Kerala y los backwaters

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colores en Kerala

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Pequeña embarcación en los canales de Kerala.

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aroma de las especias

El aroma de las especias impregna la atmósfera de este territorio algo más extenso que Cataluña. Sus treinta millones largos de personas, además de poseer una belleza singular, transmiten la cara más amable de la India.

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En Kerala las tasas de alfabetización

En Kerala las tasas de alfabetización y esperanza de vida son equiparables a las de Europa.

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Mujer llevando un fardo en la cabeza en Kerala.

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Hombres en hilera trabajando con las redes de pesca

Hombres en hilera trabajando con las redes de pesca, escena cotidiana en las aldeas del oeste de Kerala.

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Costa Malabar

Desde el año 3000 a.C. la Costa Malabar ha sido un importante centro de comercio con Mesopotamia, Egipto, Grecia, Roma, Jerusalén y los árabes, con ciudades portuarias históricas como Kozhikode (antigua Calicut), Cochín, Quilon y Kannur (Cannanore), que fueron, durante siglos, frecuentadas por fenicios, romanos, chinos y árabes.

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iglesia y escuela de Santo Tomás, en Thrissur

Las ciudades de Kerala siempre han sido muy cosmopolitas y albergaron las primeras comunidades de varias religiones en la India, entre ellas la cristiana.San Francisco Javier empezó a predicar y enseñar la doctrina católica en estas costas. En la imagen, iglesia y escuela de Santo Tomás, en Thrissur.

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Los saberes milenarios del ayurveda

Los saberes milenarios del ayurvedaEn verano las lluvias del monzón traen consigo el mejor momento para entregarse a un tratamiento ayurvédico, la medicina tradicional india que, con más de 5.000 años de antigüedad, armoniza cuerpo, mente y espíritu. Centros perfectamente homologados desde clínicas hasta hoteles de cinco estrellas abren sus puertas por toda Kerala para un retiro holístico y no solo a quienes estén enfermos, ya que el ayurveda aspira a restablecer el equilibrio entre lo emocional y lo físico, así como a prevenir los males y conservar a largo plazo un estilo de vida saludable. La sabia combinación de masajes con aceites, una dieta aliñada con los extractos de hierbas que aquí abundan y ejercicios entre los que no faltan la meditación y el yoga puede obrar milagros.