Muy lejos quedan las vacaciones de Navidad me temo. Auguro que tu lista de propósitos para el año nuevo tenía mucho potencial, y que entre todas esas ideas viajar era una de las más importantes. Pues no sufras, porque yo te voy a ayudar a cumplirlo. He encontrado una ciudad que cuenta con mi sello de confianza preferido, las tres "b": bueno, bonito y barato.

Esta ciudad es una capital que el turismo no visita. O si lo hace no es en hordas masivas que estropean tu experiencia. Tiene noches de hotel a menos de 50 euros, y los vuelos para ir suelen rondar los 40 euros. Es una joya medieval muy bien escondida que está esperando ser descubierta. Hoy te llevo hasta Tallin, la conocida como "capital medieval del báltico".

Una ciudad al más puro estilo medieval, así es Tallin

Sí estás buscando vuelos a Tallin, encontrarás unos precios fantásticos para viajar desde nuestro país este mes. El más barato cuesta 41 euros. Y me parece increíble que por solo 40 euros puedas plantarte en la capital de la República de Estonia para disfrutar de una de las ciudades más bonitas de Europa. Porque sí, Tallin no suele salir a la palestra en cuanto estamos planeando un viaje o una escapada sencilla, y me parece un grave error considerando el gran patrimonio cultural e histórico que atesora.

Tallin está situado en la costa norte de Estonia, a orillas del golfo de Finlandia. Su historia es muy amplia y se refleja en los edificios que la forman. Su posición costera le dio importancia, y durante las cruzadas bálticas cayó en manos danesas. Paso más tarde por manos alemanas, suecas, rusas y consiguió la independencia definitivamente en 1991. Con la mezcla de estas culturas, Tallin es un lugar especialmente único, y la conservación de sus edificios han ayudado en gran parte a esto.

Que ver en Tallin, todos sus imprescindibles

En tu viaje a Tallin hay ciertos lugares que no puedes dejar escapar: el primero de todos es su casco antiguo. Este es bien conocido por conservar a la perfección las antiguas casas y comercios medievales, en los que no sabrás si has viajado a Estonia o directamente has sufrido un viaje en el tiempo.

Otro de los edificios históricos más visitados es el Castillo de Toompea, la primera fortificación de piedra que se construyó en la capital y que data de los años 1200. No se mantiene al cien por cien como en antaño, ha tenido que sufrir una serie de modificaciones para la seguridad de aquellos que la visitan, pero la esencia se mantiene casi intacta. Actualmente, es el edificio que acoge el parlamento de Estonia.

Hay unas puntas que destacan por encima del paisaje de Tallin y que corresponden a uno de los edificios más imprescindibles de la ciudad: la Catedral de Alejandro Nevski. Es una catedral ortodoxa-rusa construida en lo alto de la colina de Toompea que fue abandonada durante la ocupación nazi, pero que tras la independencia fue restaurada y ahora es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad.

No nos dejemos nada en el tintero, para ver Tallin tendrás que pasar por el centro neurálgico de la ciudad, su plaza mayor, más conocida como la plaza del ayuntamiento de Tallin. Aquí encontrarás el edificio del ayuntamiento, conocido por ser el único de estilo gótico de los estados bálticos, un edificio precioso que asombra por sus detalles.

Vuelos, estancia y alguna curiosidad

Como te he dicho, los vuelos a Tallin son un regalo. El más barato lo encuentras por 41 euros este mismo mes. En cuanto a la estancia, las noches de hotel en el centro rondan entre los 40 o 50 euros para sitios más que agradables, puedes encontrarlos más baratos con habitaciones compartidas, pero si vas solo o acompañado no debería costarte encontrar algo en el centro barato, cómodo y bueno.

Tallin es un lugar con esencia medieval, y esto te aseguro que es una esencia que se adhiere en todos sus edificios y locales. Hay un restaurante muy popular situado en el centro histórico, en el que te sentirás como si hubieses viajado directamente a 1492. La decoración, el ambiente, la carta, los camareros, la comida, los platos, la música... Todo está caracterizado para hacerte volver al medievo, y la experiencia es completamente única. Se llama Olde Hansa, y quien lo visita asegura que parece haber "cruzado un portal en el tiempo".

Tallin se presenta como un destino perfecto para estrenar tu año viajando. Asequible tanto en vuelos como en estancia, no hay excusas. Convence a quien quieras, pero lo más importante: convéncete a ti mismo para hacer este viaje, te aseguro que Tallin es una joya como destino.