Los 7 lugares más curiosos de la geografía española

Más cerca de lo que imaginas existen lugares de fantasía que asombrarían incluso a la persona más impasible. Acompáñanos y descubre lo que esconde la geografía española:

La Roca Grossa de Vilafamés

Cuando se pasea por el precioso pueblo de Vilafamés, en el interior de la provincia de Castellón, concretamente por la calle La Font, la principal de la localidad, de repente aparece, para nuestra sorpresa, una mole de más de dos mil toneladas adosada a una pared de piedra que flanquea la vía; pero lo más impresionante no es su enorme tamaño, sino su increíble inclinación, dando la sensación de poder deslizarse en cualquier momento y abalanzarse hacia los viandantes aplastándolos. Todo un fenómeno que se ha convertido en la principal atracción de este municipio, en el que existe la tradición de tocarla mientras se piden tres deseos.

La Geoda de Pulpí

Continuamos con formaciones gigantes y nos vamos hasta la provincia de Almería, esta vez al municipio de Pulpí, que está viviendo un sueño desde que, en 1999, el Grupo Mineralogista de Madrid descubriera la segunda geoda más grande del mundo tras la enormemente famosa de Naica, en México.

Esta espectacular formación geológica de cristales de yeso y sal, situada a 50 metros de profundidad en una explotación minera, supone un grandísimo descubrimiento dadas sus dimensiones y la calidad y transparencia de los cristales; una maravilla de la naturaleza que será posible visitar por primera vez en 2019.

El Osario de Wamba

La pequeña localidad vallisoletana de Wamba, la única de toda España que empieza por W, cuenta entre su patrimonio con una joya al lado de otra joya. La primera, la Iglesia de Santa María, un templo románico del siglo XII que conserva parte de otro más antiguo mozárabe, testigo de la época visigoda que vivió la villa – como atestigua el nombre de la localidad –; y el segundo, en una dependencia que sale del claustro de los restos del monasterio aledaño, la conocida como Capilla del osario, una inquietante sala donde se acumulan perfectamente ordenados miles de huesos y calaveras en lo que constituye el mayor osario visitable de toda España.

La Ciudad Encantada de Cuenca

En pleno Parque Natural de la Serranía de Cuenca, rodeado de pinares, se encuentra un curioso paraje en el que una serie de formaciones rocosas de formas inimaginables ha dado lugar a un conjunto en el que se respira un ambiente mágico.

En efecto, las rocas calizas han ido puliendo sus formas hasta dar lugar a figuras de cuento en las que podemos reconocer un sinfín de siluetas que acaban por dar al paraje un aire fantástico y casi animado. Parece increíble que hace 90 millones de años este espacio estuviera sumergido bajo el mar de Thetis y que, hoy en día, alcancemos a adivinar entre sus rocas la sombra de focas, elefantes, tortugas, osos, centinelas y el célebre perfil del icono de esta «ciudad encantada», el Tormo Alto.

El laberinto de Tentegorra

Sin alejarse mucho del centro de Cartagena, en el paraje de Tentegorra, el popular Parque Rafael de la Cerda, pulmón de la ciudad desde hace décadas, nos ofrece la experiencia de recorrer uno de los laberintos vegetales más grandes de todo el mundo. 5 200 metros cuadrados y un trazado de casi 5 kilómetros que podremos admirar desde lo alto si conseguimos alcanzar su mirador central, una vez hayamos sido capaces de orientarnos por uno de los múltiples itinerarios que nos invita a tomar el laberinto. Todo un desafío que supone, además de una divertida actividad de ocio, una hermosa fotografía de su espectacular trazado.

Museo submarino de Lanzarote

En 2016 comenzó la instalación de un proyecto que pretende ser el germen de un arrecife artificial que atraiga vida marina a la zona de la Bahía de Las Coloradas, en la costa sur de Lanzarote. Una serie de varios conjuntos escultóricos impactantes que, sumergidos en el fondo del mar a 12 metros de profundidad, forman el Museo Atlántico en una superficie de 2500 metros cuadrados accesible al buceo, suponiendo una curiosa iniciativa que nos ha regalado desde su creación bellísimas imágenes del lecho marino en simbiosis con el arte.

Puentedey, el pueblo sentado en un arco de piedra

En la comarca de Las Merindades, el río Nela ha creado una de las estampas más bellas de la provincia de Burgos, un espectacular puente natural en el que parece increíble que la fuerza de la erosión del agua haya horadado de esta manera la roca; quizás sea por ello por lo que la leyenda atribuye al «dedo de Dios» la creación de este puente. Pero la panorámica del puente desde el nivel del río cuenta con mucho más; y es que, sobre esta maravilla natural, se ha asentado la pequeña pedanía de Puentedey, creando un horizonte de enorme belleza enclavado en este magnífico entorno rural.